En el marco de la declaración del 25 de Noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en memoria de las hermanas Mirabal, que fueron asesinadas de manera brutal ese día de 1960, en la República Dominicana, hemos de levantar nuestras voces para seguir poniendo de manifiesto la persistencia de la violencia contra la mujer como una crisis global de derechos humanos[1].
El panorama actual muestra un claro desmantelamiento de las políticas públicas en relación a las políticas de género y el abandono por parte del Estado de su deber de garantizar derechos a las mujeres. La falta de financiación, la reducción del espacio que estas problemáticas ocupan en la agenda pública y la creciente circulación de discursos que cuestionan los derechos de las mujeres y diversidades marcan este retroceso. Debido a esta tendencia mundial, un nuevo informe de ONU revela que más mujeres corren el riesgo de sufrir violencia: el 34% de un total de 428 organizaciones han suspendido o cerrado programas destinados a combatir la violencia contra las mujeres y las niñas. Más del 40% han reducido o clausurado servicios vitales como refugios, asistencia legal, contención psicológica y atención sanitaria.[2] Es alarmante conocer las cifras del abandono estatal a nivel nacional: el presupuesto para las políticas de prevención y atención a la violencia de género cayó un 85% entre 2023 y 2024.[3]
Este retroceso de los Estados no solo debilita las respuestas frente a las violencias tradicionales, sino que también agrava un fenómeno en expansión: la violencia de género digital.
Este año, con motivo de la conmemoración de esta fecha, ONU Mujeres lanzó la campaña «Únete -16 Días de Activismo” (del 25 noviembre al 10 diciembre) para poner fin a la violencia digital contra las mujeres y las niñas, atento al aumento, en los últimos años, del uso de las herramientas digitales para acechar, acosar y abusar de mujeres y niñas y que, en muchos casos, ha llegado a traspasar la virtualidad desembocando en la vida real en forma de coacción, abusos físicos e incluso femicidios.
La violencia digital afecta en mayor medida a las mujeres que a los hombres en todos los ámbitos. Esta situación se agrava aún más para aquellas mujeres que enfrentan formas de discriminación cruzada -por motivos de raza, clase, género, orientación sexual, discapacidad, entre otras -, lo que evidencia la necesidad de abordar la violencia desde una perspectiva interseccional que reconozca cómo estas múltiples condiciones amplifican los riesgos y vulnerabilidades.
En este contexto, en que la violencia digital se está intensificando, cerca de la mitad de las mujeres y niñas del planeta que acceden a la tecnología todavía no cuentan con una protección legal contra el abuso en línea. Si bien es cierto que se están logrando ciertos avances como, por ejemplo, la Ley de Seguridad en Línea del Reino Unido y la Ley Olimpia en México; la Ley sobre la seguridad en línea de Australia y el Reglamento de Servicios Digitales de la Unión Europea, estos esfuerzos continúan siendo dispersos frente a un desafío de características transnacionales.
Entre sus recomendaciones, ONU Mujeres plantea, por nombrar algunas: impulsar la cooperación global para asegurar que las plataformas digitales y las herramientas de inteligencia artificial respeten estándares éticos y de seguridad. Y también incrementar las inversiones en prevención y transformación cultural mediante formación en alfabetización digital y seguridad en línea para mujeres y niñas, además de programas que contrarresten las dinámicas tóxicas del entorno digital.
En conclusión, el contexto actual, nos enfrenta a la necesidad de reforzar los compromisos globales y estatales para garantizar los derechos de mujeres y niñas. Las cifras alarmantes de femicidios, el desmantelamiento de políticas públicas y la creciente violencia digital evidencian un retroceso que pone en riesgo vidas y libertades. Frente a este panorama, resulta imprescindible que los Estados asuman su responsabilidad mediante financiamiento adecuado, marcos legales sólidos y programas integrales de prevención y protección. Asimismo, la cooperación internacional y la transformación cultural se vuelven indispensables para construir entornos – tanto físicos como digitales- seguros, justos y libres de violencia para todas las mujeres, niñas/os, adolescentes y diversidades. Sólo a través de acciones firmes, sostenidas y colectivas será posible avanzar hacia una sociedad más igualitaria y libre de violencias.
Verónica del Valle
Jorgelina Ferraris
Rosana Riva
Integrantes
Centro de Estudios en Género(s) y Relaciones Internacionales
IRI-UNLP
Fuentes
- Observatorio en las violencias de género. Ahora que si nos ven. https://ahoraquesinosven.com.ar/
- ONU “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 25 de noviembre”. https://www.un.org/es/observances/ending-violence-against-women-day
- ONU “Los recortes se ceban con las organizaciones que protegen a las mujeres de la violencia”. https://news.un.org/es/story/2025/10/1540636
- ONU Mujeres “La violencia digital se está intensificando, pero casi la mitad de las mujeres y niñas del mundo carecen de protección jurídica frente al abuso digital” https://www.unwomen.org/es/noticias/comunicado-de-prensa/2025/11/la-violencia-digital-se-esta-intensificando-pero-casi-la-mitad-de-las-mujeres-y-ninas-del-mundo-carecen-de-proteccion-juridica-frente-al-abuso-digital
- ONU Mujeres “16 Días de activismo contra la violencia de género” https://www.unwomen.org/es/participa/16-dias-de-activismo
Referencias
[1]A nivel global, casi 1 de cada 3 mujeres han sido víctimas de violencia física y/o sexual al menos una vez en su vida. Cada diez minutos, una mujer o niña muere a manos de su pareja u otro miembro de la familia. A nivel nacional las cifras de femicidios entre el 1 de enero y el 29 de septiembre fueron 178 femicidios (1 femicidio cada 36 horas).
[2] https://news.un.org/es/story/2025/10/1540636
[3] https://acij.org.ar/se-profundiza-el-desmantelamiento-de-las-politicas-de-prevencion-y-atencion-a-la-violencia-de-genero/