Revista de Relaciones Internacionales Nro. 10
Nuevos Senderos de la Economía Coreana y
su Influencia en la Relación entre Argentina y Corea
Sang Kyoon Park*
* Ex-Consejero Económico Embajada de la República de Corea en Argentina.
Kipling, el primer inglés que obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1907, nacido en India, transcurrió casi toda su vida en Asia, en una oportunidad escribió lo siguiente: "Asia no será modernizada con los métodos de Occidente. Existe una gran Asia y es muy antigua ". Esto parecía realmente así hasta hace unas décadas atrás. Hace cuarenta años , en Corea el PBI per cápita era de menos de cincuenta dólares estadounidenses. Con el cambio de siglo, muchos países Asiáticos, incluido Japón, fueron considerados como lugares sin esperanza, sin posibilidad de desviarse de sus destinos y con defectos heredados de un larga y onerosa historia de miles de años.
Los Asiáticos, especialmente los del Este de Asia, no obstante, pararon sus viejos campamentos y se lanzaron a la marcha. Aun no encontraron un lugar de descanso. Sin embargo, los habitantes del Este Asiático han construido un seguro camino de regreso a casa, a partir del cual podrán dar el salto para equipararse con los países de Occidente.
Corea, al estar situada en el corazón de Asia Oriental, ha tenido que recorrer un largo y duro camino durante las ultimas cuatro décadas, desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Hemos tenido que enfrentar la trágica división del país 1945, que nos dejó con un muy pequeño potencial para el crecimiento industrial. Hemos tenido que luchar para repeler el ataque comunista de los norcoreanos en 1950.
A pesar de estas dificultades, los coreanos se reunieron y mancomunaron sus limitados recursos, para construir una economía de nivel mundial partiendo de la nada. En consecuencia, el crecimiento económico desde 1960 ha convertido a Corea en uno de los nuevos líderes de los países de reciente industrialización. La economía coreana esta actualmente muy integrada en el mercado mundial. En 1993 las exportaciones e importaciones de bienes y servicios fueron aproximadamente un cuarenta por ciento del PBI. El PBI per cápita actual de u$s 7.500, equivale a cien veces el de 1962.
El suceso económico coreano desde 1960, ha sido públicamente atribuido a la diligencia de los trabajadores coreanos, al entusiasmo del empresariado por la innovación y al liderazgo de la burocracia coreana.
Los años 1986-88, representaron un periodo de prosperidad sin precedentes para Corea, esto fue celebrado siendo Seoul sede de los Juegos Olímpicos de 1990. Pero este festejo fue inmediatamente seguido por el empeoramiento del ambiente económico en el interior y el exterior de Corea, que llevo a un rápido deterioro de la economía coreana y particularmente a una continua perdida de la competitividad internacional.
Internamente, desde 1987 comenzó una rápida democratización política que encendió fuertes intereses de grupo, especialmente los de trabajadores y campesinos. Como resultado, la relación de colaboración entre los trabajadores y sus empleadores se quebró mientras que los salarios subieron a niveles altos. Imposibilitados de superar este aumento de salarios a través de la innovación tecnológica y gerencial, los empleadores perdieron su fervor empresario para la exportación y la inversión.
Al mismo tiempo, los gobernantes no pudieron continuar ejerciendo su rol tradicional de liderazgo, fallando en contener los intereses de trabajadores y empleadores para recuperar así la competitividad internacional de la economía nacional.
También se enfrentaron los gobernantes con muchos obstáculos para lograr la competitividad internacional de la economía nacional. Su interés principal del momento fue la promoción de la equidad social y del bienestar social. Como resultado de ello, el aumento del presupuesto del gobierno se vio afectado a estos fines, a las inversiones de carácter social y a otra clase de gastos efectuados para soportar el mejoramiento de la competitividad industrial.
En el frente externo Corea había comenzado a ser desplazada de los mercados mundiales, en sus productos tradicionales como la vestimenta, calzado, y muchos otros por productos provenientes de China y de paises en desarrollo de Asia. Al mismo tiempo, debido a la fuerte protección de la tecnología que realizaban los países avanzados, la adquisición de esta era mucho mas dificultosa que antes.
La economía se convirtió en el tema principal de la ultima elección presidencial, y el señor Kim Young Sam obtuvo la victoria con la promesa de construir una economía fuerte y mas balanceada, basada en el aumento de la competitividad internacional. La nueva estrategia económica que el gobierno de Corea proponía era llevar a cabo esta promesa.
Completado este plan en el comienzo del año 1993, la nueva estrategia económica esta basada en la premisa de destruír las instituciones creadas durante los regímenes autoritarios en los primeros años de desarrollo, pero sin que esto impida la continuación de los éxitos pasados, ahora bajo la protección del nuevo marco democrático y en un contexto de rápidos cambios de la economía internacional.
Por esta razón se propuso la reforma de todas las instituciones necesarias para liberar la iniciativa privada y promover la cooperación voluntaria entre los agentes económicos como los trabajadores y el empresariado. De esta forma, el cambio en el paradigma del pensamiento económico de Corea, que aun permanece tanto en el sector gubernamental como en el privado, hace avizorar la creación de un nuevo mecanismo para el desarrollo económico.
Bajo el drástico cambio de la estrategia para el desarrollo económico, el gobierno ha sido designado para cumplir tres roles específicos: ampliación de potencial de crecimiento económico, mejoramiento de las condiciones de vida y acrecentamiento de las bases del comercio e inversión internacional.
No es necesario decir que todas estas reformas propuestas por la nueva estrategia, promueven la participación de Corea en el comercio e inversiones internacionales, de las que depende cada vez más el dinamismo de su economía. En la cúspide de estos esfuerzos, de cualquier modo, los gobernantes coreanos seguirán dos políticas especiales guiadas en torno a estos objetivos. Una es la promoción de una futura apertura del mercado. La otra es la promoción de la internacionalización de varias prácticas e instituciones.
La continua apertura de los mercados domésticos es considerada de gran importancia para la economía coreana por dos razones. Primero, esto permitió a Corea contribuir en la liberalización del comercio e inversiones mundiales, como así también ganar y mantener los accesos a los mercados externos. Segundo, estimulará los esfuerzos de los productores locales en el fortalecimiento de su competitividad internacional frente al crecimiento de la competencia de los países extranjeros.
La política de internacionalización incluye los esfuerzos para simplificar y hacer mas transparente el sistema regulatorio, para equipar a Corea con los países industriales avanzados. Estos esfuerzos ayudarán a que la economía coreana esté completamente integrada a las del mundo industrializado y pueda competir y cooperar en un mismo nivel.
La economía coreana está lista para un segundo despegue e indudablemente alcanzará, hacia el final del siglo, el nivel de los países avanzados.
Entre otros, Corea tiene una fuerza laboral que es probablemente una de las mas sofisticadas en cuanto a su habilidad, de la región de Asia-Pacífico. Estructuralmente, Corea está equipada con capitales e industrias de tecnología intensiva, por ejemplo la industria automotriz, la naviera, la petroquímica y la de semiconductores, que otros países de Asia, excepto Japón, no pueden proveer.
Durante los últimos años, se ha producido en Corea una explosión en materia de disputas laborales; no sólo los empleadores sino también los trabajadores se han dado cuenta de la importancia de la paz en la industria. El país es actualmente escenario de estables relaciones industriales.
Mas aún, políticamente, Corea es uno de los pocos países de Asia que ha experimentado un cambio pacífico y democrático de gobernantes, sin disturbios que alteren la estabilidad política.
Los ahorros internos de Corea representan mas del 33 por ciento del PBI, mientras que la fuerza laboral es mas joven que la de Japón. Comparándola con otras economías de reciente industrialización, como Taiwan y Hong Kong, Corea tiene un acceso relativamente libre a los principales mercados mundiales. También, junto con Singapur y Hong Kong, Corea posee una escala económica que le permite tener una estructura económica diversificada.
La Cuenca del Pacífico, que comprende las economías del Este de Asia, se convirtió en un gran mercado para las economías emergentes, incluyendo la de Argentina. Corea intenta ser un jugador central en la futura apertura de los mercados del Asia Pacífico hacia los proveedores de todo el mundo. A continuación se exponen cinco buenas razones por las cuales Corea podría resultar atractiva para inversores extranjeros, socios para joint-ventures o proveedores de productos primarios:
1)Corea es una economía muy grande. Su PBI esta ubicado en el lugar numero 15 del mundo, y es la décimosegunda potencia comercial.
2)El mercado coreano es amplio y abundante; con una población de 43 millones de personas y un ingreso anual per cápita de aproximadamente u$s 7.500. Además Corea es una sociedad dinámica y consumidora.
3)Corea tiene una sólida base de manufacturas y su mano de obra es cualificada, esto le permite asimilar tecnología sofisticada. Corea desearía unir su tecnología en el procesamiento de manufacturas con socios extranjeros, para marchar juntos hacia mercados de terceros países.
4)Corea esta estratégicamente situada en la intersección de Asia. Seúl se encuentra a dos horas de vuelo de Tokio, Shanghai y Beijing, y a aproximadamente una hora de Vladivostok. Corea es un estable escenario desde donde los negocios pueden avanzar eficientemente a lo largo de la Cuenca del Pacífico.
5)La estabilidad política es una condición para el sostenimiento de la expansión económica y el intercambio internacional. Corea provee esto y es una estable y floreciente democracia.
Sin duda, como se pudo evidenciar recientemente durante la disputa nuclear con Pyongyang, Corea enfrenta algunas incertidumbres con respecto al futuro de Corea de Norte. De todas formas, Corea trata de facilitar la apertura de Corea del Norte, y espera poder formar una comunidad económica coreana. Si el progreso es pacífico, se obtendrán buenos resultados y Corea se beneficiará con los recursos naturales de Corea del Norte y al mismo tiempo despejará las incertidumbres que produce ese país.
El Comercio entre Argentina y Corea
En lo referente al comercio bilateral entre Argentina y Corea, el volumen negociado tuvo una gran expansión durante los últimos cinco años. El volumen de intercambio, en ambos sentidos, que no llegó a u$s 140 millones en 1988, subió a u$s 580 millones en 1992, mostrando un crecimiento del 400% en ese período.
Por productos, Corea exporta a Argentina electrónicos, textiles y vehículos, entre los tres cubren un 85% del total de exportaciones a Argentina. A su vez Corea también aumentó sus importaciones de Argentina principalmente productos de la agricultura y de la pesca.
La rápida expansión del volumen del comercio bilateral ha provocado desbalances comerciales no intencionados.
Por supuesto, es necesario decir que el comercio internacional aumentará no solo en forma de superávit sino también en forma deficitaria como nosotros hemos vivido muchas veces. Sin embargo, en su carácter de primera nación en desarrollo candidata a ser miembro de la OECD en 1996, Corea desea tener un acercamiento diferente al expandir las relaciones económicas con sus socios comerciales en todo el mundo.
Uno de mis amigos de negocios en Corea me contó una graciosa historia de un cerdo y una gallina que formaron un joint venture para producir jamón y huevos. El cerdo retornó a casa contento por las perspectivas de ganancias hasta que se dio cuenta de que para el era un compromiso total que le llevaba la vida. Ciertamente, nosotros no queremos ver situaciones de este tipo con ninguno de nuestros socios comerciales.
No podemos negar que la existencia de desequilibrios comerciales, si permanecen así, pueden convertirse en el Talón de Aquiles en el camino del aumento del comercio y la relación económica entre dos naciones. Desde una perspectiva diferente, el desequilibrio comercial puede ser un catalizador para galvanizar la expansión futura del comercio. Si somos lo suficientemente inteligentes para tener una visión de largo plazo en la solución de los problemas, podremos balancear el comercio a través de la expansión del volumen total de comercio entre los dos países.
Se dice que los países solo tienen intereses, no amigos. Pero Corea se enorgullece de ser conocida como una nación que privilegia los amigos sobre los intereses.
Hay un viejo proverbio coreano que dice que todos los botes flotan alto cuando el nivel del agua sube. En otras palabras, en una economía mundial que se globaliza, el crecimiento de una nación debe contribuir a elevar los botes de todos sus socios comerciales.
De nuestras experiencias en el comercio con las naciones industrializadas en el pasado, Corea llegó a la conclusión de que solo un balance en los intereses entre los dos países garantizaran una fiel relación comercial de largo plazo.
Los gobiernos de ambos países, Argentina y Corea han creado un cuerpo consultivo económico conjunto en 1992 para eliminar cualquier dificultad que pudiera surgir en el campo del comercio o las inversiones. La segunda reunión del cuerpo consultivo se llevo a cabo a fines de 1994 en Seul.
Corea esta hoy abriendo mas su economía al mundo en forma masiva. Por su parte, Argentina esta también comprometida a moverse hacia una integración económica dentro del Mercosur. Ambas economías buscan un acceso mas amplio a la expansiva economía mundial, estoy convencido, de que esos caminos brindarán prosperidad a nuestros dos pueblos que vivieron separados mucho tiempo por el vasto pero explosivo Océano Pacífico.
Espero haberles podido mostrar lo que Corea hace para contribuir a los esfuerzos globalescon el fin de elevar el nivel del agua de la economía mundial con la visión de elevar todos los botes que flotan en el mercado mundial: desde las costas de Asia hasta las del otro lado del Pacífico en general y desde Corea a la Argentina en particular.