Anuario de Relaciones Internacionales, Año 1994

 

PRESENTACION

 

A modo de presentación, enunciaremos cuál fue el origen del Departamento "Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur", como también el trabajo que, aunque silencioso, se lleva a cabo, cumpliendo con los objetivos que se expresaron en oportunidad de iniciar la existencia "formal" en el marco del Instituto de Relaciones Internacionales.

En el año 1989, se presentó el Proyecto de Investigación denominado "El Atlántico Sur", ante la Universidad Nacional de La Plata. Dicho proyecto integró el Programa Preferencial de Formación de Recursos Humanos en Investigación Científica y Tecnológica.

La investigación llevada a cabo por los suscriptos comprende dos temas: "LA NEGOCIACION POR MALVINAS: Balance y perspectivas" y "ESTRUCTURACION DE UNA POLITICA ANTARTICA".

1.- Con respecto a las ISLAS MALVINAS, debe decirse que no se aborda el tema desde un enfoque puramente histórico ni jurídico, sino desde el enfoque de las teorías de las relaciones internacionales. Cabe mencionar aquí que una de las hipótesis de la investigación es que cuanto más consistente se torna el statu quo malvinense determinado por el Reino Unido, fundamentalmente luego del conflicto bélico, mayor solidez adquiere el proyecto de autodeterminación de la población (no se considera pueblo), frente al reclamo de soberanía, de bajo perfil y cada vez más débil, por parte de la República Argentina, para los ritmos de la negociación bilateral.

Se hace necesario entonces buscar una nueva forma de abordar la cuestión de soberanía, y la experiencia internacional que se recoge en el trabajo, es que en casos similares, la negociación comienza en la cooperación económica de las partes en el conflicto. Es allí donde el investigador debe encontrar los elementos a partir de los cuales pueda teorizar, pueda formar construcciones teóricas, para determinar si la política exterior argentina actúa bajo la premisa del REALISMO PERIFERICO ó de las teorías de la INTERDEPENDENCIA, del DESARROLLO, de la DEPENDENCIA ó el IDEALISMO VS. REALISMO.

Tres casos se toman para analizar la problemática de la soberanía en la cuestión Malvinas: Hong-Kong; Gibraltar y Puerto Rico. Cada caso tiene sus particularidades, elementos que pueden aplicarse en el marco de la negociación, tanto bilateral como en los foros internacionales, y otros que deben desecharse.

Es este aporte, juntamente con el estudio del sector antártico, el trabajo que ha venido desarrollando el Departamento, y cuyo material puede consultarse en la Biblioteca del Instituto de Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata.

2- SECTOR ANTARTICO: Con el presente trabajo se pretende comprobar que la República Argentina, pese a su labor pionera en cuanto a la investigación y ocupación efectiva del Continente Antártico (heredera de las actividades hispánicas en las islas y archipiélagos subantárticos durante el periodo colonial), no ha tenido éxito en cuanto a obtener el reconocimiento internacional del derecho que estas actividades le otorgan conforme a las distintas teorías sobre adquisición de las competencias elaboradas por el Derecho Internacional Público.

La causas de estas falencias se deben buscar tanto en la falta de proyección de dichas actividades en el plano internacional a causa de la política exterior argentina, como por la distinta importancia relativa de nuestro país frente a otros estados interesados en el Continente, tales como el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Francia, Estados Unidos, y la ex-Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.

El desarrollo de la Guerra fría y la posible extensión al continente antártico del conflicto entre las dos superpotencias fue una de las causas que llevaron a los países interesados en el área a la firma del Tratado Antártico en 1959, por el cual nuestro país aceptó las restricciones al ejercicio absoluto de las competencias de los estados nacionales que establece el articulado del mismo.

Previamente a su ratificación se realizó en la República Argentina un gran debate nacional, triunfando la tesis que era más conveniente para nuestros intereses ser parte del sistema que ‚l mismo creaba por constituirse sus reuniones consultivas en un foro válido para mantener nuestra presencia internacional en la región, ya que en los hechos se establecía una especie de condominio internacional restringido del continente.

La República Argentina que había realizado una labor muy importante durante el año geofísico internacional 1958/59, ha participado activamente en los programas de cooperación internacional en el marco del Tratado Antártico, sin descuidar por ello importantes medidas de política interna con respecto al sector por ella reclamado, las que se han traducido en la realización de expediciones anuales y el establecimiento de numerosos asentamientos y bases de carácter estrictamente nacional, el dictado de normas administrativas internas de extensión de las competencias del estado nacional sobre nuestro sector, culminando con la creación de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur (Ley Nro. 23775), y la constitución de las autoridades de los distintos poderes del Estado.

Esto significa que aún cuando existió voluntad política de integrar el sector antártico argentino al resto del territorio nacional, la política exterior argentina siempre fracasó cuando trató de lograr el reconocimiento de estos hechos ante la comunidad internacional y aún ante los mismos estados partes contratantes del TA, con algunos de los cuales tiene problemas por la confrontación de los reclamos territoriales, es el caso de Chile y del Reino Unido.

El objetivo del presente trabajo es dar respuesta a este interrogante y en base a ello fijar las pautas para establecer las políticas eficaces para consolidar la presencia argentina en la región.

Somos conscientes que el mundo en que vivimos es totalmente distinto al de 1904, año en que el General Julio Argentino Roca comenzó con la ocupación del continente antártico por la República Argentina; así como al de 1959, en el que bajo el temor de la extensión de la guerra fría en la región se firmó el TA, creando la primera y única experiencia en el Derecho Internacional Público de un instrumento internacional que desmilitarizaba totalmente un continente y lo destinaba exclusivamente a actividades pacíficas. Es por ello que la respuesta a los interrogantes del futuro debe ser distinta a las opciones planteadas durante nuestro dilatado historial antártico. Hoy nos enfrentamos a un momento de transición entre la experiencia del estado nacional y del estado continental, última etapa hacia la consolidación de la comunidad internacional, experiencia a la que no es ajena el continente sudamericano y este trabajo pretende insertar su propuesta dentro de esta nueva tendencia de la realidad internacional al proponer una política antártica nacional con consenso sudamericano.