Organización para la Seguridad y
 la Cooperación en Europa

Foro Económico (Consejo Superior)

Resumen de la Presidenta de la Octava Reunión del Foro Económico

14 de abril del 2000

 

Cuarto día de la Octava Reunión
8-FE (CS) Diario Nº 4, punto 6 b) del orden del día

 

1. De conformidad con el Capítulo VII de las Decisiones de Helsinki 1992 y con arreglo a la Decisión Nº 308 de 1 de julio de 1999 y la Decisión Nº 340 de 10 de febrero del 2000 del Consejo Permanente, la Octava Reunión del Foro Económico tuvo lugar en el Palacio Czernin de Praga del 11 al 14 de abril del 2000. Los participantes en el Foro Económico eran representantes de alto nivel de Estados participantes responsables de la configuración de la política internacional económica y medioambiental en la zona de la OSCE. Algunos Estados participantes incluyeron en sus delegaciones a representantes del sector privado y de organizaciones no gubernamentales.

Se invitó a asistir a la reunión del Foro Económico a los Socios para la cooperación (Japón y la República de Corea) y a los Socios mediterráneos para la cooperación (Argelia, Egipto, Israel, Jordania, Marruecos y Túnez).

También se invito a participar en la Octava Reunión del Foro Económico a las siguientes organizaciones internacionales: Consejo de Europa, Secretaría de la Carta de la Energía, Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, Organismo Europeo de Medio Ambiente, Banco Europeo de inversiones, Organismo Internacional de Energía Atómica, Organización Internacional de Trabajo, Fondo Monetario Internacional, Organización del Tratado del Atlántico del Norte, Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas, Secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, Organización Mundial de la Salud y otras organizaciones pertinentes.

La Presidencia organizó también una reunión especial de miembros de la comunidad mercantil que formaban parte de las delegaciones con el Sr. Petr Karas, Presidente de la Asociación de Industriales de la República Checa, durante la cual la Presidenta habló de las perspectivas y los problemas de la reestructuración industrial.

2. En contraste con foros anteriores, se invitó a representantes de las Misiones de la OSCE sobre el terreno, de organizaciones internacionales, de organizaciones no gubernamentales y otros agentes importantes a que presentaran informes para su debate en grupos de trabajo. La calidad de los debates se benefició mucho de la presencia de personas especializadas y de la preparación de los documentos de antecedentes que se pusieron a disposición de los participantes.

3. En la sesión plenaria, el representante del país anfitrión, Secretario General del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Checa, Sr. Zdenek Matejka, el Secretario General de la OSCE, Embajador Jan Kubis, y la Presidenta, Embajadora Eva Nowotny, tomaron la palabra ante el Foro Económico.

4. También tomó la palabra en la sesión plenaria el Coordinador de las Actividades Económicas y Medioambientales de la OSCE, Sr. Thomas Price, quien llamó la atención sobre problemas socioeconómicos incipientes y sobre desafíos futuros.

5. El examen del cumplimiento de los compromisos contraídos en materia de dimensión económica constituyó la primera parte de la reunión. El Secretario Ejecutivo de la CEPE/Naciones Unidas ofreció una evaluación de los resultados alcanzados por los países en transición y preconizó un enfoque que tuviera en cuenta las circunstancias individuales y la diversidad, en vez de procurar aplicar métodos uniformes. Al mismo tiempo la CEPE seguiría prestando apoyo al proceso de reforma con análisis y asesoramiento.

6. Durante el debate sobre los discursos temáticos se expusieron algunas posiciones bien diferenciadas. Mientras algunas delegaciones insistían en que continuaran las reformas y, más específicamente, la creación de instituciones y el cumplimiento de la ley, otras eran partidarias de un enfoque más diferenciado que tuviera en cuenta las trayectorias especificas de los diversos países en transición. En este contexto se puso de relieve la posible erosión de la legitimidad política como resultado del costo social de la reforma, que puede obligar a los sectores decisorios a restar valor a las reformas previstas o a abandonarlas complemente. La creación de nuevos puestos de trabajo y el crecimiento económico se citaron como factores principales que podían generar repercusiones políticas. Se criticó la continuación de prácticas comerciales que impedían una competencia equitativa en un campo de operaciones igual para todos. Además, el colapso de los principales mercados afectaba de forma diferente a cada uno de los países.

7. La sesión plenaria del miércoles 12 de abril se inauguró con un discurso de Emomali Rakhmonov, Presidente de la República de Tayikistán, que ofreció un panorama general de la situación de las reformas económicas y políticas en Tayikistán.

Otros discursos temáticos pronunciados por el Sr. Marc Franco (CE), la Sra. Danuta Huebner (CEPE/Naciones Unidas) y el Sr. John Fawcett (Grupo internacional de crisis) trataron de las lecciones aprendidas por la comunidad internacional en el caso de Kosovo, y la importancia de basar las actividades de rehabilitación y reconstrucción en expectativas realistas, en especial cuando se trataba de plazos de tiempo y de las capacidades de absorción de los que reciben la ayuda.

Los representantes de ONG indicaron que un importante problema generado por la situación actual era la corrupción, a cuyo respecto la comunidad internacional de ayuda podría desempeñar el papel de asociado útil y voluntarioso. En su opinión, la respuesta consistía en que se reformara la comunidad de donantes propiamente dicha. Algunas delegaciones, particularmente de países donantes, pensaban que una solución viable del problema de la corrupción consistía en una separación estricta y una retirada pública del sector económico, en la mayor medida posible.

8. El debate sobre el tema general "Aspectos económicos de la rehabilitación postconflicto: los desafíos de la transformación" del Foro se centró en la relación entre economía y política. Esta dualidad se reflejaba en la separación organizativa entre organizaciones internacionales políticas y organizaciones internacionales económicas, así como en la yuxtaposición de la rentabilidad y de las ventajas políticas. Se identificaron los problemas derivados del hecho de que los límites de esas dos esferas estaban desdibujados y se recabó una definición más clara de la función y el cometido de la OSCE en la esfera institucional. Según esta opinión, era importantísimo que haya un entorno jurídico claro, previsible y transparente. Se estimuló firmemente a que se introdujeran reformas en la judicatura que promovieran la independencia económica y realzaran la competencia profesional de los jueces. Otros de los que participaron en el debate indicaron que en algunos casos los fondos se habían asignado mal y que se habían adoptado decisiones en materia de inversiones sin transparencia y sin consideración para sus repercusiones sociales, medioambientales y políticas; también mencionaron la equiparación de la mujer en los proyectos. Se criticó la práctica de algunas democracias incipientes que se servían de los acuerdos internacionales, especialmente en la esfera de la protección medioambiental, como confirmación simbólica de su soberanía sin tener el firme compromiso de alcanzar los objetivos indicados. Por otra parte, algunos de los oradores recalcaron el papel positivo de la soberanía, que faculta a las democracias incipientes para elegir modelos de reforma apropiados y para evitar la recaída en una situación de dependencia.

En cuanto al papel de la OSCE en la rehabilitación postconflicto, algunos oradores destacaron que la OSCE, que no era una organización de donantes, tenía que formar parte integrante del complejo esfuerzo de rehabilitación. Aprovechando las ventajas que le daba el hecho de ser una organización relativamente flexible con un enfoque muy amplio, la OSCE debería definir claramente los objetivos políticos de cada proyecto y determinar sus resultados políticos. En este contexto se subrayó también la importante función y la útil aportación de las misiones de la OSCE sobre el terreno y se expresó satisfacción por la presencia de Jefes de Misión en el Foro. Para poder determinar a fondo los resultados obtenidos por la OSCE respecto de sus objetivos estatutarios, los participantes destacaron la importancia de que el Coordinador de las Actividades Económicas y Medioambientales (CAEMA) de la OSCE presentara informes de actividad regulares y más fundamentales. También se recomendó que la OSCE promoviese su cooperación y coordinación con todas las organizaciones internacionales, subregionales y no gubernamentales con las que tenga valores comunes.

9. Los debates de los grupos de trabajo se centraron en los siguientes temas principales:

a) Rehabilitación económica y medidas subsiguientes en la transición: creación de instituciones, Estado de derecho y función de la sociedad civil (GT I)

b) Repercusión medioambiental de los conflictos y medidas de rehabilitación (GT II)

c) Experiencia adquirida en las actividades de rehabilitación postconflicto (GT III)

10. El Grupo de Trabajo I subrayó la importancia del fomento de la confianza entre gobiernos y minorías. La integración de minorías estaba reconocida como requisito previo para la integración de un Estado en las estructuras europeas. La OSCE debía seguir facilitando la integración de minorías en la vida social. La OSCE podía explorar también las repercusiones de la privatización para las minorías.

Con referencia a las ONG se indicó que desempeñaban una importante función en el sistema de límites y equilibrios y en la sociedad civil. Brindaban un acervo de conocimientos técnicos y eran de utilidad para desarrollar aptitudes en materia de capacitación y protección.

Los representantes de misiones de la OSCE intervinieron en relación con el tema de la transparencia, la buena gestión pública y las instituciones sólidas para la lucha contra la corrupción. Entre los factores que contribuyen a la corrupción se mencionaron el monopolio de cargos y puestos públicos así como las agrupaciones que se beneficiaban de la congelación de conflictos. Algunas delegaciones propusieron que las futuras actividades de la OSCE incluyeran, en el marco de los respectivos mandatos para las misiones, la vigilancia del actual estado de la aplicación de iniciativas para luchar contra la corrupción así como la identificación de necesidades en materia de programas y capacitación. También se podía encomendar al CAEMA y a la OIDDH que contribuyeran a ese proceso.

11. Los participantes en el Grupo de Trabajo II recalcaron la importancia de la cooperación medioambiental como medida concreta de prevención de conflictos y también como elemento indispensable de la rehabilitación y la reconstrucción postconflicto. Hicieron hincapié en que la determinación técnica de las investigaciones imparciales e independientes (como, por ejemplo, el informe del Grupo de Tareas de los Balcanes) podían brindar un útil marco común de referencia. El Grupo de Trabajo reiteró su apoyo al Programa regional de reconstrucción medioambiental para Europa sudoriental.

Los debates destacaron el papel de la OSCE en el desarrollo de una comprensión común de diversos aspectos de cuestiones medioambientales en el contexto de conflictos (como, por ejemplo, el costo de las operaciones de limpieza, la organización de intervenciones rápidas en casos de emergencia ambiental, los parámetros para el éxito de una cooperación medioambiental regional, etc)

Respecto de las cuestiones hídricas y energéticas en Asia central, la reunión confirmó que la gestión de los recursos hídricos era una fuente de tensiones en la región. Recalcó la necesidad de acuerdos marco para reforzar la coordinación, incluido el establecimiento de un mecanismo de solución de controversias para armonizar los intereses competitivos de los países. También confirmó la necesidad de reforzar las organizaciones regionales existentes, cuyo funcionamiento mejoraría con la existencia de mejores corrientes de información y de una mayor participación pública.

Se dijo que un importante papel de la OSCE consistía en recabar apoyo político para el proceso de negociación de acuerdos marco apoyados por el programa TACIS de la Unión Europea y en particular para la pronta conclusión de dos acuerdos regionales, respecto de los cuales hay ya un acuerdo de principio. La OSCE tenía también un papel que desempeñar para facilitar la coordinación de los donantes y para fomentar la corriente de informaciones y aprovechar al máximo a sus misiones en la región a ese respecto.

En el plano práctico se consideró que el papel más importante de la OSCE estaba en la esfera de la creación de instituciones y la capacitación de funcionarios y expertos para los países de Asia central, especialmente en las técnicas de negociación y creación de consenso, familiarización con el derecho internacional, participación en procesos de negociación mundiales y regionales, así como incorporación del derecho internacional al derecho nacional.

12. En cuanto al papel de la mujer, el Grupo de Trabajo III indicó que las sociedades postconflicto tenían opiniones muy diversas acerca de los principios de la equiparación, pues las mujeres podían quedar afectadas de forma diferente y más notable que los hombres. Ahora bien, como la cuestión de la equiparación de la mujer es de por sí sumamente compleja, la pauta resultante no tenía nada de uniforme y la pérdida de posibilidades se complementaba con nuevas oportunidades para la mujer en otras esferas, como por ejemplo la de las pequeñas empresas.

Para los países afectados, la magnitud y la composición de las corrientes de refugiados constituía un grave problema en los casos comunicados, que entrañaba consecuencias trascendentales para los presupuestos nacionales e internacionales, para el medio ambiente y para la infraestructura social. Cuando se trata del papel concreto de la OSCE en la cuestión de los refugiados, su principal activo, según se dijo, era su enfoque amplio que vinculaba las dimensiones humanitaria, política y económica. La OSCE, en estrecha cooperación con la ACNUR y otros organismos pertinentes, debía apoyar y desarrollar estrategias regionales que promovieran el regreso de los refugiados y las personas internamente desplazadas, además de participar en la verificación del cumplimiento de esos programas.

Se expusieron diferentes opiniones acerca de la utilidad de promover proyectos económicos conjuntos a uno y a otro lado de las fronteras de las zonas de conflicto. Sin embargo, se indicó que el mejoramiento de las relaciones interétnicas era un incentivo poderoso para los inversionistas. Con referencia a la comunidad de donantes, se dijo que el principal problema era la urgente necesidad de racionalizar los aspectos financieros de los proyectos. La falta de coordinación era causa de que hubiera programas superfluos y que se superponían, y de que se desperdiciaran los recursos.

13. El Foro examinó también en una sesión especial el tema titulado "Desafíos de la transformación: un marco para la recuperación económica".

Pronunciaron discursos de orientación la Sra. Eugenia Date-Bah (OIT), el Sr. Christopher Cviic (BERD) y el Sr. Geoffrey Hamilton (CEPE/Naciones Unidas).

La Sra. Date-Bah analizó las graves consecuencias de las situaciones posteriores a las crisis para el mercado laboral y para las perspectivas de empleo remunerado de grandes partes de la población (especialmente mujeres, agricultores y otros grupos vulnerables); por su parte, el Sr.Cviic puso de relieve la participación positiva del BERD en la asistencia para el desarrollo de PYME y para las actividades del sector privado en general.

El Sr. Hamilton se refirió a la experiencia de larga data de la CEPE en Europa sudoriental para ilustrar las dificultades que plantea la consecución del crecimiento y la estabilidad económicos, destacando especialmente las esperanzas de que el Pacto de Estabilidad para la Europa sudoriental tenga consecuencias positivas.

La segunda sesión especial del Foro se ocupó del Estado de derecho, la buena gestión pública y la necesidad de luchar contra la corrupción. En sus discursos de orientación, el Sr. Ludovico Aigrot (Consejo de Europa) describió los instrumentos de que dispone el Consejo para luchar contra la corrupción, el Sr. David Pearce (Banco Mundial) expuso un análisis de las actividades realizadas por el Banco para resolver el problema, y el Sr. Daniel A. Bilak (Asesor del Gobierno de Ucrania) presentó un estudio temático de la actual situación en ese país.

Consideraciones operativas

- Se insistió en que la dimensión económica necesitaba actualmente más aplicación práctica que en el pasado. Para conseguirlo, debía estimularse la aportación de resultados más sustanciales y significativos de la comunidad mercantil. Una mejor cooperación entre la OSCE y la instituciones especializadas en el sector económico, medioambiental y financiero, así como las organizaciones subregionales, seguía siendo prioritaria. En su calidad de vínculo indispensable con la sociedad civil, las ONG eran asociadas estratégicas.

- Al mismo tiempo, había que poner de relieve el valor y las consecuencias del Foro Económico dentro de la OSCE. Había amplio acuerdo en que los principales resultados del Foro debían reflejarse en la actividad práctica de la Secretaría y de las misiones sobre el terreno. Debía invitarse a las misiones a que, a su vez, proporcionaran su evaluación de las actividades del Foro. También se recomendó que hubiera debates regulares acerca de la dimensión económica en el Consejo Permanente (CP) así como presentaciones conjuntas de los informes de la CEPE/Naciones Unidas y el Foro al Consejo Permanente y peticiones para que las misiones produjeran informes de situación sobre cuestiones económicas y medioambientales que tuvieran implicaciones en materia de seguridad, y que estuvieran abarcadas por sus correspondientes mandatos.

- A la Presidenta le agradó observar que muchos participantes acogían con satisfacción y elogiaban la nueva presentación del Foro. Ahora bien, era imperativo considerar toda sugerencia en favor de nuevas mejoras. Por ejemplo, sería útil continuar el año venidero un procedimiento de evaluación encaminado a identificar arreglos, temas y otras prácticas que hayan tenido éxito.

- La idea de que el CAEMA siga presentando un informe de actividad se apreció mucho en los debates. Si se ponía debidamente en práctica, el resultado podría ser una herramienta eficaz para fomentar las actividades de la dimensión económica y para obtener resultados concretos. Cada una de las personas que ocupe la Presidencia en ejercicio debía ser responsable de la elaboración del programa de trabajo y de su ejecución por el CAEMA.

- Hubo acuerdo general en que había que intensificar los esfuerzos desplegados para delimitar funciones y jurisdicciones así como para distribuir responsabilidades entre organizaciones internacionales que actúen en esferas análogas, a fin de evitar la duplicación de la labor y el consiguiente desperdicio de fondos. La OSCE podría asumir un papel de coordinación en ese proceso.

- La experiencia adquirida sobre el terreno en relación con la rehabilitación postconflicto confirmaba que la resolución de conflictos regionales era condición previa para una cooperación política y económica en gran escala, pero que, a la inversa, las actividades económicas podían dar también un impulso decisivo al proceso de paz. La necesidad de integrar estrategias económicas en la cartera de actividades políticas de la OSCE, particularmente en la esfera operativa de las misiones, siguía siendo cada vez más evidente.

- Hubo acuerdo general en que el próximo Foro Económico se celebrase en Praga, posiblemente en mayo del año 2001. Después de mantener consultas sobre el particular se previó que el tema general del Foro fuera "Transparencia y buena gestión pública en el campo económico". Se sugirió que el Foro del año 2002 se ocupase de la amplia cuestión de las repercusiones socioeconómicas del desarme.

- Se convino en que, una vez más, el próximo Foro Económico fuera preparado principalmente por seminarios. Esos seminarios se centrarían en cuestiones geográficas y temáticas. Las preparativos debían ser responsabilidad de la próxima Presidencia. Deberían desarrollarse en fecha temprana, para que una decisión acerca de los subtemas del Foro Económico pudiera basarse en conclusiones derivadas de esos seminarios.

- Para organizar la Novena Reunión del Foro Económico, la Presidenta en ejercicio había delegado la responsabilidad (a partir del 1 de mayo del año en curso) de dicha Reunión en el Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Rumania.