- Instituto de Relaciones Internacionales - Anuario 2002 -
Departamento de Europa y CEI
 
Presentación

Durante el año 2001 el Departamento de Europa y Comunidad de Estados Independientes ha permanecido continuamente en contacto con las delegaciones diplomáticas de los países involucrados. Se destacan las fructíferas conversaciones mantenidas con S. E. Edmond Trako -Albania-, Ara Avizaian -Armenia-, Vadim Lazerko -Belarús-, Atanas Budev -Bulgaria-, Dusko Ladan -Bosnia y Herzegovina-, Evgeny Astakhov -Federación de Rusia-, Georges Georgiu -Grecia-, M. Saeed Khalid -Pakistán-, Eugeniusz Noworyta -Polonia-, Cristian Lazarescu -Rumania-, Gojko Celebic -Yugoslavia-, con los Ministros Consejeros Ihor Hrushko y Mykhailo Chubukóv _Ucrania-, Ministros Plenipotenciarios y Encargados de Negocios Gordana Mestrovic -Croacia-, Tomaz Kunstelj -Eslovenia-, Wlodzimierz Gurnik -Polonia-, los Primeros Secretarios Vladimir Grushevich -Belarús- y Anatoly Zhelezniak -Federación de Rusia-, así como con los Cónsules de las Repúblicas de Letonia Mirdza Restvergs de Zalts y Estonia Peet Pullisaar.

Se han realizado gestiones con la Dra. Liudmila Okuneva a fin de ultimar detalles para la firma de un convenio entre el Instituto Estatal de las Relaciones Internacionales de Moscú (Universidad) y el Instituto de Relaciones Internacionales (UNLP).

Este Departamento ha tenido activa presencia en congresos, seminarios y conferencias en el país y en el exterior y participado en las VI Jornadas de Historia de las Relaciones Internacionales realizadas en Santiago de Chile durante el mes de noviembre.

En esta presentación el comentario "Consideraciones sobre Europa y la Comunidad de Estados Independientes durante 2001" me corresponde y "EX URSS 2001" es una colaboración de Alejandro Simonoff.
En cuanto a la cronología, agradezco la colaboración de Javier Surasky en lo referido a Unión Europea, de Gabriel Chapunov para Europa Central, de Cecilia Sarmiento y Patricio Ciliberti para Europa occidental, nórdica y mediterránea y de Alejandro Simonoff para la Comunidad de Estados Independientes.

Los documentos referidos a UE y OSCE fueron posibles gracias a la cooperación de Javier Surasky y los restantes son traducción libre de sus versiones en francés e ingles realizadas por esta coordinación.

Isabel Stanganelli
Coordinadora del Depto. Europa y CEI


Consideraciones sobre Europa y la Comunidad de Estados Independientes durante 2001.

2001 fue un año inquietante para Europa y la CEI, al que podría dividirse en dos etapas, previa y posterior a los atentados sufridos por EE.UU. en septiembre.

A-. En la primera etapa la sucesión de medidas adoptadas por EE.UU. en los años anteriores alcanzó su clímax con la decisión por la potencia americana de retirarse del Tratado ABM, que dejó en Europa una fuerte impresión de que el creciente unilateralismo de EE.UU. la postergaba como interlocutor destacado.
Entre las medidas estadounidenses previas que incomodaron a muchos Estados -no solamente europeos- se pueden mencionar la oposición al tratado sobre diversidad biológica de junio de 1992; en diciembre de 1997 el rechazo a la prohibición del uso de minas terrestres o antipersonal; en octubre de 1999 la no ratificación del tratado que prohibe el desarrollo de armas nucleares -Comprehensive Test Ban Treaty-; en enero 2001 el repudio a la decisión de firmar un acuerdo para establecer un tribunal penal internacional. EE.UU. se retiró en marzo 2001 del Protocolo de Kyoto sobre reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, en julio de 2001 reanudó el controvertido proyecto de construir defensas antimisiles -que invalidaría el Tratado ABM-, en julio de 2001 -tras siete años de deliberaciones- abandonó las negociaciones para poner en vigencia un tratado sobre armas biológicas y en julio de 2001 rehusó la firma de un pacto para controlar las armas pequeñas -objeta toda interferencia al derecho de sus ciudadanos a portar armas-.

Muchos países europeos de la OTAN coincidieron en mantener el Tratado ABM, especialmente Francia, Alemania e Italia. Putin propuso en un primer momento compartir ese sistema entre Rusia la OTAN y la UE como señal de cooperación mutua frente a posibles amenazas atómicas y cancelar la iniciativa del escudo antimisiles norteamericano advirtiendo a EE.UU. y a la OTAN que las estrategias de ambas complotan contra el equilibrio estratégico internacional.

La respuesta más inmediata y preocupante para Europa fue el Tratado de Amistad y Cooperación signado en julio de 2001 entre la Federación de Rusia y la República Popular de China y fundado en la igualdad, la confianza y la concertación estratégica, en la no injerencia en sus asuntos internos, de la igualdad, de la ventaja mutua y de la coexistencia pacífica. Ambas potencias se comprometieron a profundizar las medidas de confianza en el dominio militar a fin de reforzar la seguridad de ambas y de colaborar con la estabilidad regional e internacional y en caso de aparición de una situación que constituya una amenaza para la paz, procederán a las consultas en vías de eliminar la amenaza considerada. También se comprometieron en la prevención de conflictos internacionales y de su reglamento político, el mantenimiento del equilibrio y la estabilidad estratégica global.

Se comprometen a reforzar el rol central de las Naciones Unidas, en tanto organización internacional constituida por todos los Estados soberanos, desatacando que la responsabilidad esencial en materia de mantenimiento de la paz y de la seguridad internacionales incumbe al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El presente tratado tendrá una duración de veinte años. Será tácitamente renovado de cinco en cinco años si alguna de las Partes contratantes, un mes antes de la expiración de la duración de la validez correspondiente, no notifica por escrito a la otra Parte contratante su intención de ponerle fin.

Poco antes -el 15 de junio 2001- el Grupo de Shanghai proclamó la creación de la Organización de Cooperación de Shanghai como consecuencia de la incorporación de Uzbekistán al organismo preexistente conformado por Kazakhstán, China, Kirghizstán, Rusia y Tadjikistán. El objetivo de esta Organización es reforzar la confianza mutua, el buen entendimiento y la amistad entre los Estados miembros; instar a los Estados a cooperar eficazmente en los dominios político, económico y comercial, científico y técnico, cultural, educativo, de la energía, de los transportes y de la protección del ambiente; obrar en común al mantenimiento y preservación de la paz, de la seguridad y de la estabilidad regionales: instaurar un nuevo orden internacional político y económico democrático, equitativo y razonable. Para ello coordinará su accionar para aplicar la "Convención de Shanghai para la lucha contra el terrorismo, el secesionismo y el extremismo" que abarca la creación en Bishkek del "Centro antiterrorista de la Organización de Shanghai" así como la elaboración de los textos de cooperación multilateral pertinentes a fin de eliminar el tráfico de armas y de drogas, la emigración clandestina y otras actividades criminales.

Pese a la crisis económica, Turquía siguió siendo un bastión de gran magnitud estratégica entre el mar Negro y el Mediterráneo, sostenido por Occidente y líder de una gran cantidad de Estados turcófonos que incluyen a las Repúblicas Centrales Asiáticas -excepto Tadjikistán- y a Azerbaiján. Además Turquía y Grecia son los pilares de la Zona de Cooperación Económica del Mar Negro, organismo regional de gran envergadura con el que colaboran la UE y el Banco Mundial integrado además por Rusia, Ucrania, Moldova, Rumania, Bulgaria, Armenia, Albania, Georgia y Azerbaiján.

La puesta en marcha del Proceso de Cooperación del Mediterráneo Occidental en 1990 fue una iniciativa pionera en la medida que permitió identificar la importancia estratégica del diálogo entre Europa y el Maghreb y para poner en marcha el proceso de paz, estabilidad y desarrollo en la región. Este diálogo fue relanzado en la reunión celebrada en Lisboa en enero de 2001 -previa reunión preparatoria en Túnez, a mediados de ese mismo mes-. Este proceso fue la base de otras iniciativas regionales como el Foro del Mediterráneo y del Partenariato euromediterráneo.

El Proceso de Cooperación del Mediterráneo Occidental no se propone ni sustituir ni superponerse a otras iniciativas sino aportar elementos en forma complementaria a fin de incrementar las oportunidades de reencuentro entre los países de la región. Los ministros participantes declararon que una verdadera identidad mediterránea reclama el esfuerzo de un partenariato solidario y la búsqueda de intereses comunes sobre una base paritaria entre los países miembros del diálogo. Frente a la globalización actual los ministros convinieron en sostener las iniciativas destinadas a acelerar la dinámica de la integración regional y mejorar el atractivo de las inversiones, principalmente en la región del Maghreb. Para ello sugirieron para 2001 reuniones periódicas: a) entre empresarios y representantes gubernamentales (en un país del Maghreb y en Francia); b) para identificar las oportunidades de inversiones (en Marruecos); c) para implementar medidas tendientes a facilitar las oportunidades comerciales y promover el desarrollo de intercambios S-S y N-S entre los países del Mediterráneo Occidental (en Túnez). Además propusieron: d) el encuentro de personalidades de los medios universitarios y culturales (en Malta); e) coordinar actividades relativas a "intercambios humanos" (en Túnez): d) lograr el reencuentro y una mejor comprensión entre los pueblos de la región para tratar temas de infraestructura (en Argelia) y e) de análisis del impacto de la globalización en la región (a celebrarse en Mauritania).

Otro hecho destacado fue la creación de la Comunidad Económica Eurasiática el 31 de mayo 2001, conformada por Belarús, Kazakhstán, Kirghizstán, la Federación de Rusia y Tadjikistán y cuyo objetivo prioritario es la integración, libre intercambio, unión aduanera plena y el establecimiento de un espacio económico unificado y abierto a otros Estados, principalmente los que integran la Comunidad de Estados Independientes. También acordó gran atención al desarrollo de la cooperación multilateral en el dominio de la seguridad de los Estados y sus ciudadanos, principalmente en materia de lucha contra la criminalidad, el terrorismo internacional y otros fenómenos extremistas para lo cual trabajarán en integración en materia económica militar.

Bulgaria, Georgia, Rumania, la Federación de Rusia, Turquía y Ucrania firmaron el 2 de abril 2001 en Estambul el Acuerdo procediendo a la creación del Grupo de Cooperación Naval del Mar Negro (BLACKSEAFOR). La iniciativa de este grupo tiene como objetivo el refuerzo de la paz y de la estabilidad en el mar Negro así como la promoción de la cooperación regional entre los Estados ribereños del mar Negro. El objetivo de esta iniciativa es contribuir a la profundización de la seguridad regional, de la amistad, de las buenas relaciones y del entendimiento mutuo entre los Estados ribereños del mar Negro.

El Comité de Ministros del Consejo de Europa focalizó su atención en su reunión de mayo en el tema de la estabilidad democrática en los Balcanes y discutieron en particular la situación en la Ex República Yugoslava de Macedonia y las perspectivas para una temprana accesión de Bosnia y Herzegovina y la República Federal de Yugoslavia al Consejo de Europa, con el objetivo de llevar estabilidad democrática a la región. La otra cuestión tratada fue la situación en el Cáucaso y específicamente discutieron el diálogo entre Armenia y Azerbaiján para el cumplimiento de los compromisos entre ambos países en el contexto de su accesión al Consejo de Europa, la situación en Georgia y la cooperación con la Federación de Rusia respecto de a restauración del imperio de la ley, respeto de los derechos humanos y democracia en la República de Chechenia. Por último solicitaron un sustancial incremento en la cooperación entre el Consejo de Europa y Ucrania. Una rápida implementación del plan de acción respecto de los medios debería, en particular, permitir el mejoramiento del marco legislativo en conformidad con los standards del Consejo de Europa y promover el desarrollo de una prensa libre, independiente y pluralista. También sostuvieron que la firma de la Declaración Conjunta de Partenariato y Cooperación entre la Comisión Europea y el Consejo de Europa dará nuevos ímpetus para actividades conjuntas y proyectos.

También en mayo se realizó la Cumbre de jefes de Estado de Armenia, de Belarús, de Kazakhstán, de Kirguizstán, de Rusia y de Tadjikistán cuyos representantes afirmaron la determinación de colaborar para llevar la paz y la calma a Asia central. En este contexto, tomamos nota de la importancia que reviste la formación, por los Estados parte del Tratado de Seguridad Colectiva, de Fuerzas Colectivas de Desplazamiento Rápido, a fin de neutralizar el foco de tensión que constituye Afganistán y contribuir por todos los medios a un reglamento político del conflicto afgano, bajo la égida de las Naciones Unidas.

B-. La etapa iniciada en septiembre se caracterizó por las dificultades de una acción integrada referida a la coalición contra el terrorismo en Afganistán y la aproximación de los presidentes de Rusia y EE.UU. La visita del Presidente ruso a su par estadounidense en Washington, el 13 de noviembre 2001, se coronó con diversas declaraciones comunes, referidas a Afganistán, a las nuevas relaciones entre los Estados Unidos y Rusia contra el terrorismo, la inestabilidad regional y otras amenazas contemporáneas, a profundizar las relaciones entre OTAN-Rusia y en el seno de la OSCE. También acordaron nuevas relaciones económicas entre ambos Estados y utilizar los instrumentos del comercio mundial a fin de mejorar los contactos entre ellas y consolidar la integración de Rusia en la economía mundial, incluyendo la OMC. Como parte del mismo evento ambos presidentes sostuvieron la necesidad de cooperación en materia de lucha contra el tráfico ilegal de estupefacientes. el crimen transnacional organizado, sobre la cooperación contra el bioterrorismo y el empleo de armas de destrucción masiva.

En esta segunda etapa el rol de Europa fue importante pero menor del deseado. Además del accionar del Reino Unido en las acciones bélicas y en la dirección de la fuerza para la paz -ISFOR- en Kabul, las Naciones Unidas convocaron a una Cumbre en Bonn, el 5 de diciembre 2001, para poner fin al conflicto trágico en Afganistán y promover la reconciliación nacional, una paz duradera, la estabilidad y el respeto de los derechos del Hombre en el país. Se estableció que a partir del 22 de diciembre 2001, el gobierno estaría a cargo de una Autoridad interina -Hamid Karzai- que deberá convocar a una Loya Jirga en junio de 2002 para conformar un gobierno transicional.


Ex URSS 2001

1. La Federación Rusa: ¿el fin de la política pendular?

Los temas económicos en la Federación Rusa se centraron en tres aspectos relevantes: el primero se refiere a la cuestión de su deuda, otro al cambio en la estructura de propiedad y finalmente el referido a la cuestión petrolera.

A inicios del año el presidente Putin anunció el no pago de las deudas al Club de París, tema que fue tratado en la visita del Canciller alemán Gerard Schroeder -ese país es el principal inversor en Europa Oriental-, y para inicios del mes de febrero se anunció en Viena una forma de pago sobre la base de la venta de bienes públicos. El 14 de ese mes el Primer Ministro, Mijail Kassianov, anunció el reinicio de los pagos sobre una renegociación de los cuarenta y ocho mil millones de dólares con esa agrupación financiera internacional.
Por otra parte, el Asesor Económico del presidente, Andrei Illarionov rechazó los créditos y el monitoreo del FMI, cuestión que plantea dudas entre los inversores y acreedores externos. La falta de regularización de los pagos llegó a un punto tal que dos aviones (un Su 30Mk y un Mig AT) fueron retirados de la exposición anual de Le Bourguet en Francia ante la amenaza de ser embargados por deudores del Estado ruso.

El régimen de propiedad fue liberalizado por el nuevo código de propiedad que afecta tanto a los terrenos urbanos como a los industriales aunque excluyó a las parcelas rurales.

A fines de noviembre la OPEP pidió a la Federación Rusa que bajara su producción y exportación de petróleo para mantener los precios internacionales.

Para la actividad espacial el año 2001 estuvo marcado por el cierre de una etapa y el inicio de otra, signada por las dificultades económicas. El retiro de servicio y destrucción de la estación orbital MIR -último vestigio de la presencia soviética en el espacio-, debido a dificultades económicas abrió paso al turismo espacial. Esta nueva actividad permite a la Agencia Espacial rusa conseguir nuevas formas de financiación a sus alicaídas arcas: el multimillonario Dennis Tito pagó 20 millones de dólares por su viaje a la Estación Alfa.

La situación interna estuvo marcada por intentos por parte del Kremlin de aumentar su control sobre la sociedad civil. Por ejemplo, se propugnó un nuevo sistema electoral tendiente a reducir el número de partidos políticos en Rusia e intentó también realizar un cambio en el sistema judicial. La oposición denunció que la voluntad oficial es liquidar el poder judicial. Otro aspecto es el incremento del control de los medios: se producen cambios en los directivos en la única cadena de televisión privada rusa NTV, este hecho es denunciado como una maniobra del Kremlin para limitar la libertad de prensa. El accionista mayoritario del canal es la empresa estatal Gazprom y los temores iniciales, a pesar de las desmentidas oficiales, confirmaron el proceso de estatización. También, el Kremlin tomó el control de la radio independiente Eco de Moscú.

Existieron también cambios significativos en el gabinete, ya que luego de un nuevo aniversario de la elección de Putin se reemplaza a los ministros de Defensa e Interior, heredados de la administración Yeltsin, por hombres de su extrema confianza. También fueron reemplazados los titulares de Energía Nuclear y Policía Tributaria.

La ascendente espiral de violencia en la secesionista república de Chechenia siguió su curso. Allí las tropas federales incrementaron la represión interna y los rebeldes produjeron un sinnúmero de acciones terroristas que fueron desde atentados con bombas en diversas regiones del país hasta piratería aérea. El nivel de violencia obligó a las agencias humanitarias que operaban en esa República a retirarse a principios de año pero no impidió al gobierno ruso apoyar las tareas represivas de las fuerzas antiterroristas de la FSB (ex KGB) a pesar de los fuertes cuestionamientos en el ámbito internacional -donde Rusia no pudo evitar la nueva sanción por parte de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU- e incluso a escala local a través de la prensa. Producto de esto último, el Ejército ruso arrestó a una periodista de la Novaia Gazeta por sus declaraciones sobre la crisis en Chechenia. En el ámbito europeo, el Consejo de Europa levantó la sanciones sobre Rusia, pero esta acción contrasta con el rechazo que generaron las palabras de Putin en la reunión de la Unión Europea en Estocolmo donde comparó el conflicto de Chechenia con el de Macedonia en marzo.
Un dato para nada menor es la visita iniciada por Ilia Amodov, Ministro de Relaciones Exteriores de Chechenia a Estados Unidos. Esto es tomado por Moscú como una muestra más de la injerencia norteamericana en un conflicto que los rusos consideran interno.

A fin de volcar el conflicto checheno en su favor, Putin estimó que el atentado del 11 de septiembre fue producto del mismo desafío que ellos enfrentan en la zona del Cáucaso.
Con anterioridad a ese suceso, en mayo el presidente de Rusia, buscó acordar con cinco repúblicas ex soviéticas (Armenia, Belarús, Kirguizistán, Tayikistán y Kazajstán) la creación de una fuerza conjunta de reacción rápida para responder ante los extremistas islámicos y el creciente narcotráfico.

El aumento de la violencia federal y separatista no impidió que el 18 de noviembre se realizase la primera reunión oficial entre rusos y chechenos por la situación en esa región separatista.

La política internacional de la Federación Rusa estuvo marcada por el atentado de septiembre. En la primera mitad del año se produjeron fuertes fricciones con Estados Unidos (por las denuncias de espionaje y el Escudo Antimisilítico) que fueron virando hacia una complementación de la estrategia norteamericana, llegando a presionar a muchas ex Repúblicas Soviéticas para que accedieran a los pedidos de la administración de George Bush.

Para evitar la presión norteamericana, Moscú siguió una estrategia pendular reforzando sus lazos tanto con otras potencias occidentales como hacia el oriente. En el primero de los casos la visita de Gerard Schroeder -que es definido como el principal aliado ruso- y la firma de los acuerdos de defensa mutua en materia militar y espacial son un dato significativo. Es para resaltar la visita del Presidente francés Jacques Chirac en julio, donde el mandatario galo exaltó la buena relación entre la Federación y la Unión Europea. Es evidente que con estas visitas Putin buscó reafirmar su posición frente a los Estados Unidos apoyándose en las naciones de Europa Occidental.

Pero este no fue el único frente, ya que también recibió en marzo al presidente iraní, Mohamed Jatami, propuso en Moscú luchar contra la injerencia extranjera en la zona del mar Caspio, Asia Central y Oriente Medio y dijo que Rusia debe tener el rol de gendarme regional. También hizo lo propio en la recepción del presidente de Corea del Norte en Moscú, gesto que causó malestar en Washington dada la estigmatización de ese país como un estado bandido.

La decisión de la nueva administración norteamericana de expandir a la OTAN hasta la frontera de la Federación y el despliegue de un escudo antimisiles (NMD) produjo una reacción de rechazo por parte de la administración Putin.

La hostilidad también se manifestó en denuncias cruzadas de espionaje que ocuparon gran parte de la agenda de ambos países.

El 17 de febrero fue detenido Robert Hanssen un agente del FBI que en agosto se declaró culpable de vender secretos claves a Moscú. Días después, a pesar del silencio oficial ruso, los medios de comunicación de Rusia consideran que esta acción fue producto de una campaña antirusa. Como represalia en Moscú fue encarcelado un científico ruso, Igor Suteguin, acusado de trabajar para servicios extranjeros.

En marzo se reveló la existencia de un túnel por debajo de la Embajada Rusa en Washington por donde se espiaban sus actividades. Tras estos sucesos ambos gobiernos expulsaron cincuenta funcionarios de sus respectivas embajadas en Washington y Moscú

En el ámbito de la disputa misilistica, como una muestra de su oposición a la construcción del NMD, Rusia disparó tres misiles estratégicos que impactaron en el polígono de Kamchatka en febrero
En mayo, ante el anuncio de George Bush de la construcción del escudo antimisiles, el ministro de Relaciones Exteriores, Igor Ivanov señalo que Estados Unidos no debe dar pasos unilaterales.

En junio un incendio de origen desconocido destruyó tres rampas y doce misiles nucleares que protegen a Moscú generando preocupación en los ámbitos militares

En la Reunión de la OTAN de Junio en Eslovenia, el presidente George Bush aceptó incorporar a esa organización a países ex miembros de la URSS. Incluso en la cumbre entre Bush y Putin, el líder ruso anticipó que si Washington decide unilateralmente el escudo antimisiles se "complicarán las relaciones" y calificó al ABM como la "piedra angular de la seguridad internacional".

Putin informó de esta conversación a Zemin y le señaló que existían perspectivas realistas para un dialogo significativo y constructivo con Washington.

Tras algunos zigzagueos, que incluyeron la amenaza de aumentar su arsenal nuclear, Putin señaló que no excluye modificar el tratado ABM de 1972 para acercarse a los Estados Unidos.

Como una forma de aumentar la presión en contra del NMD, en julio, los presidentes ruso y chino firmaron un pacto estratégico de amistad, cooperación y comercio y se manifestaron en contra de este proyecto de la Casa Blanca.

Incluso en sectores vinculados al ejército ruso, como Igor Sergueyev, ex Ministro de Defensa ruso y actual asesor del presidente señaló que el despliegue del escudo antimisiles puede ser visto como un acto de hostilidad norteamericano.

A pesar del incremente del duelo verbal, el 22 de julio se anunció el inicio de la negociación de un pacto entre Rusia y Estados Unidos para reducir las ojivas atómicas además de rediscutir la validez del ABM y del Start II. A principios de agosto, Putin admitió flexibilizar el tratado ABM y dijo que si Estados Unidos avisa previamente podría instalar silos de cohetes para interceptar misiles.

Esta tendencia negociadora se reforzó tras el atentado, ya que junto a la OTAN se comprometieron a no dejar sin castigo a los terroristas y dejan de lado sus diferencias ante el escudo antimisiles.

Incluso en noviembre el presidente Putin fue más allá, ya que admitió que los Estados Unidos puede desplegar el Escudo en la medida que el tratado ABM de 1972 no sea violado si bien teóricamente estos sistemas están prohibidos por el mismo.

Esta tendencia negociadora se confirma durante la visita de tres días que el presidente ruso realizó a los Estados Unidos. El día 13 de noviembre Washington y Moscú firmaron una importante reducción de armamentos nucleares como una muestra más de su acercamiento.

Un dato adicional es la situación armamentista rusa. En febrero el encargado de la Comisión Gubernamental Investigadora del hundimiento del Kursk, Valeri Dorogin, reveló que un caño lanzatorpedos desajustado o un torpedo dañado fueron las causas del hundimiento del submarino ruso Kursk que en octubre fue reflotado. El incendio de origen desconocido que destruyó tres rampas y doce misiles nucleares que protegen a Moscú puede demostrar también la falta de mantenimiento del arsenal ruso. Putin convenció a los jefes militares del Kremlin que esto había sido un accidente. A pesar de esta situación un informe del Congreso norteamericano señala que Rusia ha vendido armas por siete mil setecientos millones de dólares.

Dentro de esta política de acercamiento se confirma el cierre de la base militar espía rusa en Cuba, lo que ocasiona la protesta del gobierno de Castro.

Por otro lado, el presidente ruso estima que el atentado del 11 de septiembre es un desafío a la humanidad, lo compara con la situación chechena y afirma que tales actos no pueden quedar impunes aunque señala que los Estados Unidos no pueden actuar como un bandido en la represalia.

En el marco de la guerra de Afganistán, los rusos incrementaron la ayuda militar a la Alianza del Norte en Afganistán y definen pelear conjuntamente contra el terrorismo a cambio de habilitar la entrada de Rusia a la OMC. Con este acuerdo Moscú presionó a los gobiernos de Tayikistán y Uzbekistán para que facilitaran las operaciones militares.

En una nueva muestra de su diplomacia pendular Putin acuerda con Zemin un reclamo para que los Estados Unidos reduzcan la operación a un tiempo lo más breve posible.

Producto del desarrollo de la guerra en Afganistán, a fines de noviembre, los rusos ingresan nuevamente en Kabul, tras doce años. Existió un fuerte rechazo de la población afgana.

A fin de año, las autoridades uzbecas reabren el llamado puente de la Amistad sobre el río Amú Dariá, con la frontera afgana tras haber sido cerrado al tráfico hace casi cinco años, cuando los talibán ocuparon esa zona del país.

El viceministro tayiko de Situaciones de Emergencia, Abdurajim Radzabov anuncia que Rusia envió más de 100 toneladas de ayuda humanitaria a Kabul a través del río Amu Daria.
En el marco de esta nueva distensión, producto de la guerra contra Al Qaeda, Moscú propone al Grupo de los

Ocho países más importantes (G-7 más RUSIA) emitir una declaración conjunta expresando su preocupación por el conflicto entre India y Pakistán e instar a ambos Estados a retomar "el diálogo político".

2. Dentro del ámbito de la ex Repúblicas Soviéticas

En la reunión del 25 de enero del Consejo de Europa, el presidente azerí, Gueidar Aliev denunció la agresión armenia que ocupa un 20 % de su territorio -Alto Karabaj- y que la comunidad internacional "observa en silencio esta tragedia." El mes siguiente el presidente armenio, Robert Kocharian, visitó Francia para conseguir más apoyos políticos para su país en esa lucha.

El 9 de septiembre Lukachenko es reelegido como presidente de Belarús por un 75 % de los votos emitidos.
La situación de Ucrania está atravesada por una fuerte crisis política que se manifiesta en importantes manifestaciones en contra de las autoridades de Kiev que son ferozmente reprimidas durante el mes de febrero y llevan a que el Parlamento censure al Primer Ministro Viktor Iuchenko en marzo. A medida que se agudiza la crisis política el gobierno gira hacia el autoritarismo y se acerca a Moscú, causando mayor rechazo en la población de ese país.

En junio el Papa Juan Pablo II inicia una visita a Ucrania donde recibió una fría recepción de los ortodoxos ucranianos. A pesar de los llamados de unidad de católicos y ortodoxos, tuvo poca recepción en la Iglesia Ortodoxa de Kiev y la asistencia a su misa fue menor a la esperada. No fue así en el homenaje a las víctimas del nazismo en el monumento de Babi Yar y recibió una entusiasta bienvenida en Lvov donde les habló a los jóvenes sobre la esclavitud el consumismo, culminando esta polémica visita a Ucrania con la celebración de una misa a la que asistieron más de un millón de fieles.

El otro hecho relevante en Ucrania fue la caída de un avión de pasajeros TU 158, si bien en un primer momento se pensó en un atentado fundamentalista islámico, luego se encontraron restos de un misil S-200 que descartaron esa hipótesis.

En Kazajstán tuvo lugar en septiembre una gira papal con fuerte protección ante un posible ataque terrorista. Allí el Papa hizo un llamado a cristianos y musulmanes a rezar por la paz en Kazajstán y justificó que Estados Unidos usara las armas contra el terrorismo en su última jornada de Kazajstán.
Uzbekistán, a pesar de su negativa inicial, junto con Tayikistán y tras el acuerdo ruso norteamericano de principios de octubre brindaron su apoyo logístico para las operaciones militares en Afganistán.

Isabel Stanganelli
Coordinadora del Depto. Europa y CEI