OTAN - Rusia - Ucrania

 

Reunión Ministerial

Comunicado Final

Florencia, Italia; 24 de mayo de 2000

 

1. Hoy, en Florencia, reafirmamos nuestra determinación de promover la paz, la estabilidad y la libertad, gracias a una Alianza Atlántica fuerte, fundada en los principios de la democracia, el respeto de los Derechos Humanos y la primacía del Derecho. Con el objeto de mejorar aún más la implementación de las decisiones tomadas en la Cumbre de Washington hemos dado orientaciones y nos hemos centrado en los resultados de los esfuerzos realizados por la OTAN para brindar una paz y una estabilidad duraderas a la Europa del Sudeste.

 

2. La OTAN está firmemente decidida a promover la seguridad, la estabilidad, la paz y la democracia en el sudeste europeo. Las operaciones para el mantenimiento de la paz dirigidas por la OTAN en Bosnia Herzegovina y en Kosovo, al igual que la iniciativa lanzada por la Alianza para el sudeste europeo, prueban nuestra determinación de alcanzar esos objetivos. Agradecemos a los colaboradores[1] de la OTAN y demás países por su valiosa contribución con este esfuerzo. Reiteramos particularmente nuestro reconocimiento al apoyo que los países limítrofes de Kosovo, Albania y la ex República Yugoslava de Macedonia, siguen proporcionando a la KFOR. Reafirmamos nuestro apoyo a la integridad territorial y a la soberanía de todos los países de la región. A través del Consejo en Sesión Permanente y de las autoridades militares de la OTAN, seguimos controlando atentamente la situación de la región en su conjunto. Homenajeamos a los militares de todos los países que participan en las operaciones realizadas en los Balcanes por su profesionalismo y devoción al servicio de la paz y la estabilidad. Expresamos nuestro profundo aprecio por las familias de quienes dieron su vida y por aquéllos que resultaron heridos durante el cumplimiento de su misión. 

 

3. Nos enorgullecemos por los cambios democráticos que tuvieron lugar en Croacia luego de las elecciones legislativas y presidenciales históricas que acaban de realizarse. Alentamos a Croacia para que continúe con su vasto programa de reformas, en las que pueden inspirarse los países de la región que todavía no forman parte de la Comunidad Euro Atlántica. Apoyamos plenamente las mejoras en las relaciones entre Croacia y Bosnia Herzegovina. Estamos satisfechos con el compromiso de Croacia de aplicar íntegramente el Acuerdo de Paz de Dayton, de anticipar el retorno de los refugiados sin discriminación alguna, de cooperar con el Tribunal Penal Internacional a favor de la ex Yugoslavia (TPI) y de promover la seguridad regional. Nos alegramos ante la perspectiva de la futura firma del Documento Marco del Partenariato para la Paz (PPP) por parte del ministro croata de Relaciones Exteriores, así como de la participación de Croacia en la reunión en sesión ministerial que el Consejo del Partenariato Euro Atlántico (CPEA) llevará a cabo posteriormente. Cooperamos estrechamente con Croacia en el seno del CPEA y del PPP, especialmente en el campo de las operaciones de mantenimiento de la paz y de la reforma y control democrático de las fuerzas armadas croatas.

 

4. Nos comprometemos con la realización integral en Kosovo de los objetivos de la Comunidad Internacional, tal como fueron definidos por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en la Resolución 1244. Seguimos trabajando por un Kosovo pacífico, multiétnico, multicultural y democrático, donde cada individuo, independientemente de su raza o religión, pueda vivir en paz y con seguridad, así como gozar de las libertades y los Derechos Humanos Universales, incluidos los derechos de las personas que integran minorías, para que puedan participar plenamente en las instituciones democráticas sobre una base de igualdad.

 

5. Durante el año pasado, a partir del despliegue de la fuerza de seguridad dirigida por la OTAN (KFOR), se realizaron importantes progresos en Kosovo. En el plano de la seguridad, la situación mejoró considerablemente. Desde la llegada de la KFOR, más de un millón de refugiados y personas expatriadas, víctimas de una campaña de depuración étnica particularmente brutal, pudieron retornar a sus hogares.

 

6. Expresamos nuestro firme apoyo a la Misión de las Naciones Unidas en Kosovo (MINUK) y al Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas. Estamos muy conformes con el excelente nivel de coordinación y de cooperación establecido entre la KFOR y la MINUK  en la aplicación de la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. La MINUK instauró estructuras administrativas  mixtas interinas en las que los habitantes kosovares trabajan conjuntamente para crear una sociedad democrática fundada en la primacía del derecho, la tolerancia y el respeto de los Derechos Humanos y de los derechos culturales. Estamos satisfechos con la valiente decisión de aquellos serbios de Kosovo que resolvieron ocupar el lugar que les pertenece en el seno de estas estructuras,  junto a los albaneses de Kosovo y a los miembros de otras comunidades. Incentivamos a los dirigentes de todas las comunidades, y en particular a los dirigentes serbios de Kosovo, a formar parte de este proceso. Una plena participación en dichas estructuras contribuirá a garantizar un porvenir multiétnico en esa región.

 

7. En esta perspectiva, apelamos a todos los miembros de la comunidad kosovar a participar en las elecciones municipales que se llevarán a cabo este otoño. Felicitamos a la OSCE por su iniciativa para organizar y supervisar elecciones que se desarrollen en condiciones de seguridad, libertad y equidad. La KFOR constituirá un sostén esencial. La elección de nuevos dirigentes representativos a nivel municipal en todo el territorio kosovar contribuirá a consolidar la primacía del derecho, la autonomía administrativa municipal y el desarrollo de la democracia. Reconocemos el aporte significativo de otras organizaciones gubernamentales y no gubernamentales durante este proceso de normalización.

 

8. Ciertamente se han realizado importantes progresos, pero queda todavía mucho por hacer, particularmente en lo que respecta a la protección de los grupos y minorías étnicas. Desafortunadamente los grupos minoritarios quedan a merced de los actos de violencia cometidos por los extremistas albaneses de Kosovo. Esto constituye uno de los problemas más delicados a los que se enfrenta la KFOR y la MINUK. Condenamos todos los actos de violencia motivados por cuestiones étnicas, políticas o criminales. Felicitamos a la KFOR por haber adoptado medidas enérgicas contra todos los extremismos y por haber garantizado  seguridad y protección a los miembros de los diferentes grupos y minorías étnicas. Valoramos y apoyamos los esfuerzos desplegados por la MINUK para intensificar la lucha contra el crimen organizado, el tráfico y la posesión ilegal de armas y la trata de blancas, así como sus esfuerzos por implementar un sistema judicial y una fuerza policial competentes. Estamos decididos a permitir que todos los exiliados  hagan uso de su derecho de retornar a Kosovo. Debemos destacar que los dirigentes locales deben expresarse abiertamente contra la violencia ejercida sobre las minorías, a favor de un Kosovo multiétnico y cumplir asimismo con sus compromisos. La violencia étnica es inaceptable y comprometerá  el apoyo que la Comunidad Internacional continúa brindando a Kosovo.

 

9. La ciudad de Mitrovica constituye un centro de fuertes tensiones interraciales que requiere una particular atención. Homenajeamos a la KFOR y a la MINUK por los resultados obtenidos mediante sus esfuerzos conjuntos en favor de la coexistencia en una Mitrovica unida y segura. Estamos muy complacidos por la reciente designación de un administrador regional para  Mitrovica, nuevo testimonio de la determinación de la MINUK de asentar su autoridad en todo el territorio de Kosovo. Condenamos las tentativas provenientes de Belgrado o de otras regiones que buscan atizar las tensiones étnicas en esta ciudad.

 

10. Nos preocupa la violencia y la inestabilidad que aún persisten en la vecindad del límite interno entre Kosovo y Serbia. Apoyamos plenamente las medidas adoptadas por la KFOR para reforzar el control que ejerce en las fronteras y en los límites de Kosovo, así como las acciones que lleva a cabo con firmeza contra aquellos que desean utilizar a Kosovo como base para exportar la violencia. Consideramos que toda agitación o inestabilidad en esta zona es una amenaza que afecta nuestros esfuerzos por instaurar la paz y al estabilidad en el conjunto de la región.

 

11. Nos alegramos por los progresos realizados con la creación del Cuerpo de Protección de Kosovo (CPK), que obra como organismo civil, apolítico y multiétnico en favor de todas las comunidades y bajo la estrecha supervisión de la MINUK y de la KFOR. Estamos muy satisfechos con el establecimiento del Código Disciplinario y el Marco de Control del respeto a los compromisos del CPK y subrayamos que cualquier infracción a estas reglas será tratada con dureza. Ratificamos las medidas adoptadas por la KFOR para asegurar el respeto del Código Disciplinario, fijando las orientaciones y tareas operacionales diarias del CPK bajo la autoridad del Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas. Estamos satisfechos con las enérgicas medidas adoptadas por la KFOR para confiscar y destruir las armas secuestradas ilegalmente.

 

12. Apoyamos plenamente las acciones del Tribunal Penal Internacional por la ex Yugoslavia. El hecho de someter a la justicia a las personas que han cometido crímenes de guerra consolidará la primacía del derecho y constituirá la base para la reconciliación en el seno de la población kosovar. La KFOR seguirá cooperando con el TPI en la aplicación del mandato que le fue asignado.

 

13. Celebramos que el Cuerpo Europeo asuma a su vez la dirección del Estado Mayor de la KFOR.

 

14. Estamos de acuerdo con la aplicación integral del Acuerdo de Paz de Dayton. Apoyamos plenamente las conclusiones de la Reunión Ministerial del Consejo para la Instauración de la Paz realizada en Bruselas el 23 de mayo del año 2000, al igual que la determinación de dicho Consejo de integrar a Bosnia Herzegovina como Estado unitario, multiétnico y democrático en el seno de las estructuras Euro Atlánticas. Creemos que ha llegado el momento de que Bosnia Herzegovina reflexione acerca de su rol en el contexto general de la seguridad europea. Si las autoridades de Bosnia Herzegovina desean acercarse a su objetivo de integración Euro Atlántica, será necesario realizar cambios fundamentales. En el campo de la seguridad, ellas deberán:

- mantener la continuación  del desarrollo de la Comisión Permanente de Asuntos Militares (SCMM) como institución pública de defensa;

- elaborar una política de seguridad común que prevea un manejo unificado de las fuerzas de Bosnia Herzegovina;

- aumentar la transparencia y reforzar las medidas de confianza entre las fuerzas armadas de las Entidades;

- aceptar una reestructuración fundamental de las fuerzas armadas de las Entidades para asegurar su transparencia, aceptabilidad financiera y  compatibilidad con las necesidades de seguridad a largo plazo;

- como próxima medida en este sentido, cumplir este año con el compromiso que asumieron de proceder a una nueva reducción de un 15% de los efectivos militares y de los costos de defensa de las Entidades.

 

15. Solicitamos insistentemente a los dirigentes de Bosnia Herzegovina que asuman una mayor responsabilidad en el proceso de instauración de la paz.. A este respecto, estamos satisfechos con la reducción inicial del 15 % de los efectivos militares y de los gastos de defensa realizados en 1999. Estamos igualmente conformes con los grandes progresos realizados con respecto al número de refugiados que retornan a su país, a los trabajos de reconstrucción civil y a la creación y desmilitarización del distrito de Brcko. Instamos a todas las Partes a seguir cooperando entre ellas y con la comunidad internacional a fin de acelerar este proceso.

 

16. Nos alegramos por el normal desarrollo de las elecciones municipales que tuvieron lugar el 8 de abril, hecho que confirma en Bosnia Herzegovina la evolución que se perfila hacia el pluralismo y la democracia. Aguardamos con interés las elecciones generales que se llevarán a cabo en el mes de noviembre bajo la supervisión de la OSCE y deseamos que éstas inauguren una nueva etapa en ese sentido. Apoyamos a todos los dirigentes electos  y a los responsables que obran activamente en la aplicación integral del Acuerdo de Paz de Dayton, facilitando principalmente el retorno de los refugiados  y expatriados.

 

17. A pesar de los progresos alentadores, debemos aún enfrentar importantes desafíos, como la liberalización del mercado, la reconstrucción económica y la instauración de una economía autónoma; el retorno de los refugiados y expatriados a las regiones donde son  minoría, particularmente en las zonas urbanas; la prosecución de actividades de desminamiento humanitario; la mejora de la eficacia de las instituciones comunes, en especial el Consejo de Ministros de Bosnia Herzegovina, y de la cooperación entre las Entidades; el traslado al TPI de las personas acusadas de crímenes de guerra; la lucha contra la corrupción, el crimen organizado y los servicios secretos ilegales; la reforma del sistema judicial y de la policía; la instalación integral de un servicio de Estado  para el control fronterizo.

 

18. Estamos satisfechos con la exitosa reestructuración  de la SFOR y estamos convencidos de que esta fuerza, con fuerzas reducidas y flexibles, conservará su capacidad para cumplir con su misión. La SFOR seguirá contribuyendo con la seguridad y la estabilidad en Bosnia Herzegovina, colaborando estrechamente con la Oficina del Alto Representante  y de otras organizaciones  como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (HCR), el Grupo Internacional de Policía y el TPI. Estamos plenamente de acuerdo con el firme apoyo que la SFOR sigue brindando al accionar del TPI para que los acusados de crímenes de guerra sean sometidos a la justicia y nos congratulamos por el éxito que obtuvo en la aplicación imparcial y decidida de  este mandato.

 

19. Apoyamos los esfuerzos en favor de un cambio democrático en la República Federal de Yugoslavia (RFY) y alentamos a todas las fuerzas políticas que obren en este sentido. Estamos muy preocupados por la represión de la prensa independiente, las manifestaciones pacíficas de estudiantes y en particular por los informes que dan cuenta de los arrestos masivos de estudiantes y miembros de la oposición por parte del régimen de Belgrado. La toma reciente de la cadena televisiva Studio B y de la estación de radio B2-92 en Belgrado constituye el último ejemplo de violación flagrante de la libertad de expresión en la RFY. Asimismo estamos muy preocupados por el carácter netamente político de la reciente condena de 143 albaneses de Kosovo acusados de terrorismo por un tribunal serbio. Instamos a las autoridades serbias a abstenerse de realizar tales procesos políticos y a respetar las normas internacionales de la justicia penal. Sólo un verdadero cambio democrático, que garantice el respeto de los Derechos Humanos y de las libertades fundamentales, y que proteja los derechos de todas las minorías, incluídas aquellas de Voivodina y de Sandjak, abrirá el camino para la reincorporación de la RFY al seno de la familia Euro Atlántica de las naciones y facilitará su integración a la comunidad internacional.

 

20. Aún nos preocupan las tensiones que persisten entre el régimen de Belgrado y el gobierno de Montenegro elegido democráticamente y seguimos muy de cerca la situación. Reiterando nuestro interés permanente por la seguridad y la estabilidad de la región y de Montenegro, instamos a ambas Partes a manejar sus diferencias de manera pacífica y pragmática y a abstenerse de adoptar cualquier medida desestabilizante.

 

21. La Alianza desea ver a todos los países del sudeste europeo integrados en la Comunidad Euro Atlántica. La cooperación con los países de la región en el seno del CPEA y del PPP, al igual que a través de la iniciativa lanzada en la Cumbre de Washington para Europa del Sudeste, constituye un sostén y un estímulo para la cooperación regional y un respaldo a los esfuerzos desplegados por los países en vías de integrar las instituciones Euro Atlánticas. Las actividades de la OTAN apuntan a la creación de condiciones que permitan a los países de la región colaborar para asegurar su propia estabilidad y de esta manera apoyar y completar los objetivos del Pacto de Estabilidad para Europa del Sudeste. Hoy recibimos un informe sobre las diversas actividades emprendidas en el marco de la Iniciativa para Europa del Sudeste y sobre la contribución de la Alianza para la realización de los objetivos del Pacto de Estabilidad y estamos satisfechos con los progresos alcanzados. Celebramos la cooperación que, gracias al Pacto de Estabilidad, se estableció entre la Alianza, el Banco Mundial, Bulgaria y Rumania con miras a la reconversión de antiguos oficiales y a su reinserción en el mercado laboral. Pensamos seriamente en colaborar con las actividades realizadas en el marco del Pacto de Estabilidad a fin de montar un aparato cívico-militar regional de reacción ante las situaciones de emergencia para el sudeste europeo. La OTAN seguirá intentando actuar conjuntamente y cooperar con otras instituciones, sobre todo en el marco del Pacto de Estabilidad. Consideramos muy alentador el número creciente de iniciativas regionales que muestran que los países de la región desean hacerse cargo de su propio desarrollo.

 

22. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente proseguir con las actividades realizadas en el marco de la Iniciativa para Europa del Sudeste y mantener la contribución de la Alianza en la realización de los objetivos del Pacto de Estabilidad, así como dar cuenta en nuestra próxima reunión de los nuevos progresos alcanzados.

 

23. Hemos analizado la aplicación de la Iniciativa sobre las Capacidades de Defensa (DCI), la cual proveerá a la Alianza las fuerzas y capacidades que tan urgentemente necesita para poder responder a los desafíos de seguridad del siglo XXI. Estamos muy conformes con los progresos logrados hasta el momento en la aplicación de la DCI y esperamos mejorar aún más en las capacidades militares de la Alianza, al igual que un acrecentamiento de la interoperabilidad de las fuerzas. Las recientes operaciones, principalmente en Kosovo, mostraron la necesidad de realizar mejoras en ciertos ámbitos, sobre todo en lo que respecta a la aptitud de la OTAN para desplegar rápidamente sus fuerzas en donde sea necesario, para asegurar su apoyo durante el tiempo requerido, en especial por medio de rotaciones, para abastecer sus necesidades para cumplir con su misión correctamente y sin riesgos  y para permitirles comunicarse y operar de manera armoniosa y eficaz entre ellas. La DCI define las medidas específicas que la Alianza en su conjunto y los Aliados a título individual deben adoptar en esos ámbitos.

 

24. Sin duda concierne a los países la responsabilidad del éxito de la aplicación de la DCI . Reconocemos que, para algunos Aliados, la solución más viable a ciertas insuficiencias actuales en materia de capacidades tomará probablemente la forma de acuerdos de cooperación multinacionales. A este respecto jugarán un rol importante los esfuerzos colectivos, incluida la puesta en común y el reparto de recursos, un financiamiento multinacional, común y conjunto, así como también las adquisiciones en cooperación. Todos los países deberán estar dispuestos a brindar los recursos necesarios a fin de alcanzar los objetivos de la DCI. 

 

25. La DCI favorecerá asimismo una mayor interoperabilidad entre las fuerzas de los Aliados y, llegado el caso, con las fuerzas de los  países colaboradores. La DCI es fundamental para reforzar las capacidades de defensa y el apoyo europeos de la OTAN, de modo que los Aliados puedan aportar a esta última una contribución más fuerte y coherente. Así los Aliados estarán en condiciones de emprender operaciones dirigidas por la UE en las que la Alianza en su conjunto no está comprometida. Dado que los colaboradores jugarán un rol importante en las futuras operaciones dirigidas por la OTAN, estamos satisfechos con su actual compromiso con algunos componentes de la DCI y seguiremos examinando la evolución de su participación.

 

26. Las frecuencias radioeléctricas son un recurso nacional muy limitado. A causa de la creación de un mercado de espectro radioeléctrico, se ejercen crecientes presiones para que una mayor parte del mismo sea dispuesta con fines comerciales. Dado que la fijación  de tarifas relativa a la utilización del espectro depende de las responsabilidades nacionales, recomendamos a los países de la Alianza proporcionar a las fuerzas militares de la OTAN un acceso gratuito al espectro radioeléctrico sobre una base de reciprocidad y en el marco de acuerdos específicos que deberían proteger a las fuerzas temporarias, como ocurre en el transcurso de operaciones, entrenamientos o ejercicios, así como a las fuerzas asentadas por un período indefinido. En caso de que la legislación nacional exija el pago de costos por el uso del espectro, dichos costos no estarán a cargo de las fuerzas transitorias o invitadas sino del país anfitrión.

 

27. Estamos decididos a consolidar el sostén europeo de la OTAN. El desarrollo de una IESD efectiva y dotada de medios reforzará la Alianza, a través de la cual estamos dispuestos, siempre que sea posible, a perseguir objetivos comunes en materia de seguridad. Los trabajos de la Alianza en este campo progresan, según se definió en la Cumbre de Washington, y se tienen en cuenta los acuerdos pertinentes realizados en el seno de la UE, a fin de examinar, entre otros, los medios de asegurar el establecimiento de una consulta,  cooperación y transparencia efectivas. Para ello se aprovecharán los mecanismos existentes entre la OTAN y la UEO, la participación de los Aliados europeos no miembros de la UE, al igual que las disposiciones prácticas requeridas para garantizar el acceso de la UE a  capacidades de planificación de la OTAN y a los medios y capacidades colectivos de dicha organización, según cada caso y por consenso.

 

28. Los Aliados deberán examinar las decisiones que la UE tome durante la reunión del Consejo Europeo de Feira. El Consejo en Sesión Permanente coordinará los trabajos de la OTAN y estará dispuesto a dialogar.

 

29. Tenemos en cuenta el informe de actividades respecto del seguimiento de las decisiones sobre la IESD tomadas en la Cumbre  de Washington y encomendamos al Consejo en Sesión Permanente intensificar sus actividades en este campo. Estamos en condiciones de iniciar un debate con la UE sobre un programa de trabajo sustancial para realizar en común, que considere, entre otras cosas:

- la definición de las modalidades de una consulta, de una cooperación y de una transparencia efectivas entre la OTAN y la UE, aprovechando los mecanismos ya existentes entre la OTAN y la UEO y teniendo en cuenta las proposiciones examinadas actualmente en el seno de la Unión Europea  relativas a los acuerdos de consulta entre la OTAN y la UE;

- las disposiciones prácticas requeridas para garantizar el acceso de la UE a capacidades de planificación de la OTAN y el fácil acceso de la UE a los medios y capacidades colectivos de la OTAN, según cada caso y por consenso, tal como se definió en Washington;

- acuerdos aplicables al intercambio de información – considerados como la necesidad más acuciante - y la conclusión prioritaria de un acuerdo de seguridad. Por esta razón encomendamos al Secretario General entablar contactos con la UE en forma inmediata y abrir camino a los futuros acuerdos en materia de seguridad entre las organizaciones, desde la perspectiva de las consultas previstas sobre esta cuestión. Intensificaremos los trabajos sobre la participación de los Aliados no miembros de la UE  y, en este contexto, esperamos con interés examinar las decisiones que la UE tomará durante la reunión de Feira;

- al igual que en la Cumbre de Washington, subrayamos la importancia de encontrar soluciones beneficiosas para todos los Aliados, que permitan la necesaria asociación de los Aliados europeos no miembros de la UE con las estructuras que esta última establece. Todo esto con el fin de asegurar el diálogo, la consulta y  cooperación necesarias sobre cuestiones ligadas a la política europea de seguridad y de defensa y al manejo de las crisis, con los Estados europeos miembros de la OTAN no pertenecientes a la UE;

- señalamos que los Estados europeos miembros de la OTAN no pertenecientes a la UE participarán, si lo desean, de una operación que impone el  recurso a medios y capacidades de la OTAN, y que serán invitados, por decisión de la UE, a tomar parte en otras operaciones dirigidas por ella. Señalamos asimismo que, cuando la posibilidad de una operación dirigida por la UE sea examinada, algunas  consultas permitirán un marco de discusión sobre las preocupaciones en materia de seguridad manifestadas por los países concernidos. Cuando se examine la posibilidad de que la UE recurra a los medios de la OTAN, se prestará particular atención a las consultas realizadas con los seis países europeos miembros de la OTAN no pertenecientes a la UE. Consideramos que estas decisiones de la UE son etapas importantes para el cumplimiento de los objetivos previstos por nuestros jefes de Estado y de Gobierno en la Cumbre de Washington. La participación de los Aliados europeos no miembros de la UE consolidará la eficacia de las operaciones militares que ella dirige y contribuirá directamente a la eficacia y vitalidad del pilar europeo de la OTAN. En lo que respecta a las operaciones dirigidas por la UE y que implican el recurso a medios y capacidades de la OTAN, será conveniente, si Canadá decide participar, admitir modalidades en este sentido.

 

30. Tenemos constancia de los trabajos realizados en el seno de la UE para el desarrollo de nuevas capacidades asociadas a su objetivo global, según fue solicitado en la Cumbre de Helsinki, a fin de contribuir a la mejora y al refuerzo de las capacidades militares europeas. A este respecto, notamos que la UE tiene la intención de realizar este año una conferencia sobre ofertas de compromisos en materia de capacidades. La contribución a este proceso por parte de los Aliados europeos no miembros de la UE es y será importante. La Iniciativa sobre las capacidades de defensa de la Alianza apoya el refuerzo de las capacidades europeas. El objetivo global y los objetivos concernientes a las capacidades de la UE y aquellos provenientes de la DCI  de la OTAN se reforzarán mutuamente. La OTAN está preparada para proveer a la UE – a condición de que se tomen las decisiones correspondientes – de un peritaje militar en materia de planificación. Este último es necesario para la elaboración  del objetivo global y de los objetivos referentes a las capacidades de la UE (aprovechando, llegado el caso, el proceso de realización de planes de defensa de la OTAN y el proceso de planificación y de examen del PPP (PARP)) y para examinar de qué manera el sistema de planificación de defensa de la OTAN podría adaptarse posteriormente e integrarse de un modo más completo a la disponibilidad de fuerzas para las operaciones dirigidas por la UE.

 

31. Las relaciones entre la OTAN y la UE se desarrollarán sobre la base de mecanismos existentes entre la OTAN y la UEO, cuyos vínculos continúan evolucionando de manera satisfactoria.  En este sentido, el reciente ejercicio CMX/CRISEX que resultó ser útil, aportó valiosas enseñanzas en el plano de la cooperación OTAN-UEO, particularmente en lo relativo al mando, al control y al acceso a los medios de la OTAN.

 

32. Estamos satisfechos con los contactos que mantienen actualmente el Secretario General de la OTAN, Lord Robertson, y el Sr. Javier Solana, Alto Representante de la UE en materia de Política Exterior y de Seguridad Común. Estos contactos deberían intensificarse y desarrollarse más adelante. Nos complace la presencia del Sr. Solana en nuestra reunión.

 

33. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente proseguir con la aplicación de todas las decisiones tomadas en este sentido en la Cumbre de Washington - teniendo en cuenta la evolución de los acuerdos pertinentes en el seno de la UE - e informarnos al respecto en nuestra próxima reunión.

 

34. Recordando las decisiones tomadas en la Cumbre de Washington, reafirmamos el compromiso de la Alianza a permanecer abierta a la incorporación de nuevos miembros. Después de un año de la adhesión de la República Checa, Hungría y Polonia, estamos más convencidos que nunca de que nuestra política de integración ha sido una decisión estratégica importante para la Alianza y para la seguridad Euro Atlántica. Los tres países que se adhirieron a la OTAN en 1999 no serán los últimos. En los años venideros, la Alianza invitará a países deseosos y capaces de asumir las responsabilidades y obligaciones  acordes con su estatus de miembro, en cuanto haya determinado que su inclusión servirá a  sus intereses políticos y estratégicos generales y reforzará la seguridad y la estabilidad en toda Europa.

 

35. En la Cumbre de Washington, los jefes de Estado y de gobierno de la OTAN decidieron analizar el proceso de integración en la próxima Cumbre que se llevará a cabo a más tardar en el 2002, y nos encargaron seguir examinando este proceso, en especial la aplicación del Plan de Acción para la Adhesión (MAP). Acabamos de examinar un informe de síntesis realizado por el Consejo en Sesión Permanente sobre el estado de avance de las actividades realizadas por el MAP durante el primer año de su aplicación. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente seguir controlando la aplicación efectiva del MAP y  trabajar en la mejora de su funcionamiento consultando, llegado el caso, a los países candidatos.

 

36. Nos congratulamos por el firme compromiso con el MAP asumido por los nueve países candidatos, al igual que por la reforma y la cooperación que reafirmaron el 19 de mayo en Vilnius. También estamos satisfechos con los progresos realizados en el MAP hasta el momento. El Consejo del Atlántico Norte se reunió esta primavera con altos funcionarios de cada uno de los países candidatos para examinar los progresos alcanzados. Las opiniones, las informaciones intercambiadas y la colaboración ofrecidas por la Alianza y por países miembros de la OTAN a título individual, ayudaron considerablemente a enfocar mejor su preparación hacia una eventual adhesión en todos los ámbitos concernidos por el MAP, incluidas las cuestiones políticas y económicas, militares y de defensa, así como aquellas ligadas a los recursos y las  cuestiones jurídicas. Junto con los países candidatos se aceptaron objetivos del Partenariato vinculados con el MAP y programas individuales adaptados de partenariato, a fin de ayudarlos a alcanzar los objetivos que se propusieron en el plano militar/  de defensa. Se trata de objetivos ambiciosos. Para alcanzarlos será fundamental que los países candidatos definan sus prioridades y destinen recursos suficientes.

 

37. Estamos firmemente comprometidos con la consolidación del CPEA y del PPP a los fines de mejorar la cooperación, transparencia y confianza entre todos los miembros de la Comunidad Euro Atlántica. Estamos satisfechos con las actividades realizadas en el marco del CPEA/PPP para promover una auténtica cooperación regional, al igual que una paz y una seguridad duraderas  en Europa del Sudeste, el Cáucaso y Asia central. Asimismo estamos satisfechos con los progresos alcanzados en el marco del CPEA/PPP con la ayuda de esfuerzos más generales vinculados a las armas livianas y de pequeño calibre, al igual que con las actividades de desminado humanitario global.

 

38. Nos alegramos por la  reunión del Consejo del partenariato Euro Atlántico que se llevará a cabo mañana y por la presencia del Sr. Bodo Hombach, Coordinador Especial del Pacto de Estabilidad para la Europa del Sudeste. En dicha reunión, estudiaremos las posibilidades de perfeccionar el CPEA/PPP en lo que respecta a la prevención de los conflictos y al manejo de las crisis.

 

39. Hoy hemos aprobado varios informes sobre el Partenariato reforzado y más operacional, sobre la implementación  del concepto de capacidades operacionales y sobre el Programa de consolidación  del entrenamiento y de la formación. Estamos particularmente conformes con los sustanciales progresos realizados desde la Cumbre de Washington en lo que respecta a la toma de decisiones importantes  para consolidar aún más el Partenariato para la Paz y volverlo más operativo. Esperamos con interés el estudio del avance de los trabajos vinculados a estas iniciativas y a la aplicación del Marco político-militar  para operaciones del PPP dirigidas por la OTAN. Realizaremos este estudio en nuestra próxima reunión sobre la base de los informes de actividad y a la luz del examen que iniciaremos próximamente con los países colaboradores.

 

40. Estamos comprometidos con la creación de un partenariato fuerte, estable y duradero con la Federación Rusa, conforme al Acta Fundadora OTAN- Rusia. Estamos satisfechos con las acciones realizadas recientemente en pos de la reactivación de la consulta y  cooperación, sobre un abanico más amplio de cuestiones en el marco del Consejo Conjunto Permanente (CCP). Nos alegramos ante la perspectiva de la reunión en sesión ministerial convocada por el CCP para este mediodía.

 

41. Apreciamos la persistencia de la cooperación entre la OTAN y Rusia en Bosnia y en Kosovo. Notamos que en el marco del CCP continúan el diálogo y la cooperación sobre cuestiones ligadas a las operaciones en Bosnia y en Kosovo, contando con la valiosa experiencia de una cooperación efectiva con las fuerzas rusas en el seno de la SFOR y de la KFOR. Instamos a Rusia a respetar sus compromisos con el TPI, dando continuidad a los actos de acusación establecidos por el Tribunal.

 

42. La apertura a corto plazo de una Oficina de información de la OTAN en Moscú, tal como se prevé en el Acta Fundadora, constituirá una etapa importante en la profundización de nuestras relaciones. Subrayamos la necesidad de iniciar próximamente una Misión de alianza militar entre la OTAN y Moscú, como lo prevé asimismo  el Acta Fundadora, y esperamos que la cooperación entre militares continúe desarrollándose.

 

43. Alentamos a Rusia a retomar todas las formas de consulta y cooperación enunciadas en el Acta Fundadora. En este contexto, convocamos a ese país a participar activamente en los trabajos del CPEA y del PPP.

 

44. Estamos sumamente preocupados por el conflicto en Chechenia  y particularmente por la situación precaria de las personas expatriadas, al igual que por los informes que dan cuenta de las violaciones generalizadas a los Derechos Humanos por todas las Partes y del recurso a la fuerza, ciego y desproporcionado, por parte de los militares rusos. Tomamos nota de las declaraciones de las Naciones Unidas acerca de estos informes y del anuncio realizado el 17 de abril en Moscú con respecto a la designación de una comisión de investigación encargada de examinarlos. Como lo indica la resolución adoptada recientemente por la Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, subrayamos que, para ser eficaz, toda comisión de investigación debe ser independiente, debe tener una composición diversificada y realizar sus trabajos de manera exhaustiva, rápida y transparente. Exhortamos a Rusia a autorizar el acceso a Chechenia de los representantes de todas las organizaciones internacionales, en particular del Grupo de Asistencia de la OSCE, y de los Informantes Especiales de la Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Reconociendo el derecho de Rusia a preservar su integridad territorial, así como el deber y el derecho de proteger a todos sus ciudadanos contra el crimen y el terrorismo, que condenamos en todas sus formas, instamos a este país a respetar las obligaciones internacionales correspondientes a su estatus de miembro de las Naciones Unidas, de la OSCE y del Consejo de Europa, al igual que los principios pertinentes inscriptos en el Acta Fundadora.

 

45. Seguimos pensando que no existe solución militar a este conflicto. Exhortamos al gobierno ruso a analizar cualquier medio para llegar a una solución política, incluido un diálogo profundo con los representantes chechenos. Esperamos también  que los chechenos cooperen de buena fe en la búsqueda de una solución al conflicto y que condenen el terrorismo y lo combatan.

 

46. Nos alegramos por los progresos realizados en el desarrollo del partenariato específico entre la OTAN y Ucrania, como lo confirma la reciente reunión en Kiev de la Comisión OTAN-Ucrania. Nos alegramos también ante la perspectiva de la reunión convocada por la Comisión OTAN-Ucrania.

 

47- Celebramos la participación de Ucrania en el programa del PPP. Estamos convencidos de que la reciente aprobación de la ratificación de la Convención sobre el Estatuto de las Fuerzas (SOFA) por parte de la Vekhovna Rada constituye un paso importante hacia una mayor contribución de Ucrania en el PPP, incluso mediante la organización de ejercicios que estará a su cargo. Alentamos al gobierno ucranio a iniciar rápidamente la  necesaria  reestructuración de sus fuerzas armadas. Para ello la OTAN decidió mantener su apoyo a la implementación de la reforma de la defensa. Elogiamos los esfuerzos que el grupo de trabajo conjunto sobre dicha reforma está realizando actualmente. Agradecemos también a Ucrania por la contribución que continúa brindando a la KFOR. Su presencia en Kosovo prueba la importancia que le concede a la estabilidad de esta región.

 

48. Notamos con satisfacción que el Centro de Información y Documentación de la OTAN y la Oficina de Relaciones de la OTAN en Kiev son plenamente operacionales, que están dotadas de todo el personal previsto y que contribuyen a consolidar el partenariato.  

 

49. Recordando las decisiones tomadas en la Cumbre de Washington sobre el Diálogo mediterráneo, constatamos con satisfacción que nuestros colaboradores mediterráneos están deseosos de desarrollar dicho diálogo, especialmente a través de una mayor cooperación en ámbitos donde la OTAN puede aportar un “plus”, sobre todo en cuestiones militares. Hoy recibimos con interés el informe anticipado sobre el Diálogo mediterráneo que incluye las modalidades de financiamiento y los acuerdos prácticos afines. Estamos satisfechos con los resultados positivos de las visitas efectuadas por parte de los altos funcionarios políticos de la OTAN en los países que participan de este diálogo. Alentamos a los Aliados y a los países mediterráneos a organizar encuentros como los que tuvieron lugar en Roma y en Valencia. Valoramos el importante rol que juegan las embajadas como puntos de contacto. Teniendo en cuenta el carácter evolutivo y no discriminatorio del Diálogo, estamos listos para planear los medios que permitirán continuar  y profundizar nuestras relaciones de cooperación política y práctica con todos los colaboradores mediterráneos.

 

50. Estamos muy conformes con la participación de Argelia en el Diálogo y creemos que ello contribuirá a la realización de sus objetivos, en especial mediante el refuerzo de la seguridad y la estabilidad en la región.

 

51. La adaptación del Tratado de las Fuerzas Armadas convencionales en Europa garantizará que el Tratado FCE conserve su validez como piedra angular de la seguridad y estabilidad europeas. Nos alegramos de que esta adaptación permita a nuevos Estados Parte acceder al Tratado. Los Aliados preparan actualmente su aplicación adaptada. Preconizamos su pronta entrada en vigencia, pero esto sólo puede pensarse si todos los Estados respetan los niveles de armamentos y equipamientos aceptados en el Tratado, conforme a los compromisos suscritos en el acta final FCE. Deseamos que Rusia concrete rápidamente su compromiso de reducir y retirar sus fuerzas de Moldavia y Georgia. En este sentido, estamos satisfechos con los esfuerzos desplegados por los Aliados y sus socios en la OSCE para  facilitar el respeto de estas obligaciones. Nos preocupa que Rusia siga manteniendo en el norte del Cáucaso niveles de equipamiento limitados por el Tratado, que son elevados en relación a los límites previstos en el artículo V de dicho Tratado (“flancos”). Para que la entrada en vigencia del Tratado sea posible, estos niveles deben basarse en aquellos que el mismo prevé, conforme a las reglas y procedimientos de contabilización aceptados. Tenemos en cuenta las promesas de Rusia según las cuales este incumplimiento de los límites que fija el Tratado será temporario y esperamos que mantenga su compromiso de retomar, tan pronto como sea posible, los límites allí previstos, manifestando mientras tanto una total transparencia en lo concerniente a sus fuerzas y equipamientos desplegados en el norte del Cáucaso. Sobre esta misma base los Aliados seguirán trabajando para la entrada en vigencia del Tratado adaptado. Esperando la conclusión de este proceso será primordial proseguir con la aplicación del Tratado actual  y de sus documentos afines.

 

52. Celebramos la ratificación del tratado de Cielos Abiertos por parte de Ucrania. Convocamos a Rusia y a Bielorrusia  a ratificar el tratado para permitir su pronta entrada en  vigencia.

 

53. Seguimos considerando de gran importancia la aplicación completa y  el respeto de los regímenes internacionales de desarme y de no proliferación. Mientras celebramos el  25º aniversario de la entrada en vigencia de la Convención sobre la Prohibición de Armas biológicas y Tóxicas (BTWC), seguimos dando prioridad al cierre de las negociaciones sobre medidas apropiadas, aun las eventuales medios de verificación y propuestas para consolidar la Convención. Éstas deberán incluirse, llegado el caso, en un instrumento jurídicamente apremiante. Reiteramos nuestro compromiso de concluir tan pronto como sea posible con la elaboración de un instrumento tal, antes de la 5ª Conferencia de Examen de la BTWC, a realizarse en el 2001. Estamos comprometidos con la universalización de la Convención sobre las Armas Químicas y con su aplicación integral. Asimismo estamos comprometidos con la consolidación del Régimen de Control de la Tecnología de los Misiles (RTCM), elemento importante para nuestros esfuerzos de lucha contra la proliferación de los vectores de las armas de destrucción masiva.

 

54. Los países de la OTAN consideran que el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP) constituye la piedra angular del régimen de no proliferación nuclear y el fundamento esencial para la continuación del desarme. Los países de la Alianza redujeron considerablemente el número de armas nucleares y de vectores. Reafirman su resolución  de seguir trabajando en favor de la reducción de estas armas a nivel mundial. Estamos muy satisfechos con los resultados positivos de la Conferencia de Examen del TNP. Los participantes estuvieron de acuerdo acerca de la importancia de la adhesión universal al TNP y de su respeto por parte de todos los países. Reafirmaron asimismo el compromiso de todos los Estados Parte a favor del desarme, de las garantías y de una cooperación pacífica en materia nuclear. Los Aliados ratifican los compromisos que adquirieron en la Conferencia de Examen del TNP y contribuirán a aplicar sus conclusiones.

 

55. En la Cumbre de Washington, nuestros dirigentes se comprometieron a que la Alianza estudie diversas opciones sobre medidas de confianza, seguridad, verificación, no proliferación y control de los armamentos y del desarme, a la luz de los desarrollos estratégicos globales y de la reducción del rol de las armas nucleares. Hemos activado este proceso en la Reunión Ministerial de diciembre de 1999. Recibimos hoy un informe de actividades sobre las consultas vigentes en el seno de los organismos competentes de la OTAN y nos alegramos de que este examen global e integrado haya tenido buen curso. Esperamos con interés el informe detallado que nos será entregado para examinar en la reunión de diciembre del año 2000. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente que encargue al Comité Político a nivel superior (reforzado) supervisar e integrar los trabajos relativos al proceso, definiendo, como próxima etapa, el marco de este informe. La decisión tomada por la OTAN de lanzar este proceso muestra una vez más que los Aliados están decididos a promover el control de los armamentos y del desarme y a reforzar el régimen internacional  de no proliferación.

 

56. Estamos conformes con la ratificación por parte de Rusia del tratado START II. Consideramos de gran importancia la pronta conclusión del tratado START III, así como el mantenimiento y consolidación del Tratado ABM, piedra angular de la estabilidad estratégica y base de nuevas reducciones de los armamentos estratégicos ofensivos. Teniendo en cuenta la necesidad de atenuar las incertidumbres que giran en torno a la cuestión de las armas nucleares subestratégicas de Rusia, pensamos que la reafirmación  - incluso la codificación – de las Iniciativas presidenciales de 1991-1992 podría constituir una primera medida, aunque no definitiva, en este sentido. Estamos comprometidos con la pronta entrada en vigencia del Tratado de Prohibición Total de los Ensayos Nucleares (CTBT) y, en este contexto, nos alegramos de que la Duma y el Consejo de la Federación hayan aprobado la ratificación de dicho Tratado por  parte de Rusia. En espera de la entrada en vigencia del CTBT, instamos a todos los Estados dotados de capacidades nucleares a respetar una moratoria sobre los ensayos de armas nucleares, y  sobre cualquier otra explosión nuclear, y de abstenerse de cualquier acción contraria a las obligaciones y disposiciones enunciadas en CTBT. De igual modo estamos decididos a dar prioridad al inicio inmediato de negociaciones que lleven a la pronta conclusión de un Tratado no discriminatorio y multilateral sobre el cese de las transferencias de materias fisibles. Su aplicación deberá ser internacional, efectivamente verificable y universal. Creemos que, en espera del cierre de estas negociaciones, debería respetarse una moratoria sobre la producción de materias fisibles destinadas a la fabricación de armas y de otros artefactos explosivos nucleares. Convocamos a todos los Estados a participar de manera constructiva en la Conferencia sobre el desarme y en las diversas  actividades emprendidas en este marco.

 

57. La proliferación de armas nucleares, biológicas y químicas (NBC) y de sus vectores puede constituir una amenaza militar directa para las poblaciones, el territorio y las fuerzas de los países aliados. Este tema sigue preocupando a la Alianza. El principal objetivo de la Alianza y de sus miembros en materia de proliferación consiste en prevenirla o en revertir su curso por medios diplomáticos si ésta llegara a producirse. En este contexto, otorgamos gran importancia al manejo de los armamentos y a los regímenes de no proliferación y de control de las exportaciones como medios de lucha contra la proliferación.

 

58. Nuestra reacción frente a la amenaza NBC debe adecuarse a la indivisibilidad de la seguridad de los Aliados. Reafirmamos que el dispositivo de defensa de la Alianza debe ser capaz de hacer frente de manera correcta y eficaz a los riesgos vinculados a la proliferación de las armas NBC y de sus vectores. Notamos que la OTAN trabaja, entre otras cosas, en la prohibición de los misiles de prueba para la defensa puntual y zonal. Destacamos particularmente la decisión adoptada a principios de año de iniciar un estudio sobre las posibilidades de elaboración de un sistema de defensa de las fuerzas desplegadas de la OTAN.  

 

59. La Alianza realizó progresos significativos en cuanto a la aplicación de la Iniciativa sobre los ADM aprobada en al Cumbre de Washington. El centro ADM creado por esa Iniciativa permitirá una mejor coordinación de las actividades vinculadas con los ADM en la sede de la OTAN y una intensificación de las consultas políticas y de los esfuerzos en el campo de la defensa relativos a la no proliferación, el control de los armamentos y el desarme. Dichos esfuerzos tienen por objeto mejorar el estado de preparación de la Alianza para responder a los riesgos que presentan los ADM y sus vectores. Incrementamos las consultas entre los Aliados sobre las cuestiones de desarme y no proliferación previstas de manera general. Reanudamos asimismo las consultas con Rusia sobre cuestiones de no proliferación, en el marco del Consejo Conjunto Permanente, y hemos mantenido discusiones con Ucrania en el seno de la Comisión OTAN-Ucrania. Estas consultas nos permitieron intercambiar puntos de vista sobre cuestiones de interés y objetivos comunes concernientes al modo de afrontar la proliferación.

 

60. Hemos iniciado en el seno de la Alianza un proceso activo de consulta sobre el estudio realizado por los Estados Unidos de un posible despliegue limitado de un sistema nacional de defensa antimisiles. Apreciamos los informes detallados proporcionados por las autoridades de ese país sobre esta cuestión, así como los intercambios de opiniones entre los Aliados. Nos reconforta la seguridad que nos dan al tener en cuenta la opinión de los Aliados en la continuación del estudio de estos planes. Seguiremos atentamente las discusiones entre Estados Unidos y Rusia sobre el START III y el tratado ABM, y estamos convencidos de que los resultados de esas discusiones preservarán y reforzarán el rol de este último y llevarán a nuevas reducciones de las fuerzas estratégicas de Estados Unidos y de Rusia. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente proseguir con sus debates sobre estas cuestiones.

 

61. El terrorismo constituye una grave amenaza para la paz, la seguridad y la estabilidad y puede poner en peligro la integridad territorial de los Estados. Por eso lo condenamos duramente y reafirmamos nuestra determinación para combatirlo, respetando nuestros compromisos internacionales  y nuestra legislaciones nacionales. La amenaza terrorista contra las fuerzas y las instalaciones de la OTAN exige que se continúe con el examen y la elaboración de medidas apropiadas para asegurar su protección, teniendo en cuenta las responsabilidades del país anfitrión.

 

62. Estamos muy satisfechos con los progresos realizados durante la revisión de los Planes Civiles de Emergencia (PCU) en la OTAN. Esta revisión, que tiene como objetivo aprovechar de manera más eficaz los recursos civiles, permitirá adaptar los planes civiles de emergencia para que respondan a las necesidades de la Alianza en materia de tareas de seguridad fundamentales. Gracias a las estrechas relaciones de trabajo entre los sectores civil y militar, los recursos civiles de los Aliados y de los socios podrán ser utilizados más eficazmente en actividades de la Alianza, tales como las operaciones de mantenimiento de la paz. Hemos consultado con los miembros, con quienes hemos establecido una excelente relación de apoyo mutuo en este campo. Encomendamos al Consejo en Sesión Permanente finalizar a la brevedad las reformas de los PCU.

 

63. Rendimos homenaje al general Wesley Clark por su gran labor al servicio de la Alianza durante su mandato en SACEUR y celebramos la designación de su sucesor, General Joseph Ralston.

 

64. Agradecemos profundamente al gobierno italiano por haber permitido esta reunión.

 

 

Fuente: Organización del Atlántico Norte

Traducido por: Valeria Liljesthröm y Natalia Del Frari.



[1] Países extra OTAN