Departamento de Asia y el Pacífico
Centro de Estudios Chinos
Artículos
El tiempo de las provincias: Características y desarrollo reciente de la relación entre la República Popular China y la Región Centro de la Argentina[1]
Ignacio Michel
1. Introducción
Desde 2013, bajo el liderazgo del presidente Xi Jinping, la República Popular China (China) acentúa un enfoque proactivo en la escena internacional (Rosales, 2020). Según Jorge Malena (2018), China abandonó la estrategia de «bajo perfil» que había predominado en las presidencias anteriores, siguiendo el lema de Deng Xiaoping: «esconde tu fuerza, espera tu tiempo, nunca tomes la delantera». En su lugar, China ha promovido ambiciosas iniciativas con una clara dimensión exterior, como la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la creación del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura, y la conformación de los BRICS.
Este nuevo escenario internacional plantea desafíos analíticos para un país como Argentina, tradicionalmente ubicado en la zona de influencia de EE. UU., pero que, a su vez, desde 2003 viene construyendo de manera ascendente una relación con China. Desde los estudios internacionales, se han analizado los continuos cambios ocurridos a nivel global, los cuales han alterado la centralidad del Estado-nación. Como resultado de tales cambios, las relaciones internacionales ya no se limitan exclusivamente a los estados centrales, sino que emergen nuevos actores, tanto gubernamentales como no gubernamentales. Este artículo se enmarca en dicho contexto, teniendo como objeto de estudio la Región Centro de Argentina —compuesta por las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos— y su relación con China. La vinculación entre la Región Centro y China constituye un terreno propicio para el análisis del desarrollo federal de Argentina, pues resalta una cooperación que ha generado beneficios mutuos. Con el objetivo de analizar las diversas áreas de vinculación entre estas provincias y China, se ha decidido abordar las dimensiones institucional y económica, las cuales consideramos fundamentales para comprender tanto el impacto como el alcance de esta relación.
2. Las relaciones sino-argentinas (2003-2023)
La República Popular China y la República Argentina establecieron relaciones diplomáticas en el año 1972 mediante la firma del Comunicado Conjunto de Bucarest. Este hecho tuvo lugar en un contexto marcado por la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y China. Este proceso se caracterizó por el reconocimiento por parte de Estados Unidos de la política de «una sola China» y el respaldo para la admisión de China como miembro de las Naciones Unidas. El vínculo sino-argentino, como la realidad de ambos países y el contexto geopolítico, transitó por modificaciones multicausales. En este apartado se analizarán las relaciones entre ambos países entre 2003 y 2023. Durante estas dos décadas, se observaron cambios y continuidades que han marcado la dinámica de esta relación bilateral que lleva 51 años. Es menester destacar que, durante el período analizado, Argentina y China han mantenido una postura sólida y solidaria en relación con el reclamo soberano argentino sobre la finalización de la ocupación británica en las Islas Malvinas, así como en el respaldo argentino al principio de «una sola China». El inicio del gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) se dio en un contexto adverso y de incertidumbre. Argentina había atravesado en el 2001 la crisis económica, social, institucional, bancaria y política más importante de las últimas décadas, y por la magnitud y diversificación de la crisis, representó en términos de consecuencias la de mayor envergadura en el Cono Sur. El estallido social producido al inicio del siglo fue el desenlace de las políticas neoliberales llevadas a cabo durante la década del 90. En este contexto, el gobierno de Néstor Kirchner estuvo abocado desde su inicio a la búsqueda de la gobernabilidad e institucionalidad del país (Ferrer, 2014).
La realidad política y económica de China en este período fue muy diferente. En el año 2001 ocurrió un hecho trascendental: su ingreso pleno a la Organización Mundial del Comercio (OMC), proceso que tomó 15 años de negociaciones arduas. En 2007, China superó a Alemania y se convirtió en la tercera economía más grande del mundo. Sumado a ello, ya en 2010 desplazó a Japón del segundo lugar (Taiana, 2022). Respecto de las relaciones sino-argentinas, Kirchner dio inicio a un período de dinamismo entre ambos países. Al respecto, para Santillán (2023), “los hitos más destacados del subperíodo fueron las visitas de Estado de los respectivos presidentes, ocurridas en un lapso considerablemente escaso de tiempo, entre junio y noviembre de 2004, componiendo un importante gesto simbólico” (p. 113). Durante las mencionadas visitas presidenciales, los logros más destacados fueron el reconocimiento de China como economía de mercado por parte de Argentina y la definición de la relación sino-argentina como “estratégica”. La llegada de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) a la presidencia de Argentina marcó un punto de inflexión en las relaciones entre ambos países, profundizándolas significativamente. Este suceso se materializó en el establecimiento de la Asociación Estratégica Integral entre ambas naciones en el año 2014. Este nuevo status en la relación bilateral es uno de los hitos más destacados de toda la relación sino-argentina (Taiana, 2022; Santillán, 2023). Para Ramón-Berjano, Malena y Velloso, el carácter de “estratégico” de la asociación implica la voluntad de trabajar conjuntamente tanto en cuestiones referidas al crecimiento económico como en asuntos internacionales. A su vez, “la condición de integral” significa la inclusión de los aspectos político, económico, cultural, tecnológico y militar. (2015, p. 45)
Sin embargo, durante el camino hacia este logro, surgieron tensiones comerciales debido a acusaciones de dumping en las exportaciones chinas a Argentina y a medidas de restricción impuestas a las importaciones desde China. Estas tensiones afectaron particularmente al comercio de porotos y aceite de soja entre ambos países, llevando a suspensiones parciales de compras por parte de China durante los años 2010 y 2011 (Villasenin, 2023). A pesar de los desafíos mencionados, las relaciones bilaterales se vieron fortalecidas gracias a una serie de intercambios oficiales de alto nivel. En este sentido, la presidenta argentina realizó visitas a China en los años 2010 y 2015, mientras que líderes chinos, incluyendo al presidente Xi Jinping, al primer ministro Wen Jiabao y al vicepresidente Li Yuanchao, visitaron Argentina en años subsecuentes, 2014, 2012 y 2013 respectivamente (Taiana, 2022). Además, durante este período, la cooperación bilateral se expandió en áreas como cultura, defensa, tecnología nuclear, aeroespacial, transporte y finanzas, demostrando el carácter integral de la relación (Santillán, 2023).
En 2015, se produjo un cambio de coalición de gobierno en la Argentina, con Mauricio Macri como presidente. Las primeras señales de su política exterior reflejaron un alineamiento con EE. UU., lo que resultó en tres episodios que tensaron las relaciones entre China y Argentina. El primero de estos episodios está relacionado con la construcción de dos represas en la provincia de Santa Cruz, financiadas por inversiones chinas (Sánchez, 2016). El segundo, por la construcción de una estación espacial, en la localidad neuquina de Bajada del Agrio, para la observación del espacio lejano, gestionada entre organismos gubernamentales especializados de China y Argentina (Dinatale, 2016). El tercero está relacionado con la revisión de los acuerdos para la construcción de dos centrales nucleares en Argentina (Dinatale, 2018). Estos episodios ocurrieron en un contexto internacional complejo, como resultado de la denominada «guerra comercial» entre Estados Unidos y China. Además, la crisis económica en Argentina se acrecentó a mediados del 2018 y llevó al país a contraer una deuda significativa con el Fondo Monetario Internacional. Este préstamo, por un monto récord de 56 mil millones de dólares, no cumplió con los protocolos establecidos por el organismo y se otorgó al gobierno argentino de ese momento por razones más ideológicas que financieras (Lejtman, 2020). Esto se produjo en consonancia con la renovación de dos nuevos swaps de monedas con China. Por lo tanto, la relación entre ambos países durante la gestión de Macri (2015-2019) se caracterizó por una notable ambivalencia, reflejada en una política exterior deliberadamente ambigua. Este enfoque respondió en gran medida a la necesidad de equilibrar las relaciones en un contexto cada vez más tenso entre China y Estados Unidos (Santillán, 2023). En 2019, Argentina vivió un nuevo cambio de gobierno, con la asunción de Alberto Fernández como presidente (2019-2023). Durante este período, las relaciones con China estuvieron marcadas por la pandemia de COVID-19, que provocó un aislamiento sanitario global y una grave crisis económica. China, por su parte, implementó un abordaje estricto de la pandemia en su territorio, lo que le permitió controlar el virus en el corto plazo. Además, cuenta con tres de los principales laboratorios productores de vacunas del mundo: Sinopharm, CanSino y Sinovac, que, al igual que el laboratorio Gamaleya de Rusia, se enfocaron en la exportación de sus vacunas. Paralelamente, China emprendió una campaña de colaboración internacional, suministrando materiales sanitarios a diversos países en una iniciativa denominada “diplomacia del barbijo”, con el objetivo de mitigar el daño a su imagen a nivel mundial, provocado por la connotación negativa asociada con el surgimiento del COVID-19 desde Occidente (Tavernise & Oppel, 2020). Las relaciones entre China y Argentina, durante este particular panorama, retomaron el dinamismo de la primera etapa en análisis (2003-2015). En el ámbito de la cooperación sanitaria bilateral durante la pandemia, China se destacó no solo como uno de los primeros países en ofrecer asistencia a la nación sudamericana, sino también como un proveedor clave de suministros médicos esenciales y uno de los principales abastecedores de vacunas para Argentina (Ministerio de Salud de la República Argentina, s.f.). Por otro lado, la formalización de la incorporación de Argentina tanto al Banco Asiático de Inversión en Infraestructura en 2020, como la incorporación a los “BRICS+” en 2023, así como la renovación y ampliación del swap de monedas en 2020 y 2022, respectivamente, son eventos destacados en la relación bilateral en aspectos políticos, diplomáticos y financieros. En el ámbito diplomático, la visita del presidente Fernández a Beijing en febrero de 2022 marcó un momento significativo, coincidiendo con el 50 aniversario de las relaciones diplomáticas entre ambos países. No obstante, el acontecimiento político más destacado durante este período, tanto del viaje como de la relación bilateral, fue la firma por parte de Argentina del Memorándum de Entendimiento de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Este hecho simboliza un importante respaldo político a la iniciativa de política exterior más significativa de China, y al mismo tiempo abre nuevas oportunidades para la cooperación en infraestructura y comercio entre ambos países (Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la República Argentina, 2022). En definitiva, en este apartado se pudo observar que la relación entre Argentina y China experimentó un crecimiento constante en varios aspectos durante el período analizado (2003-2023). A pesar de un período ambivalente entre 2015 y 2019, particularmente en el ámbito diplomático, la relación sino-argentina ha vuelto a mostrar signos positivos en los últimos años del período estudiado, lo que implicó un regreso a una dinámica favorable en diversas áreas de cooperación.
3. Los Estados subnacionales argentinos
Durante la década de los 70, se produjo un debate teórico que dio surgimiento a la Teoría de la “Interdependencia Compleja”, desarrollada por Robert Keohane y Joseph Nye, la cual propone un enfoque alternativo al “realismo” en las relaciones internacionales. “Sus contribuciones en el terreno teórico, compartidas por amplios círculos académicos durante la década de los setenta, aseguraban que las nuevas realidades del sistema internacional no podían explicarse con el modelo tradicional realista” (Tokatlian & Rodrigo Pardo, 1990, p. 340). Esta teoría destaca la creciente interconexión entre los actores internacionales, tanto estatales como no estatales, y la importancia de múltiples dimensiones de interdependencia más allá de la militar y la económica. Por ello, Keohane y Nye (1989) cuestionan la perspectiva centrada únicamente en el Estado al considerarla limitada, y sugieren la necesidad de incluir a una variedad de actores en el análisis. El sistema internacional, según Rosenau (1997, citado por Calvento et al., 2014, p. 38), se caracteriza por la coexistencia de fuerzas que fragmentan y otras que integran. Este fenómeno, al que Rosenau denomina «fragmegración», implica una redistribución de la autoridad en dos direcciones: hacia instancias supranacionales, como organizaciones internacionales y entidades intergubernamentales regionales, así como hacia grupos subnacionales, que abarcan desde minorías étnicas y religiosas hasta gobiernos locales y organizaciones con objetivos específicos (Calvento et al., 2014, p. 38). En un contexto de interdependencia global, los Estados reconocen la inviabilidad de la autosuficiencia y optan por participar en la economía mundial mediante el comercio, buscando nuevas oportunidades de conexión que favorezcan una estrategia orientada al comercio. De manera similar, las entidades estatales subnacionales adoptan una postura análoga al buscar competir en el ámbito internacional, procurando maximizar sus ventajas competitivas. Esta tendencia es denominada por Rosenau como “Estados Comerciales” (1986, citado en Colacrai & Zubelzú, 2004). Los Estados subnacionales son entidades políticas con poderes y competencias propias, aunque subordinadas al gobierno nacional (Calvento, 2014; Zubelzú, 2008). Desde la perspectiva de Fronzaglia (2005, citado por Calvento et al., 2014), son “unidades institucionales o niveles del Poder Ejecutivo, que son componentes de un gobierno de un Estado Nacional: ciudades, estados, regiones, provincias, municipios u otros poderes locales” (p. 36). Las provincias argentinas, como estados subnacionales, tienen competencia a la hora de pensar en su inserción internacional, aunque esto no fue siempre así, ya que en la Constitución de 1853 se asignaron las responsabilidades en materia de relaciones internacionales exclusivamente al Gobierno Nacional, limitando a las provincias a la celebración de tratados parciales en áreas de competencia compartida y prohibiéndoles hacer tratados políticos o ejercer cualquier poder delegado a la Nación. Sin embargo, con la reforma constitucional de 1994, la situación jurídica se modificó, ya que el artículo 124 enuncia:
Las provincias podrán crear regiones para el desarrollo económico y social y establecer órganos con facultades para el cumplimiento de sus fines y podrán también celebrar convenios internacionales en tanto no sean incompatibles con la política exterior de la Nación y no afecten las facultades delegadas al Gobierno federal o el crédito público de la Nación; con conocimiento del Congreso Nacional. La ciudad de Buenos Aires tendrá el régimen que se establezca a tal efecto. Corresponde a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio. (Constitución de la Nación Argentina, 1994)
Con la reforma constitucional se reconoce la capacidad de las provincias para celebrar convenios internacionales, siempre y cuando estos no entren en conflicto con la política exterior nacional y no afecten las competencias del Gobierno Nacional o la estabilidad económica del país. A su vez, este proceso debe realizarse con el conocimiento del Congreso Nacional. En la década de los 90, se implementaron diversas medidas para fomentar la participación internacional de los gobiernos subnacionales. Entre estas, se destacó la transferencia de responsabilidades desde el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (Cancillería), con la creación de la Subsecretaría de Relaciones Institucionales2 como parte de su reestructuración organizativa. En el marco del federalismo, el regionalismo y la autonomía impulsados por la reforma constitucional, surge la Región Centro como un bloque de integración regional territorial subnacional. Este bloque, conformado por las provincias de Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe, tiene como objetivo “promover el desarrollo económico y social, el desarrollo humano, la salud, la educación, la ciencia, el conocimiento y la cultura” en las provincias que lo integran (Región Centro, s.f.). La creación de este espacio interprovincial representa un ejemplo de las capacidades de acción conjunta a nivel subnacional en Argentina, fortaleciendo la cooperación y la planificación estratégica entre sus miembros. La Región Centro tiene un papel destacado en el comercio exterior de Argentina, aportando el 38 % de las exportaciones nacionales. Asimismo, su producto bruto geográfico representa el 18 % del producto bruto interno del país, lo que refleja su significativa contribución a la economía argentina. La región también se distingue por su población, que supera los 8,4 millones de habitantes y representa el 19,2 % del total nacional. Estas cifras destacan la relevancia de la Región Centro como un actor clave dentro de la estructura económica y demográfica del país, consolidando su lugar en el panorama nacional e internacional (Región Centro, s.f.).
4. China y Córdoba
La provincia de Córdoba cuenta con una superficie de 165.321 km² y una población de 3.840.905 habitantes, lo que la posiciona como la segunda provincia más poblada de Argentina. Además, se encuentra entre los principales polos productivos del país, ya que es la tercera provincia en cantidad de empresas por millón de habitantes (Instituto Nacional de Estadística y Censos [INDEC], 2022). La relación de la provincia de Córdoba con China nos brinda un campo prolífero de análisis a la hora de pensar el desarrollo en términos federales. En ese sentido, de las múltiples áreas que vinculan la provincia con China, decidimos abordar las dimensiones institucional y económica, a las que consideramos de mayor relevancia. En la dimensión institucional, la provincia de Córdoba actualmente mantiene 65 hermanamientos con ciudades de diversos países de Europa, Asia, América Latina y América del Norte. Específicamente con China, la provincia firmó un Memorándum de Fortalecimiento de las Relaciones Amistosas entre la Provincia de Córdoba y la Provincia de Jiangsu en el año 2007. Uno de los hitos más relevantes fue el hermanamiento con el municipio de Chongqing, uno de los cuatro municipios bajo jurisdicción central en China, con una equivalencia institucional similar a la de una provincia argentina. Los otros tres municipios con esta característica son Beijing, Shanghái y Tianjin. Este acuerdo, realizado en 2010, fue el primero en ser firmado entre Chongqing y una provincia de América Latina. En cuanto a los convenios de hermanamiento entre ciudades de Córdoba y China, se destacan los siguientes: Bell Ville con Yongkang (2004), Marcos Juárez con Gongqingcheng (2009), Villa María con Liaocheng (2014), y los firmados por la ciudad de Córdoba Capital con Xi’an (2012), Wuhan (2014), Jiaxing (2018), y Hangzhou (2021). Es importante mencionar las misiones realizadas por delegaciones chinas a Córdoba en los años 2012 y 2019 con fines de promoción económica y cultural, así como las visitas de autoridades cordobesas a China en los años 2013, 2016 y 2019. Otro antecedente de marco institucional entre Córdoba y China se produjo en relación con los gasoductos troncales. Esta importante obra para la provincia, anunciada durante el gobierno de José Manuel de la Sota en 2015, consistía en la construcción de una red de gas compuesta por 10 gasoductos troncales y 8 regionales, con el propósito de suministrar gas natural a 210 localidades y así alcanzar al 98 % de la población. Esto implicó la construcción de 2.800 kilómetros de gasoductos y una inversión de 890 millones de dólares (Gobierno de Córdoba, 2019). En el año 2016 las obras fueron asignadas a las empresas
China Petroleum Pipeline Bureau, asociada con Electroingeniería SA (operarán las zonas Sur y Norte); China Communications Construction Company LTD; junto con Lecsa (a cargo de las zonas Este y Centro II); y la Constructora Norberto Odebrecht SA (realizará los trabajos en las zonas Oeste, Punilla II, Anillo Córdoba y Gran Córdoba, Centro, Ruta 2 y Sureste). (Gobierno de Córdoba, 2016)
No obstante, en 2017, el nuevo gobierno de la provincia de Córdoba anunció la relicitación de parte de las obras que habían sido adjudicadas a los consorcios, debido a divergencias en el cumplimiento de los plazos establecidos y los montos acordados (Origlia, 2017). Sin embargo, las demoras persistieron, principalmente por la falta de coordinación con el gobierno nacional y el impacto de la crisis financiera que afectó a Argentina en 2018. Finalmente, en 2019, el entonces gobernador Juan Schiaretti anunció la culminación de las obras, marcando un hito en el desarrollo del proyecto tras años de retrasos y desafíos (Gobierno de Córdoba, 2019). En Córdoba se encuentra la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), una de las universidades más prestigiosas de Latinoamérica y la más antigua de la Argentina. Esta institución ha llevado a cabo diversas iniciativas de vinculación con China en los últimos 20 años, las cuales han ido en aumento en cuanto a su envergadura. En este sentido, la Facultad de Lenguas de la UNC comenzó a impartir el chino mandarín como parte de sus opciones académicas en el año 2007. Desde el año 2014, la Prosecretaría de Relaciones Internacionales de la UNC puso en marcha la “Diplomatura de Gestión en Negocios con la República Popular China”, con el objetivo de “contribuir al desarrollo y fortalecimiento de las capacidades, habilidades y competencias necesarias para la formulación y realización de negocios, actividades comerciales, inversiones y desarrollo de las relaciones interinstitucionales con la República Popular China” (Universidad Nacional de Córdoba, 2020). Estos dos antecedentes precedieron al establecimiento del Instituto Confucio en la UNC en 2020, lo que representa un avance cualitativo en la relación con China, ya que promueve el acercamiento a la cultura, el idioma, la economía y la política del país asiático. Para su apertura, es necesaria la firma de un convenio tripartito entre una universidad local, una universidad china3 y Hanban.4 En el mismo año, tuvo lugar otro hecho relevante, con la creación del Consejo de Vinculación Estratégica con la República Popular China, cuyo objetivo es posicionar a la provincia “como un polo de estudio, enseñanza y promoción de los idiomas español y chino mandarín para investigadores, docentes, estudiantes y empresariado, con el fin de fortalecer el intercambio cultural y la cooperación técnica con la República Popular China” (Gobierno de la Provincia de Córdoba, s.f.). Esto se produjo con la coordinación entre la provincia, la UNC y la Universidad Católica de Córdoba (UCC). En la dimensión económica, China se posiciona como el segundo socio comercial y se encuentra entre los principales destinos de las exportaciones de la provincia de Córdoba.5 En el plano nacional, la provincia se sitúa en el tercer puesto en términos de volumen exportado, superada únicamente por las provincias de Buenos Aires y Santa Fe.6 Este posicionamiento reafirma el papel clave que desempeña Córdoba en la economía nacional y su contribución al comercio internacional del país (INDEC, s.f.). Al analizar específicamente las exportaciones hacia China, es evidente el impacto significativo que tienen en la economía provincial. En el año 2022 Argentina exportó a China un total de USD 7.928 millones, de los cuales la provincia de Córdoba contribuyó con USD 1.081 millones. Estas cifras reflejan la importancia de la relación comercial entre Córdoba y China, y subrayan el potencial para un mayor crecimiento en el intercambio comercial bilateral (Gobierno de la República Argentina, 2023). Este escenario ubica a la provincia argentina en una posición que puede ser interpretada como de debilidad y de oportunidad simultáneamente. Al profundizar en esta situación, se observa que una parte considerable de las exportaciones cordobesas se basan en productos primarios, representando un 45 % del total; seguidos por manufacturas de origen animal, con un 39,43 %; manufacturas de origen industrial, con un 15,38 %; y combustibles y energías, con un 0,19 % (ProCórdoba, s.f.). Al analizar las exportaciones por tipo de producto, se destaca que el poroto de soja (excluido para siembra) lidera la lista con un valor de USD 785.339, seguido por el sorgo granífero (excluido para siembra), con USD 117.900, y en tercer lugar se encuentra el aceite de maní en bruto con USD 61.009, de acuerdo a cifras del año 2022 (ProCórdoba, s.f). La alta concentración en productos primarios tiende a favorecer la primarización de la economía provincial; sin embargo, al mismo tiempo resalta la necesidad y la oportunidad de explorar otros sectores, tanto en servicios como en bienes, con el fin de agregar valor y diversificar las exportaciones de Córdoba hacia China.
5. China y Entre Ríos
La provincia de Entre Ríos alberga una población cercana a los 1.236.000 habitantes, situándose como la séptima jurisdicción más densamente poblada del país. Sus centros urbanos más significativos incluyen su capital, Paraná, y Concordia. Aproximadamente, el 15 % de su territorio está compuesto por islas y áreas propensas a inundaciones, lo que le confiere el estatus de provincia insular. La principal fuente de generación de riqueza en la provincia es la agricultura. Entre Ríos concentra más del 50 % de la producción avícola nacional, destacándose como la principal productora y exportadora de carne aviar en Argentina. Además, su producción y exportación de huevos frescos e industrializados representa el 23 % del total nacional. La provincia también desempeña un papel relevante en la producción y exportación de cítricos dulces, arándanos y miel (Gobierno de la Provincia de Entre Ríos, s.f.). En lo que respecta a su dimensión institucional, el antecedente más antiguo en relación con China se remite a 1996, cuando estableció un acuerdo de hermanamiento con la provincia de Jilin. En el año 2004, la provincia firmó el Convenio Marco para el Establecimiento de Relaciones de Amistad y Cooperación con la provincia china de Henan, seguido por un acuerdo en 2005 para establecer relaciones, intercambiar experiencias, promover la cooperación y fomentar la amistad entre ambas provincias (Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales [CARI], 2010). En este sentido, China y Entre Ríos han establecido diferentes convenios internacionales: Convenio de cooperación entre la Asociación China de Comercio e Industria de Hong Kong (HKCICA) y el Consejo Federal de Inversiones (CFI), con la adhesión del Ente Región Centro, al cual Entre Ríos pertenece, como mencionamos anteriormente. Se ha firmado también el Acuerdo entre la provincia de Entre Ríos y el Centro de Promoción Urbano-Rural Xiao Kang, en 2015. Este acuerdo implica compromisos de inversión por parte de China por más de 250 millones de dólares en industrias lácteas, cárnicas y citrícolas, así como en el sector portuario de Entre Ríos. Y el Acuerdo marco de cooperación entre la provincia de Entre Ríos y la Corporación Nacional de Importación y Exportación Técnica de China (CNTIC), firmado en 2018, que implica inversiones por parte de CNTIC en obras de gas, líneas de alta tensión y fibra óptica en el norte de la provincia de Entre Ríos (Zacarías, 2022). El gobierno de Entre Ríos ha desempeñado un papel protagónico en el desarrollo de las relaciones con China en las últimas décadas. A través de visitas oficiales, misiones comerciales y encuentros institucionales con autoridades chinas, la provincia ha buscado fortalecer los vínculos bilaterales en búsqueda de oportunidades de inversión y cooperación. A continuación, se listan, en orden cronológico, algunos antecedentes significativos (ProCórdoba, 2010; Cuestión Entrerriana, 2010; La Política Online, 2014; Xihuan, 2016; Gobierno de la República Argentina, 2018; Diario Huarpe, 2019):
- Misión institucional y comercial de la Región Centro a Hong Kong y Guangzhou, 2010.
- Reunión del por entonces gobernador de Entre Ríos Sergio Urribarri con el embajador de China en la Argentina, Zeng Gang, 2010.
- Reunión del gobernador Sergio Urribarri con el embajador de China, Yin Heng Min, 2014.
- Viaje a China del gobernador Urribarri, 2014.
- Reunión del gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, con el embajador de China en Argentina, Yang Wanming, 2016.
- Misión Institucional y Comercial de la Región Centro a la ciudad de Shanghái, para la participación de la feria SIAL, 2016.
- Reunión entre el gobernador Bordet y el consejero Económico y Comercial de China, Zhai Chengyu, 2016.
- Reunión entre el gobernador Bordet y el embajador chino en Argentina, Yang Wanming, 2016. • Participación institucional de la provincia de Entre Ríos en la Feria Internacional SIAL de Shanghái, 2017.
- Participación del gobernador Bordet en la Cumbre Empresarial ChinaLatinoamérica y la Cumbre China-Latinoamérica-Caribe sobre intercambio de inversiones, organizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo, 2018.
- Presentación del gobernador Bordet ante los directivos del Export-Import Bank de China (Eximbank) y del Banco Popular de China, 2018.
- Visita del embajador chino, Zhou Xiaoli, al puerto de Concepción del Uruguay, con el objetivo de familiarizarse con sus instalaciones y promover intercambios comerciales a través del puerto, 2019.
- El intendente de Concordia, Entre Ríos, recibe la visita del embajador Zhou Xiaoli, 2019.
Respecto a las inversiones chinas en la provincia, en el contexto del ingreso de Argentina a la Franja y la Ruta, el entonces presidente Alberto Fernández anunció durante su viaje a China en 2022 el “Plan de Cooperación de Inversiones de la Franja y la Ruta”, el cual comprende múltiples proyectos para Argentina. Para Entre Ríos, se proyectaron la conexión física Paraná-Santa Fe y obras complementarias, enmarcadas en el «Plan de Cooperación de Inversiones de La Franja y La Ruta» y el proyecto «Cierre Energético Norte Los Conquistadores-La Paz y Gasoducto Productivo III del Noroeste Entrerriano» dentro del «Diálogo Estratégico para la Cooperación y Coordinación Económica» (Restivo, 2022). Además, el sector porcino recibió promesas de inversiones chinas (Uno Entre Ríos, 2020), las cuales se suspendieron debido a una campaña de difusión nacional en contra de la instalación de granjas porcinas a gran escala en Argentina (Grasso, 2020). En cuanto a la dimensión comercial, los principales productos exportables de la provincia en los años 2020, 2021, 2022 y 2023 fueron cereales, carnes y sus derivados, semillas y frutos oleaginosos (INDEC, s.f.). Entre Ríos realiza exportaciones a más de 130 destinos internacionales. En el año 2022, China fue el principal comprador, con una participación del 27,6 %, luego el Mercosur con un 14,6 % y Chile con 7,7 % del total exportado por la provincia (Entre Ríos Exporta, s.f.). Esta tendencia se repitió en el año 2023, ya que China nuevamente ocupó el principal destino de las exportaciones de la provincia, con un 21,1 % del total de lo exportado, siendo los cereales, oleaginosas y productos ganaderos los principales (INDEC, s.f.).
6. China y Santa Fe
La provincia de Santa Fe, con una población de 3.544.908 habitantes, se posiciona como la tercera más poblada de Argentina. Sus principales centros urbanos son Rosario, la tercera ciudad más grande del país, y su capital, la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz. Se destaca como una de las provincias más relevantes en términos agrícolas y ganaderos. En este sentido, Santa Fe sobresale por su producción de aceite de soja, seguida de la actividad ganadera y, en tercer lugar, la industria láctea (Gobierno de la República Argentina, 2022). El constante incremento en las exportaciones ha consolidado a Santa Fe como la segunda provincia más exportadora de Argentina, solo superada por Buenos Aires, durante los años 2021, 2022 y 2023 (INDEC, s.f.). Desde una dimensión institucional, Santa Fe ha demostrado un enfoque proactivo hacia la gestión de relaciones internacionales, particularmente con China. La administración de estas relaciones se concentra en el Ministerio de la Producción, que supervisa la Secretaría Región Centro y Relaciones Internacionales. Esta secretaría representa a la provincia en la Mesa Ejecutiva del Comité Ejecutivo de la Región Centro y coordina actividades de cooperación internacional. Un rasgo distintivo de Santa Fe, en comparación con las demás provincias argentinas, radica en la designación, por parte del gobierno provincial, de un funcionario específico encargado de gestionar los “Asuntos relacionados con la República Popular China”. 7 Esta iniciativa evidencia un enfoque estratégico y una institucionalización de las relaciones con dicho país. En las últimas décadas, el vínculo entre la provincia de Santa Fe y China, así como entre sus respectivos municipios y provincias, ha experimentado una notable dinámica. Este crecimiento y desarrollo en las relaciones bilaterales se ha caracterizado por una serie de acuerdos comerciales, visitas oficiales e inversiones chinas en la provincia. Los dos hitos más destacados fueron, en primer lugar, la firma en 2005 del Acta de Cooperación entre la Región Centro de la Argentina y la Corporación Nacional China de Ingeniería en el Exterior. En segundo lugar, en 2014, el entonces gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, recibió una delegación del municipio de Chongqing, ocasión en la que se formalizó la firma de un Memorándum de Entendimiento sobre Cooperación entre dicho municipio y la provincia de Santa Fe. Este acuerdo tenía como propósito promover relaciones amistosas y fomentar intercambios en diversas áreas. Además, durante esta visita, se impulsó el desarrollo de un proyecto conjunto de eficiencia energética para la provincia (Gobierno de la Provincia de Santa Fe, 2014). Las visitas oficiales entre funcionarios provinciales y funcionarios chinos han sido un factor clave para fortalecer aún más esta relación. Para ilustrar este punto, se detallan a continuación algunas de las visitas más relevantes que han marcado esta trayectoria (Infobae, 2005; Infocampo, 2009; El Litoral, s.f.; Gobierno de la Provincia de Santa Fe, 2019).
- El por entonces gobernador de Santa Fe, Jorge Obeid, viajó a China junto a los gobernadores de la Región Centro en busca de inversiones en el año 2005.
- El por entonces gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, recibió una delegación de empresarios chinos interesados en invertir en Santa Fe en el año 2009.
- El por entonces gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, viajó a China en el marco de una misión comercial, bajo la coordinación del Consejo Federal de Inversiones, junto a empresarios santafesinos y legisladores de la provincia en el año 2013.
- El por entonces gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, se reunió con el vice primer ministro de China, Hu Chunhua, en la Bolsa de Comercio de Rosario en el año 2019.
Durante la pandemia de COVID-19, la relación entre Santa Fe y China se intensificó a través de videoconferencias para compartir experiencias en la gestión de la crisis. Además, se recibieron donaciones de diversas entidades chinas a municipios y universidades de Santa Fe, lo que evidencia el compromiso y la solidaridad mutua durante tiempos difíciles (Cherini et al., 2024). A su vez, en el año 2021, junto a autoridades de la provincia de Liaoning, se mantuvieron reuniones virtuales con una agenda de trabajo con cuatro ejes: “ciencia y tecnología; cultura; cooperación académica y conservación patrimonial desde un enfoque ambiental” (Gobierno de la Provincia de Santa Fe, 2021). La Universidad Nacional de Rosario constituye una institución fundamental para la provincia de Santa Fe, no solo por su impacto en la formación académica y la generación de conocimiento, sino también por su capacidad de proyectarse en el ámbito internacional. En el marco de las relaciones entre Santa Fe y China, la universidad ha desarrollado iniciativas académicas, como el Grupo de Estudio sobre China y Argentina, vinculado al Instituto de Investigaciones de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales. Estas relaciones alcanzaron un punto culminante en 2022 con la firma de un memorándum de intercambio académico entre la Universidad de Comunicación de China y la Universidad Nacional de Rosario, consolidando la cooperación entre ambas instituciones. En relación con las inversiones chinas en la provincia, las más destacadas están vinculadas a la cadena de producción de la agroindustria. La empresa china COFCO (China National Cereals, Oils, and Foodstuffs Corporation), una de las principales corporaciones agroindustriales a nivel mundial, adquirió dos empresas clave del sector: Noble Group en 2014 y Nidera en 2017. Además, COFCO es propietaria de los puertos de Timbúes y General San Martín. En 2017, con la presencia del entonces gobernador Miguel Lifschitz, la empresa anunció una inversión de 27 millones de dólares para la ampliación de las instalaciones del puerto de Timbúes (La Capital, 2016). Por otro lado, en el ámbito energético, la empresa china Runh Power anunció en 2015 una inversión de 50 millones de dólares para la generación de energía mediante la combustión de biomasa forestal en el departamento de General Obligado (Edición Vera, 2015). Finalmente, en el contexto del ingreso de Argentina a la Franja y la Ruta, el entonces presidente Alberto Fernández anunció durante su viaje a China en 2022 el «Plan de Cooperación de Inversiones de la Franja y la Ruta”, el cual comprende múltiples proyectos para Argentina. Entre estos, se destacan iniciativas destinadas a la provincia de Santa Fe, tales como la construcción de la ruta nacional N 33, que conecta Rufino con Rosario; el “Proyecto Bio Futuro Energía Regenerativa”; así como la conexión física Paraná-Santa Fe y obras complementarias (DangDai, 2022). En cuanto a la dimensión comercial, las relaciones entre Santa Fe y China han experimentado un notable crecimiento en las últimas décadas, consolidándose como un vínculo estratégico que posiciona a Santa Fe como la provincia líder en exportaciones hacia China. Los principales productos enviados son agrícolas, destacándose la carne y la soja como los más relevantes (DangDai, 2020). En 2021, los principales destinos de las exportaciones santafesinas fueron India (10,9 %), China (7,7 %) y Brasil (6,8 %). Estos datos destacan la significativa importancia de China como uno de los mercados prioritarios para los productos de la provincia (D’Angelo & Terré, 2022). Sin embargo, en 2022, China se posicionó en quinto lugar como destino de las exportaciones santafesinas (Instituto Provincial de Estadística y Censos [IPEC], 2023). Para 2023, China ascendió al segundo lugar entre los destinos de las exportaciones provinciales. Los principales productos enviados fueron “carne bovina deshuesada y congelada (Carnes); aceite de soja en bruto, incluso desgomado (grasas y aceites); y porotos de soja, excluidos para siembra (semillas y frutos oleaginosos)” (IPEC, 2024, p. 11).
7. Conclusiones
China está adquiriendo una relevancia cada vez mayor a nivel global, y Argentina no es ajena a esta dinámica. A lo largo de este artículo, se analizó la relación entre el gigante asiático y la Región Centro de la Argentina, compuesta por las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. Este análisis se enmarca en los cambios globales que han transformado la centralidad del Estado-nación, dando paso a una mayor participación de actores subnacionales en las relaciones internacionales, lo cual se traduce en oportunidades y desafíos específicos para estas provincias. Uno de los aspectos destacados en el análisis es la composición de las exportaciones de la Región Centro hacia China. Estas provincias se caracterizan por exportar principalmente commodities o productos de bajo valor agregado. Aunque esta característica puede ser vista como una debilidad, el potencial de agregar valor a la canasta exportadora puede convertirse en un motor para el desarrollo socioeconómico de las provincias, generando más empleos y fortaleciendo las economías locales. En este sentido, resulta clave implementar estrategias que impulsen la diversificación y aumenten el valor de los productos destinados al mercado chino. Por otro lado, la dimensión institucional se presenta como una fortaleza en la relación entre la Región Centro y China. Amparadas en el artículo 124 de la Constitución Nacional, las tres provincias han desarrollado un vínculo institucional ascendente con China, basado en la construcción de confianza mutua. En este contexto, Córdoba se destaca como la provincia mejor posicionada gracias a sus iniciativas más proactivas y a los resultados alcanzados en el fortalecimiento de los lazos institucionales con el gigante asiático. En conclusión, la relación entre China y la Región Centro de la Argentina ilustra cómo los actores subnacionales pueden desempeñar un papel estratégico en el escenario global. Si bien existen desafíos vinculados a la primarización de las economías provinciales, también existe un enorme potencial para avanzar en la agregación de valor y la diversificación productiva. Además, la solidez institucional constituye un pilar fundamental para consolidar y expandir esta relación, posicionando a la Región Centro como un actor clave en la construcción de un vínculo sino-argentino que sea beneficioso para ambas sociedades.
[1] Publicado originalmente en https://fundacionhanaq.org/papers/2025/el-tiempo-de-las-provincias-caracteristicas-y-desarrollo-reciente-de-la-relacion-entre-la-republica-popular-china-y-la-region-centro-de-la-argentina/