Revista de Relaciones Internacionales Nro. 15

El "Divorcio de Terciopelo"*:
Determinantes y Evolución.

 

 

Juan Manuel Gigli**

* Podemos singularizar el "Divorcio de Terciopelo" como la pacífica y ordenada desintegración de la Federación Checoslovaca, a partir del 1ro. de enero de 1993, en dos estados sucesores: la República Checa y la República Eslovaca, finalizando así, 74 años de coexistencia.
** Licenciado en Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Católica de La Plata., Coordinador de la "Escuela de Gobierno para Jóvenes» I.P.A.P., Subsecretaria de la Función Pública, Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.

Introducción.

 

La transición que se llevó a cabo en los países de Europa del Este, a partir de la caída de los gobiernos totalitarios que rigieron la zona, implicó una serie de procesos sociales y culturales, que se manifiestan con una importancia relevante para lograr analizar casos particulares, y evidenciar la viabilidad de las transformaciones democráticas que sus sistemas políticos implementaron.

Los procesos antes referidos, se manifestaron en la mayoría de los países del este europeo, en algunos de ellos de una forma clara, y en otros, a niveles en los cuales es necesario analizar diversos factores relacionados para arribar a un correcto diagnóstico de la situación.

Uno de los procesos que se presentó como marco, fue la re-evaluación de las tradiciones públicas y los símbolos sociales. Práctica social ésta, que se manifiesto en la valoración de acciones llevadas a cabo por personajes vinculados al régimen comunista, u otros de importancia histórica, que fueron olvidados o caricaturizados por el gobierno totalitario.

La práctica social antes referida fue notoria también en la re escritura de biografías, y la nueva descripción de hechos históricos. Asimismo, se manifiesto en una vuelta a los símbolos que imperaron en épocas anteriores al régimen comunista (cambio de bandera, fechas de celebración, nombres de calles, etc.). La re-evaluación de las tradiciones fue un fenómeno profundamente cultural, que tendió a producir una re-alimentación y afianzamiento de tendencias tradicionalistas, en los pueblos con una fuerte identidad, como por ejemplo Eslovaquia.

Otra faceta característica de éste proceso de democratización (sobre todo en los primeros tiempos), fue la polarización valorativa frente a la realidad, que se presentaba en todos los niveles sociales. Ello, tuvo dos consecuencias principales: en lo individual, hostilidad frente a cualquier personaje vinculado al régimen anterior; en lo colectivo, escasa evaluación de las opciones referidas a la organización de esas sociedades en transición.

En síntesis, al exhibirse el fracaso del comunismo, se rechazo a éste en la mayoría de sus manifestaciones, y la única salida que se presento como viable es la democracia liberal junto a la economía de mercado. Otros países, unos años más tarde, optaron, en elecciones libres, por reformados y "aggiornados" partidos socialistas, que por supuesto, eran integrados por los ex - comunistas. A pesar de esto, todavía está por verse si todas las economías del Este europeo (que eligieron el camino de la democracia liberal) podrán lograr un funcionamiento socialmente satisfactorio dentro de las reglas de juego capitalistas.

Por lo descripto en los párrafos anteriores, "es arriesgado considerar toda ésta serie de transiciones como un proceso de toma de decisión llevado a cabo por actores racionales, ya que olvidar los diversos factores subjetivos (y culturales) que tomaron parte de ésta sería cometer un gran error de percepción".

El análisis del proceso de democratización en el Este europeo, no debe olvidar el rol desempeñado por la elite, que juega allí un papel decisivo en el cambio, y especialmente determinante en la posterior desunión Checoslovaca.

A pesar de las tendencias mencionadas en los párrafos anteriores, que remarcan una preponderancia de valoraciones tradicionalistas, frente a los hechos que se sucedieron en la región, en el caso particular de Checoslovaquia, teniendo en cuenta su estructura socio - económica, la separación en dos Estados diferentes no era "necesaria" ni "urgente".

Puedo inferir que la ruptura estuvo orientada a la consecución, por parte de sectores de la elite (con identidades nacionales diferentes), de algún tipo de objetivo político - económico, que las beneficiara, y permitiera evitar desacuerdos y disputas sobre factores estructurales.

Por lo mencionado en el párrafo anterior es que considero insuficiente el componente nacionalista como factor explicativo de la disolución de la antigua Checoslovaquia.

 

Marco analítico.

 

La complejidad del sistema social y en particular del fenómeno al que se refiere el trabajo, plantea serios inconvenientes para lograr plasmar en un modelo teórico el alto dinamismo del proceso.

Es necesario aclarar que en un proceso multivariado como es la disolución de una país, es muy complejo señalar una relación de causalidad entre las fases de aquel proceso. Por ello, aquí busco centrar el análisis en el factor que a mi entender es más explicativo, o sea, la acción de la elite.

El siguiente cuadro permite percibir más fácilmente los factores prevalecientes en el desarrollo de la separación. Indudablemente, todos ellos tuvieron algún tipo de relevancia en la ruptura, pero no todos pueden caratularse como directamente patrocinadores de ella; sino, más bien, como condiciones socio - culturales previas del contexto y factores directos.

 

Cuadro 1: Factores analíticamente relevantes en la separación.

 

Condiciones socio – culturales Factores Directos

1. Nacionalismo. 1. Estructura Institucional.

2. Redefinición de referentes culturales. 2. Acuerdos a nivel de elite.

3. Formación de contra-elite.

4. Diferentes relaciones económicas.

5. Deterioro de la economía eslovaca.

 

Basándome en el cuadro anterior enunciaré mi hipótesis que es la siguiente: el proceso de disolución de Checoslovaquia fue determinado por la oposición de intereses de sectores de la elite, con identidades valorativas diferentes, en acordar una estructura económica común. Ello se debe a que las mismas se beneficiaban con estructuras económicas (vinculaciones económicas y estructura productiva) diferentes para sus naciones.

 

El nacionalismo.

 

Delimitando el nacionalismo.

 

Las pautas culturales de ambas repúblicas son claramente diferenciadas. La sociedad eslovaca posee un fuerte tradicionalismo cultural, un menor desarrollo de las pautas democráticas, un fuerte sentimiento colectivo (en contraposición al individualismo), y un atrasado proceso de industrialización y urbanización (comparado con su vecina República Checa). Además, la unión en una estructura federal común, fue visualizada por los sectores nacionalistas, como un intento de asimilación por parte de los checos y existió siempre la percepción de la iniquidad en cuanto a la distribución de los recursos.

Estas pautas, llevaron a que la sociedad eslovaca, que inicialmente compartía la euforia y las grandes expectativas que se levantaron durante el proceso eleccionario de junio de 1990, fuera gradualmente reemplazando esas expectativas por un cierto descontento e inseguridad, en cuanto al rumbo que debían seguir las reformas estructurales. Seguramente ese sentimiento tenía su base en ciertas costumbres "paternalistas", en cuanto al rol que debe desempeñar el Estado, muy arraigadas en aquella sociedad.

Y por otra parte, la inseguridad en cuanto al éxito de las reformas económicas, debido a la debilidad de su estructura económica. Es oportuno hacer referencia a que, en el año 1993, el 49% de la población eslovaca consideraba que "el Estado debía estar más involucrado en el control de precios", apreciación que nos sirve de parámetro para señalar la opinión favorable de la sociedad eslovaca, frente a la intervención del Estado en la economía, y la provisión de garantías sociales, como seguro de desempleo, educación o atención medica.

La continuación del deterioro de la economía eslovaca llevó a una considerable polarización de opiniones, en cuanto a los beneficios que podían obtener de las reformas que los checos lideraban (debido a su mejor situación estructural). A escala social, el deterioro económico llevó a que tomaran fuerza interpretaciones populistas de las reformas que debían llevarse a cabo, preponderara un sentimiento de rechazo a las reformas federales y tomara forma la percepción social de que los checos "explotaban" a la sociedad eslovaca.

Puedo exponer aquí, que el descontento frente a las reformas económicas no debe ser interpretado como nacionalismo, ya que esto nos haría perder el foco de la cuestión. Considero que el nacionalismo es una explicación insuficiente para la disolución, y que éste sólo funcionó como catalizador de las diferentes percepciones sociales de inseguridad en cuanto a la dureza del ajuste a llevar a cabo, y el descontento frente a los beneficios que la sociedad eslovaca esperaba obtener. La separación se sustentó principalmente en el desacuerdo en cuanto a una estructura económica común; no fue el nacionalismo una fuerza centrífuga que llevó a ambas repúblicas a posiciones polares, ni tampoco se presentaba como un factor tensionador o limitador de la gobernabilidad.

Otro indicador de la insuficiencia del nacionalismo como factor explicativo de la separación (y por lo tanto, del voto condicionado por la situación comparativamente desfavorable con los checos del pueblo eslovaco), se presenta al analizar el cambio rotundo de valoración, en cuanto a la separación unos meses pasada ésta. Este cambio seguramente fue debido al deterioro en diversas esferas sociales y principalmente en la económica, que la sociedad eslovaca continuaba padeciendo.

 

La estructura institucional.

 

La estructura institucional existente en Checoslovaquia, no reflejó nunca un compromiso profundo en cuanto a evitar el conflicto nacionalista entre checos y eslovacos.

En 1968, durante la "Primavera de Praga", el movimiento reformador liderado por Alexander Dubcek, incluyó dentro de su proceso de liberalización y democratización, una mayor autonomía para los eslovacos.

Con la conclusión de la "Primavera de Praga", más precisamente el 28 de octubre de 1968, se aprobó la ley sobre la Federación Checoslovaca, convirtiéndose el país en un Federación integrada por la República Socialista Checa y la República Socialista Eslovaca. Los soviéticos no se opusieron a ésta medida, debido a que se aseguraba el predominio del partido comunista en cada república. De aquí en más, ambas naciones contaron con su propias Asambleas Legislativas, llamadas Consejos Nacionales, y desde luego, su propio gobierno.

A nivel estatal, se crea la Asamblea Federal y el Gobierno Federal. La Asamblea Federal consta de dos cámaras: la Cámara del Pueblo (electa por la totalidad de la población checoslovaca, con criterios proporcionales) y la Cámara de la Naciones, con 75 miembros elegidos por el pueblo checo y 75 miembros elegidos por los eslovacos.

En cuanto al funcionamiento, se debe notar que para obtener una banca en la Asamblea Federal, es necesario obtener por lo menos el 5% de los votos en ambas repúblicas. Por ello, para la Cámara del Pueblo, el criterio es elegir aproximadamente dos tercios (101 miembros) en la República Checa, debido a su mayor población, y el tercio restante en Eslovaquia (49 miembros). Ese desequilibrio se trató de solucionar a partir de la sobre - representación de Eslovaquia en la Cámara de la Naciones (recordemos: 75 miembros para cada república). Los criterios proporcionales también se aplicaron a la representación en la Corte Suprema y los cargos jerárquicos en los ministerios públicos.

Si la representación es "equilibrada", ¿cuál es entonces el inconveniente? la mecánica del proceso legislativo. En la Cámara de las Naciones se requiere doble mayoría, o sea, que allí se votan todos los asuntos separadamente y para sancionar un proyecto de ley, la mayoría debe obtenerse en ambas secciones de la Cámara (mayoría en la sección checa y mayoría en la sección eslovaca). O sea, que la estructura permite y de hecho garantiza, el veto de uno de las representaciones nacionales en la asamblea. Debido también a que, para todas las enmiendas constitucionales, se requiere de mayoría calificada en cada una de las secciones de la Cámara de las Naciones, un pequeño número de diputados, checos y eslovacos, tiene efectivo poder de veto en la Asamblea Federal.

La estructura institucional checoslovaca se caracterizaba por la imposición de voto "supra - mayoritario", la inhibición de la regla de la mayoría, el frecuente uso del veto por la minoría y la dificultad de lograr acuerdos, debido a la doble mayoría requerida en la Asamblea Federal.10 

Desde otro punto de vista, la posibilidad de veto que existe en la Asamblea Federal, patrocina la creación de agrupaciones políticas de carácter regional, donde sus líderes tiendan a concentrarse en obtener preferencias a ese nivel, más que en la esfera Federal.

Exceptuando la regla del 5% de representación en ambas naciones, que es fácilmente superable a través de una alianza electoral, todas las características mencionadas de la estructura institucional de la antigua Checoslovaquia, tienden a exacerbar criterios nacionalistas, regionalistas o etnocéntricos.

Además, la errónea estructura institucional fue instaurada durante el gobierno comunista, luego de la Primavera de Praga, seguramente para evitar focos de tensión con la minoría eslovaca. Pero debido a la organización unipartidista de su sistema de gobierno, sus profundos defectos fueron disimulados.

Por ello, sostengo que el factor nacionalismo no fue un determinante, sino que debido a la propensión de la estructura institucional a la formación de agrupaciones de carácter regional, la difusión de ideas nacionalistas o etnocéntricas, se presentó como un instrumento útil para canalizar la oposición a reformas económicas, y sentó las bases de la futura disolución.

Así, vemos que la estructura institucional de la Checoslovaquia post-comunista, posee una seria inestabilidad inherente a ella, y facilitó que las demandas nacionalistas fueran encauzadas hacia el sistema político, no contando con herramientas para impedir la latente disolución.

 

La elite.

 

Dado en el presente trabajo el presupuesto central de que la división fue producto de diferencias profundas, en la percepción de sectores de la elite, en cuanto a la funcionalidad de la continuación de la estructura económica que mantenían hasta la desunión; y por lo tanto, de una impresión de aumento de las posibilidades de desarrollo social en forma separada, se debe tratar de utilizar un marco dinámico que nos permita captar el desarrollo de éste proceso.

En el caso particular al que se refiere el presente trabajo, parto del presupuesto de que la creación del país, (reunión de dos naciones en una sola estructura gubernamental) posibilitó, en su primera etapa, la existencia una sola elite consolidada por la legitimidad que el régimen democrático le otorgaba. Luego, en su segunda etapa, esa única elite se encontraba integrada y consolidada, por la fuerza, en una forma centralizada, debido a las "reglas de juego" que imponía el sistema de partido único.

Así, al producirse un gran cambio social, por ejemplo la transición desde gobiernos totalitarios, una parte de la elite, puede no lograr adaptarse a las nuevas condiciones, tanto internas como externas, del ambiente. La falta de adaptación a las nuevas condiciones es un de los factores de mayor importancia para la formación de una contra-elite.

La contra-elite, posee una valoración diferente a la elite en cuanto a las acciones funcionales que aquella lleva a cabo (por ej. la forma de control de los medios y procesos de producción), y esa situación tiene por consecuencia la creación de un fuerte disenso, frente a cualquiera de los amplios procesos funcionales que la elite lleva a cabo.

La funcionalidad de la elite (que la contra-elite considera insuficiente) debe entenderse en referencia el rol que realiza (y por lo tanto, a los aportes que lleva a cabo a la sociedad en su conjunto), el cual debe superar los costos sociales de su existencia (utilización de ventajas para su beneficio). Un indicador para tratar de lograr algo de objetividad en éste análisis costo/beneficio, podría ser el grado de desarrollo social alcanzado, siendo que a mayor desarrollo, mayor funcionalidad "social" de la elite.

 

El rol de la elite.

 

Profundizando en el análisis del proceso de división Checoslovaca, debo referirme a las subelites, que como afirmé en apartados anteriores, juegan allí un rol decisivo en la modificación de los sucesos que precedieron a la separación.

Como característica principal del proceso de cambio social, finalizada la transición desde el comunismo, es necesario notar la fragmentación que sufre la elite, al producirse el cambio de régimen; desde una centralizada, consolidada y estable elite, enmarcada en un sistema de partido único y de carácter totalitario, a una serie de diferenciadas y relativamente autónomas subelites y grupos de interés (burocracia administrativa, empresas estatales, medios de comunicación, Fuerzas Armadas, etc.).

Otro aspecto que caracterizaba la elite de aquel país es la continuidad de los sectores medios que la integraban, ya que a pesar de producirse un profundo cambio en las estructuras, tanto sociales como administrativas, muchos de los funcionarios del anterior régimen continuaron en sus funciones, con su natural influencia en el desarrollo de los acontecimientos.

La consolidación, y por lo tanto el consenso que poseía la elite checa, fue debido a la firmemente instituida política democrática del período de entre guerras.

Las dos tendencias características de la elite post-comunista (fragmentación y un fuerte sector integrado por funcionarios del régimen anterior), junto la amplia legitimidad que poseían las subelites checas, como motores de la pasada reforma durante la primavera de Praga, sentaron las bases para la futura ruptura; ya que la oposición a las reformas que se llevaban a cabo (encabezadas por la elite checa), luego de la caída del comunismo, fueron el detonante para que sectores de la subelite económica y de la burocracia11  (vinculados fuertemente al régimen anterior) conformaran un frente de oposición, a través de la adhesión, el soporte, o difusión de tendencias nacionalistas.

Por lo expresado en el esquema de análisis, puedo inferir que el régimen político post - comunista en Checoslovaquia era una democracia inestable. La inestabilidad de su estructura institucional, la falta de consolidación de la elite, y otras diferencias socio - económicas (que serán analizadas más adelante), precipitaron la formación de la contra-elite eslovaca.

Además, la preponderancia de los checos, elevaba a un nivel disfuncional el conflicto de intereses, "alimentando" resentimientos que habían sido "disimulados" por la centralizada elite comunista.

En definitiva, la inexistencia de fidelidad hacia la organización del sistema, el descontento en la asignación de recursos (de todo tipo), la falta de un factor externo a la elite que la vinculara y la carencia de valores comunes,12  precipitaron los acontecimientos hacia una salida pacífica, legal, pero terminante: la ruptura.

 

La subelite política acuerda la separación.

 

Para comprender el accionar de la subelite política como actor central del proceso de disociación, es necesario retrotraernos al año 1968. La Ley sobre la Federación Checoslovaca y lo descripto anteriormente en cuanto a la estructura institucional (que con sus limitaciones permitió y propendió a la competencia entre sectores nacionalmente diferenciados de la subelite política), nos marca el precedente más importante del proceso de separación.

Luego de la "revolución de terciopelo" (la caída del gobierno comunista), el escritor y poeta Vaclav Havel (líder indiscutido del movimiento opositor checo) es elegido Presidente provisorio hasta las elecciones de 1990.

En las elecciones de junio de 1990, una alianza entre los movimientos Foro Cívico (checo, liderado por Havel) y Público Contra la Violencia (eslovaco) logran una clara mayoría en la Asamblea Federal13 . A principios de 1991 ambos grupos se "rompen" en otros cuatro partidos. En las elecciones de junio de 1992 existían 15 grupos dentro de la Asamblea. En estas últimas elecciones, virtualmente todos los líderes que habían tenido una posición decisiva en 1989, no lograron obtener bancas en la asamblea.

En los primeros días de junio de 1992 (exactamente el 5 y 6), tuvieron lugar elecciones que tenían como propósito renovar las autoridades parlamentarias. En aquella elección, resultaron triunfantes partidos que tenían preponderantemente un perfil local. En la República Checa, el triunfo fue para el Partido Cívico Democrático (PCD), encabezado por Vaclav Klaus, de tendencia liberal (derecha), y en la República Eslovaca, el triunfo fue para el Movimiento de Eslovaquia Democrática (MED), de tendencia nacionalista de izquierda, con Vladimir Meciar a la cabeza. Cada uno de ellos fue elegido Premier de su respectiva república14 .

Con posterioridad a la mencionada elección debía llevarse a cabo la designación del Presidente Federal. El presidente Vaclav Havel (en el cargo desde 1989), buscaba ser reelegido por otro período para aspirar a mantener la unión de las repúblicas, pero los diputados eslovacos no le dieron su voto de confianza.

A partir de éste punto, los líderes de los partidos mayoritarios de ambas repúblicas, iniciaron conversaciones para llegar a un acuerdo sobre como lograr una federación "más flexible" para los eslovacos. El PCD de Klaus, trató de presionar para que la Federación se mantuviera unida, pero la negativa del MED (Meciar) se tornó irreversible al tratar el tema de la subjetividad internacional de las repúblicas. Los checos sostenían que debía existir una sola estructura representativa de la Federación a nivel internacional, mientras que los eslovacos proponían una Confederación con representación internacional separada para cada una de las repúblicas.

Al no poder acordar sobre ese tema en particular, éste funcionó como detonante de los acuerdos que se firmaron el 23 de julio, donde los líderes de los mencionados partidos convinieron la división del Estado Checoslovaco.

Con anterioridad al acuerdo, el Parlamento Nacional Eslovaco, aprobó la declaración de soberanía de la República Eslovaca, no dejando a sus representantes otra posibilidad más que la de conseguir una independencia pautada. Más tarde el Parlamento eslovaco sancionaría la Constitución Nacional Eslovaca. Con la desunión ya pautada, era necesario acordar la forma y la agenda por la cual se llevaría a cabo. Luego de duras negociaciones, el 26 de agosto de 1992, en la ciudad de Brno, se acordó el calendario que llevaría a la división definitiva el 1 de enero de 1993.

Cuando el acuerdo se trató en el Parlamento Federal, éste rechazó la aprobación del proyecto de Ley del gobierno Federal estableciendo las formas de desaparición de la Federación, en dos oportunidades, el 1 de octubre y el 18 de noviembre (recuérdese la posibilidad de veto de ambos sectores). Esta actitud del parlamento, significó un retroceso en el proceso de negociación y separación de la República Checoslovaca. Puedo aventurar que el rechazo al mencionado proyecto de Ley se debió a presiones populares y de la Comunidad Europea, en general, la que deseaba evitar una escisión "peligrosa" para el resto del continente.

Muchas de las medidas más importantes tomadas para favorecer la ruptura, fueron acordadas el 29 de octubre, luego de la firma de 16 acuerdos sobre cooperación mutua entre las repúblicas, que más tarde fueron entregados a los respectivos parlamentos para su ratificación. Algunos de los temas acordados fueron: sistemas monetarios, fronteras de los estados, registro de vehículos, uso común de las bases de datos del Ministerio del Interior, protección del medio ambiente, etc.

Luego de la primera derrota parlamentaria, los líderes Klaus y Meciar, se reunieron el 5 y 6 de octubre para ratificar el proceso de separación acordado por ambos. A pesar de ello, se produce un segundo revés el 18 de noviembre. Finalmente el 25 de noviembre, el parlamento Federal Checoslovaco aprobó la Ley Constitucional sobre la Disolución de la Federación, según la cual la República Federativa Checoslovaca desaparecería el 31 de diciembre de ese año, naciendo en su lugar La República Checa y la República Eslovaca, (art. 1 párrafo 2).

 

La economía.

 

La transición desde la economía socialista.

 

Con anterioridad a la separación, la economía checoslovaca se presentaba como una de las más sólidas de Europa Oriental, caracterizada principalmente por el alto nivel cultural y preparación técnica de su población.

Pero, además, existían particularidades adversas inherentes a todas economías de carácter socialista. Entre algunas de ellas: "la inexistencia de recursos productivos en manos privadas; la estructura de precios determinada y controlada por las autoridades gubernamentales; las compañías centralizadas en largas entidades monopólicas y una alta planificación de los procesos industriales"15 .

Luego del derrumbe de la centralizada economía comunista, los problemas que se perfilaban de urgente solución en la economía checoslovaca, eran la inflación y la obtención de inversiones extranjeras, que pudieran financiar el proceso de privatización iniciado.

El proceso de ajuste de la economía Checoslovaca, se llevó a cabo principalmente durante el año 1991, y tuvo como consecuencia, en el corto plazo, una profunda recesión durante ese año y parte del siguiente. Así, la implementación de ese tipo de programas implica, por supuesto, profundas transformaciones socio - económicas, y la necesidad de importantes variaciones en las "reglas del juego" económico.

En el siguiente cuadro, se pueden ver algunas de las diferencias relevantes a lo explicado arriba, entre la economía checa y la eslovaca (con anterioridad a la separación). Nótese que, a pesar de que la República Checa posee aproximadamente 2/3 del territorio y un 62% de la población, triplica (por lo menos) a la República Eslovaca en los temas considerados.

Cuadro 2:
Algunas diferencias económicas entre la Rep. Checa y la Rep. Eslovaca.

 

Rep. Checa Rep. Eslovaca R.C. / R. E.

Empresarios privados * 1.058.540 279.859 3.8 : 1

Créditos bancarios a
empresas privadas
(en millones de coronas)* 55.500 15.900 3.5 : 1

Firmas extranjeras * 2711 514 5.3 : 1

* hasta diciembre de 1991.

Fuente: East European Reporter, vol. 5 nr.5 (sep./oct.) 1992. OECD Economic Surveys: Czech and Slovak Federal Republic, citado en: Kopecký, Petr, op. cit.

El cuadro arriba situado permite inferir que la economía checa se encontraba en una mejor posición para "resistir" las consecuencias de un duro programa de ajuste. Ello es debido a un sector privado más amplio, mejor acceso al crédito y un volumen más alto de inversiones extranjeras.

Esas ventajas iniciales, que se manifestaron en un mejoramiento relativo de la situación social, en referencia a su vecina República, tendieron a acrecentar la percepción eslovaca de que las medidas llevadas a cabo por el gobierno Federal "excluían" a los eslovacos de las ventajas de ese tipo de programa. Percepción ésta, que se basó en la lentitud en la manifestación en la sociedad eslovaca de los beneficios que los programas de shock poseen, debido, seguramente, a su estructura industrial relativamente atrasada.

 

Luego de la separación: un enfoque macroeconómico comparativo.

 

Para comprender las razones últimas de la disociación, es necesario analizar la estructura económica de ambas repúblicas, para lo cual trataré de describir comparativamente cada una de ellas.

La economía de la República Checa, se ha caracterizado por su elevado nivel industrial. A partir de 1948, su industria se desarrolló en función al sistema de comercio establecido por el CAME (Consejo de Asistencia Mutua Económica), y las necesidades del Pacto de Varsovia. A partir de 1989, cuando se inicia la apertura económica, las inversiones extranjeras comienzan a llegar a la economía checa16 .

Por su parte, la República Eslovaca, se desenvolvió a lo largo de su historia sobre la base de una economía agrícola - ganadera. Durante la vigencia del comunismo, se instalaron industrias en la región (principalmente producción de maquinaria pesada e industria bélica), cuya reconversión resulta dificultosa. Su nivel de desarrollo industrial es inferior al checo. Solo el 7% de las inversiones extranjeras se ha radicado en la República Eslovaca. Además, presenta una estructura poblacional menos favorable demográfica y profesionalmente, y sufre de un desarrollo menor de la iniciativa privada.

La estructura económica eslovaca posee características contradictorias en algunas cuestiones. Como factores positivos, podría remarcar su estratégica posición geográfica (en el centro de Europa), la competitividad de su fuerza de trabajo (en función a la remuneración que recibe en comparación a sus vecinos regionales) y la posesión de importantes recursos naturales.

Ahora, entre los aspectos negativos, podemos encontrar: débil sector financiero, ineficiente sistema de asistencia social, estructura industrial atrasada y difícil de reconvertir, falta de un proceso profundo de privatización y de políticas de promoción de la inversión. Además, el Estado lleva adelante un rol importante en el control de los mercados17 .

 

Diferentes vinculaciones económicas.

 

Desde 1990 en adelante, comienzan a manifestarse las profundas diferencias en cuanto al modelo de inserción internacional, claramente pensado para darle, a la entonces Checoslovaquia, un papel preponderante como país desarrollado. La meta final, era lograr el ingreso a la Unión Europea, llevando adelante una profunda reestructuración socio - económica.

El modelo de inserción tenía un alto costo (tanto político, económico y por sobre todo social), en cuanto a reconversión de empresas, reforma del Estado, privatizaciones, etc., y debía asegurar una firme estructura económica, capaz de soportar asequiblemente la transición y estandarización previas al ingreso a la Unión Europea.

Por lo tanto, el alto costo de la reestructuración, las distintas vinculaciones comerciales determinadas por las diferentes estructuras económicas, el acercamiento checo a Alemania (como "padrino" para el ingreso a la Unión Europea), fueron, en el aspecto exterior, algunos de los determinantes para la formación de la contra-elite eslovaca.

La asociación a la actual Unión Europea, se manifiesta como uno de los objetivos principales de ambas repúblicas, pero difieren claramente en la forma de llevarlo a cabo.

Desde la República Checa, se propone un modelo de modernización que contó desde su inicio (previo a la ruptura) con el aporte de un gran volumen de inversiones, sobre todo de carácter alemán. La vecindad con ese país, las vinculaciones culturales existentes (una amplia minoría alemana habita en la región de los Sudetes) y la complementariedad de sus economías, posibilitaron un proceso de reordenamiento más holgado, que se manifiesta, en la posibilidad de modernizar la industria, a pesar de la rigidez del proceso privatizador, relacionando fuertemente la economía checa a la alemana.

Por su parte, la República Eslovaca, no contó con esos aportes debido a su atraso en el proceso de reconversión, la falta de solidez de su proceso privatizador (hasta principios de 1996), la difícil modernización de sus industrias, etc.; situación que resintió su economía, y retrasó las condiciones necesarias para su ingreso a la Unión Europea.

Es relevante hacer un apartado y describir los pasos que llevaron adelante estas repúblicas, para tratar de lograr el objetivo de la incorporación a la Unión Europea, ya que es en última instancia, uno de los factores que a mi entender estimuló las diferencias entre ellas.

Puedo identificar dos planos, uno el de acciones comunes, que incluye al período en que ambas naciones estaban formalmente unidas y, además, las acciones llevadas a cabo en conjunto, luego de la separación, con la intensión de mejorar las relaciones comerciales con sus vecinos. Y por otro lado, el plano de acciones diferenciadoras, que involucra todas aquellas vinculaciones, posteriores a la ruptura, que impliquen la obtención de beneficios (ej. inversiones), de fuentes que se contraponen en relación a los respectivos modelos de inserción establecidos.

En cuanto a las primeras, puedo distinguir que en diciembre de 1991, la República Federativa Checa y Eslovaca,18  firmó un tratado de asociación con la Comunidad Europea, con la intención de lograr la membresía plena.

Por supuesto, el proceso de adhesión a la actual Unión Europea no es simple ni acelerado. Luego de la firma del tratado de adhesión, se abre un período de transición de 5 a 10 años, donde el país solicitante debe iniciar un proceso de reestructuración y adaptación, especialmente en el ámbito económico, y en el que es seriamente observado y aconsejado, en cuanto al rumbo que debe imponer a los cambios para lograr la deseada membresía.

La República Checa, en la esfera económica, se halla muy por delante de la República Eslovaca en ese proceso.

En febrero de 1991, Hungría, Polonia y Checoslovaquia formaron La Trilateral, también conocido como el Triángulo o el grupo de Visegrad. Desde la República Eslovaca se visualiza a aquel grupo regional como de vital importancia, ya que consideran que el entendimiento y la colaboración con los países vecinos servirá de sostén hasta el pronunciamiento favorable de la Unión Europea.

Como paso anterior a la integración a la Unión Europea, Polonia, la República Checa, la República Eslovaca, Hungría, y desde el primero de enero de 1996 Eslavonia, llevaron adelante una asociación llamada Acuerdo Centro Europeo sobre Libre Comercio (C.E.F.T.A., en sus siglas en ingles, Central European Free Trade Agreement). El mismo, tiene por objetivo, la reducción y liberalización del comercio entre las naciones que lo integran, y por lo tanto, un aumento cuantitativo en el comercio y competitividad de sus industrias19 .

En cuanto al segundo plano de análisis, las acciones diferenciadoras, uno de los factores que más claramente separan a ambas repúblicas, son los países con los cuales comercian, y de los cuales obtienen las necesarias inversiones para llevar adelante sus respectivos procesos de reestructuración.

La República Eslovaca, a pesar de las intenciones de convertirse en miembro de la Unión Europea20 , continúa en gran medida comerciando y obteniendo financiamiento de Rusia21 . El estrechamiento de las relaciones con Rusia, puede implicar un retraso para la aceptación de su solicitud de ingreso a la Unión, debido a que se propugna un modelo de ingreso (ampliación) "masivo", o sea, que la meta se logre a través del fortalecimiento de las relaciones con los países de la región, para afianzar así las posibilidades de ingreso22 .

Por su parte, la República Checa condujo uno de los avances más importantes para su ingreso a la Unión Europea, y que puede ser tomado como indicador de la favorable evaluación que hacen los organismos internacionales del rumbo de la reorganización de su economía. Me refiero al ingreso a la OCED (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), a partir del 28 de noviembre de 1995.

La República Checa se convirtió en el vigésimo sexto integrante de dicha organización, que esencialmente funciona como un organismo de concertación e información mutua entre países industrializados, con economía de mercado. El hecho destacable, es que los checos son el primer país post - soviético que ingresa en tan prestigiosa organización.

El análisis de los acontecimientos posteriores a la disolución, nos muestran que ambas naciones, tratan de maximizar sus opciones en el ámbito internacional, en función a los medios con los que cuentan. A mi entender, las diferentes estructuras socio - económicas y las desiguales condiciones de sus economías, propiciaron distintos modelos de inserción regional e internacional.

En el caso particular de la República Checa, la evaluación de sus acciones, y su situación socio - económica, me permite inferir que las ganancias de la separación superaron a los costos, tomando como indicador de ello, el desarrollo social alcanzado y la prescindencia de conflictos profundos en su elite dirigente.

La crisis económica que se abate sobre la República Eslovaca, permite concluir que, esa república, debió cargar con los mayores costes de la desunión, (tanto sociales como económicos) debido a una situación estructural de atraso con respecto a su vecino estado.

A pesar de ello, su elite buscó siempre un maximización de las posibilidades estructurales del sistema, a través de un tipo de inserción "multipolar"; entiéndase ello, como la obtención de beneficios, a partir de la vinculación comercial con Rusia y otros países de la región, a la vez que se busca, por ejemplo, el ingreso a organismos de seguridad regional como la OTAN.

No puedo aventurar que la disolución haya sido totalmente disfuncional para los eslovacos, ya que es imposible inferir si la situación estructural sería más beneficiosa a su población que la que viven actualmente. Posiblemente, si se hubieran "sometido" al "control" checo, las reformas necesarias para la modernización de su economía, hubieran implicado costos sociales aún mayores.

Finalizando el presente apartado, puedo manifestar que la pretensión de llevar a cabo diferentes acciones en el ámbito internacional por ambas naciones, y basando las mismas en el desacuerdo en cuanto a la forma y el tiempo en que la inserción a nivel regional debía llevarse a cabo, fomentó la percepción de la "necesidad" de la desunión, como herramienta para evitar desacuerdos estructurales.

 

Conclusión.

 

El primero de enero de 1993, terminó la convivencia que durante 74 años habían sostenido checos y eslovacos.

En el presente trabajo, se buscó señalar los determinantes que precipitaron la disociación entre esos dos pueblos, y mostrar algunas pautas para comprender la evolución de dicha separación. La primera conclusión que se desprende de lo esbozado, es que el nacionalismo como factor explicativo (sin la consideración de otros elementos), es insuficiente para explicar la división. Fue necesario considerar factores que tuvieron influencia directa y precipitaron los acontecimientos reseñados a lo largo del presente escrito.

El primer factor que se buscó examinar, fue la estructura institucional de la Checoslovaquia post-comunista. Allí repararé en que la organización institucional y los procesos políticos que aquella propiciaba, fomentaron la formación de agrupaciones políticas de carácter regional y avivaron resentimientos nacionalistas, sobre todo por parte del pueblo eslovaco.

Estos resentimientos, se basaban en la objetiva desigualdad existente entre la población eslovaca y la checa, y debido a que el acceso a una de las cámaras de la Asamblea Federal se basa en criterios proporcionales, existió una constante percepción de avasallamiento por parte de los checos hacia los eslovacos. Sumado a esto, las antiguas percepciones de carácter histórico - culturales, instaladas en el imaginario social y las profundas desigualdades socio - económicas entre las dos naciones, prácticamente delimitaron el rumbo de los acontecimiento hacia la separación. Además, la iniquidad en la distribución de los recursos, proveyó un fuerte impedimento a la consecución de acuerdos y suministró un excelente "sustento" a las quejas nacionalistas.

En cuanto al rol desempeñado por la elite, es necesario señalar que las decisiones definitivas sobre la ruptura fueron tomadas en los círculos más cerrados, sin que en ningún momento la población fuera consultada sobre el tema.

Más allá de ello, el régimen que fue el resultado de la transición desde el comunismo, podría caracterizarse como un régimen democrático inestable, debido a la falta de consolidación de su elite y el constante peligro de la formación de una contra-elite.

El surgimiento de la República Eslovaca, es el producto de la consolidación de la contra-elite, que fue un freno constante a los procesos de reforma que la elite checa lideraba y ansiaba instituir. De alguna forma, el "divorcio", fue una "bendición" para la elite checa, ya que logró remover una fuente de conflictos y atenuar las divisiones sobre las reformas económicas.

Por otro lado, también se buscó analizar las diferentes estructuras económicas como sustento "racional" para el proceso que se describió aquí, interpretando aquellas como determinantes de los respectivos modelos de inserción a nivel regional que ambas repúblicas buscaron.

Del análisis de aquel proceso, puedo concluir, que el modelo que los sectores de la elite checos proponían, podía resultar perjudicial a sectores de la elite eslovacos (sobre todo económicos y burocráticos), por el alto costo que el proceso referido poseía para la sociedad eslovaca, atrasada relativamente con respecto a su vecina checa. Y ciertamente, los sectores políticos que respondían a esos intereses atacaron el inconveniente rápidamente.

Lo "paradójico" de esa circunstancia, es que la población (que fue un simple espectador de todo ese proceso) no compartía la necesidad de sus dirigentes de separarse. Como atenuante a ello, se puede agregar, que una gran porción de la población eslovaca era partidaria de estructuras económicas de carácter "social", es decir, con una alta intervención del Estado en la economía, posición que las diferenciaba profundamente de sus vecinos checos.

Las disparidades socio - económicas, el rol del Estado en la economía, la rapidez con que la integración a la Unión Europea debía llevarse a cabo, y la "carga" que significaba para los checos las deficitarias empresas estatales eslovacas, fueron todos factores que motivaron a los checos a no esforzare para impedir las tendencias separatistas que los eslovacos manifestaban. Por otro lado, si hubieran estado decididos a impedirlo, los recursos institucionales con los que contaban eran realmente limitados.

En cuanto a la evolución de la división, deseo manifestar que permitió a los checos llevar adelante exitosamente su proceso de transición desde una economía centralizada a una economía de mercado, con una bajo nivel de desempleo y una alta probabilidad de convertirse en el primer país post - soviético en ingresar a la Unión Europea.

Por el lado eslovaco, las cuestiones pendientes son más graves, la intervención del Estado en la economía es muy grande (en relación a sus vecinos regionales) y la dependencia comercial y energética de Rusia, podrían ser un freno para un exitoso proceso de integración.

En definitiva, a pesar de las diferencias reseñadas, el hecho que se debe remarcar, es el exitoso proceso de consolidación democrática que se ha llevado adelante en ambos países.

Y, a pesar de las profundas divisiones que los separaron, del convulsionado "clima" político y la crisis económica que se abate sobre Eslovaquia, ambas elites pudieron ganar legitimidad y afianzar un régimen democrático que garantizara uno de los valores del cual millones de habitantes de Europa del Este carecieron durante la dominación comunista: la libertad.

 

Bibliografía.

 

· Fidrmuc, Ján. "Economic Transition in Czechoslovakia and its Successors." Departament of Economic, University of Missouri, Columbia, EE.UU.

· Gyarfasova, Olga. "Slovak society in the first year of Independence." Working Paper presentado en el XVI Congreso Mundial de Ciencia Política, Berlín, 21-25 de agosto de 1994.

· Higley, John y Pakulski, Jan. "Elite Transformation in Eastern Europe and Russia". Working Paper presentado en el XVI Congreso Mundial de Ciencia Política, Berlín, 21-25 de agosto de 1994.

· Kopecký, Petr "From Velvet revolution to Velvet split: Consociational institutions and the desintegration of Czechoslovakia". Versión revisada del paper preparado para la conferencia Ethnonational Cleavages and the Viable Constitutionalism, en la Universidad de Hawaii, Honolulu, del 5 al 8 de enero de 1995.

· Segert, Dieter. "Not a right name - the function of borrowed politicial identities in the post - communist process." Working Paper presentado en el XVI Congreso Mundial de Ciencia Política, Berlín, 21-25 de agosto de 1994.

 

 

 

 1 Giovanni Sartori en referencia a ello, indicó: "... presiento que un número creciente de europeos del Este están, aun sin saberlo, redescubriendo el liberalismo (clásico). Quiero decir que están redescubriendo las virtudes políticas - y a mi juicio la esencia - del liberalismo: que el poder incontrolado es insufrible y desastroso; que jueces y tribunales deben ser verdaderamente independientes; que las constituciones no son meramente cualquier estructura que el Estado posea, sino una específica estructura garantista que limite y restrinja realmente a los detentadores del poder." Teoría de la Democracia: 2. Los Problemas Clásicos, pag.478, Edit. REI.

 2Segert, Dieter. "Not a right name - the function of borrowed politicial identities in the post - communist process." Working Paper presentado en el XVI Congreso Mundial de Ciencia Política, Berlín, 21-25 de agosto de 1994.

 3Segert, Dieter, op.cit.

 4Gyarfasova, Olga. "Slovak society in the first year of Independence." Working Paper presentado en el XVI Congreso Mundial de Ciencia Política, Berlín, 21-25 de agosto de 1994. Pág.3.

 

 5En abril de 1992 (dos meses antes de las elecciones), se realizó una encuesta representativa de la población eslovaca, en la cual se preguntó: "en su opinión, ¿si las reformas económicas continúan, podrían traernos prosperidad?" a lo cual un 25% de los encuestados (que preferían una Eslovaquia independiente) contestaron "Si", mientras que el 60% contestó "No" . El 41% de los "federalistas" respondió "Si", y "No" un 38%. Gyarfasova, Olga. op. cit. Pág.4

 6De acuerdo con las repetidas encuestas de opinión los habitantes de ambas repúblicas preferían el mantenimiento de la unidad (un 76% de los eslovacos y un 92% de los checos consideraban en 1992 que era beneficioso un Estado común). Gyarfasova, Olga. op. cit. Pág.5

 7Por estructura económica entiendo las diferentes relaciones que los actores sociales tienen con la producción, la distribución, el comercio y la administración de los factores económicos.

 8En marzo de 1993 (tres meses luego de la separación) un 49% de los eslovacos hubieran votado en contra de ésta, en octubre del mismo año ésta opinión trepaba a un 60%. Gyarfasova, Olga. op. cit. pág.5

 9Kopecký, Petr "From Velvet revolution to Velvet split: Consociational institutions and the desintegration of Czechoslovakia. Versión revisada del paper preparado para la conferencia Ethnonational Cleavages and the Viable Constitutionalism, en la Universidad de Hawaii, Honolulu, del 5 al 8 de enero de 1995.

 10 Ibid.

 11Como indicador de lo comentado, es necesario notar que en el año 1994 la mayoría de los puestos de importancia en la recientemente formada República Eslovaca eran mantenidos por ex-comunistas. Higley, John y Pakulski, Jan. Op. Cit.

 12Un sentimiento nacional que podríamos denominar "checoslovaquismo" era inexistente en épocas anteriores a la disolución. Posiblemente, sólo los checos, que deseaban mantener la estructura federal y preponderaban en todos sus niveles, tuvieran una percepción que se aproximara a ello.

 13En la elección del 9 de junio de 1990 se disputaron 300 asientos en la Asamblea Federal. Los resultados fueron los siguientes:

Foro Cívico - Público contra la Violencia:168.

Partido Comunista de Checoslovaquia: 48.
Unión Cristiana Democrática: 40.
Asociación por Moravia y Silesia: 16.

Partido Nacional Eslovaco: 15.

Coexistencia: 12.

Demócratas Liberales: 2.

 14 Es importante destacar que, a pesar de tener esos partidos tendencias regionalistas, el desmembramiento de Checoslovaquia no figuraba en sus plataformas; lo que nos permite inferir que no hubieran tenido el mismo apoyo popular de haberlo propuesto abiertamente, para que la sociedad checoslovaca tuviera oportunidad de juzgar sobre ese tema.

 

 15 Fidrmuc, Ján, "Economic Transition in Czechoslovakia and its Successors", Departament of Economic, University of Missouri, Columbia, EE.UU.

 

 16De los U$S 1.600 millones que esa República recibió hasta finales de 1992, el 60% corresponde a capitales alemanes. Si a las inversiones alemanas se les suma las suizas y las austríacas, estas representarían el 73% de las inversiones extranjeras. Arredondo, Ricardo, op. cit. Pág. 92

 17 Un indicador importante de los diferentes grados de liberalización de los respectivos mercado podemos obtenerlo en las facultades de control que puede ejercer el gobierno sobre los precios. A ese respecto, la aprobación por parte del Parlamento eslovaco de la llamada Ley sobre los Precios, faculta al ministro de Finanzas para regular los precios de los bienes cuando una "situación extraordinaria" se presente en los mercados, siempre en defensa del "interés público y los consumidores".

 18Desde 1991 en adelante y hasta la posterior separación, el nombre oficial de Checoslovaquia fue cambiado a República Federativa Checa y Eslovaca, debido a la presión de los eslovacos de una mayor "federalización" del país.

 

 19El acuerdo tomó particular relevancia, tan pronto como el 13 de noviembre de 1995 se firmara en Praga un acuerdo entre sus miembros para eliminar o reducir sensiblemente los derechos aduaneros sobre el comercio de productos agrícolas.

 20Según otra encuesta realizada por la agencia independiente FOCUS, a principios de 1996, el 49,7% de la población eslovaca, sostiene que apoya la integración de su nación dentro de las estructuras comerciales y militares como la OTAN y la UE. A pesar de ello, el 19,3% considera que la política exterior eslovaca está acercándose a Rusia. Slovak Economic Sheet, op. cit.

 21El 31 de octubre de 1995, el Primer Ministro eslovaco Vladimir Meciar y su contraparte rusa, Victor Chermomyrdin, firmaron seis acuerdos bilaterales, incluyendo uno sobre la financiación rusa para la construcción de una central nuclear República Eslovaca. Pero la importancia de estos acuerdos va más allá, ya que en esa reunión se trató la posible creación de una zona de libre comercio entre la dos naciones.

 22El 29 de febrero de 1996, el Ministro de RR.EE. ruso, Yevgenii Primakov, durante su visita a Eslovaquia, urgió a ese país a demorar los planes para el ingreso a la OTAN. Sostuvo que la expansión de la OTAN "...pondría a Rusia en una peor posición militar y geopolítica." Slovak Economic Sheet, Issue 9.